capítulo 2, Tengo trabajo

Ella salía e iba a las instituciones a preguntar pero le decían que esperara a que la llamaran y se iba triste a casa todos los días.

— ¿Quién va a contratar a una profesora sin experiencia y sin referencias ?

decía Adri colocando su cara en el borde de la mesa de la cocina cuando llega su hermano John.

— ¿Oye,qué te pasa?— dijo John con pesar.

—No consigo trabajo.

—Pero hermana tu buscas solo de profesora, puedes buscar otra cosa.

— ¿Otra cosa,cómo que? yo estudié para ser profesora es lo que me gusta.

— Hermana pero puedes optar por otros cargos, en las escuelas hay muchos empleos no solo los maestros, sabias.

— ¡Al grano mocoso!.

— Puedes trabajar de limpieza, de cocinera sabes cocinar bien, hasta de seguridad si quieres luego puedes ir escalando ¿no crees?

— ¡mmmmmm!, creo que esta vez te voy a dar la razón, por que me urge

— Además ningún empleo es menos que otro todos son importantes.

— ¡Wao! en que momento te me volviste tan reflexivo y maduro mocosito.

— En el mismo momento en que tu te pusiste vieja ja, ja, ja.

— ¡Mira ven acá mocoso, respétame!.

John sale corriendo alrededor de la mesa y Adri intentaba atraparlo los dos se reían y reían hasta que entró Ana.

John Era el hermano mejor de Adri tenia 15 años era un chico muy maduro para su edad, excelente estudiante, Delgado, piel Blanca, ojos cafes, cabello rizado, amaba el fútbol.



— como me hacía falta ver sus locuras por la casa— comento Ana.

Adri atrapa a John y le cae a besos y abrazos.

—Te amo moscosito.

—Y yo a ti brujita.

Llego la tarde todos se reunían para comer juntos siempre lo habían hecho, comían y reían y se contaban todo lo que habían hecho en el día.

Adrián

— Hoy estuvo muy fuerte el trabajo nos tocó levantar una carga que se cayó del camión, tardamos como 4 horas me duelen los brazos.

— Tranquilo mi amor ahorita le hago unos masajes y lo consiento muack, muack.

— Mamá por favor sin demostraciones de cariño en la mesa por favor— comentó John.

Todos reían, terminaron de comer y se fueron a dormir.

A la mañana siguiente Adri se levanta temprano y se viste semi formal para ir a las instituciones y pedir trabajo en lo que fuera.

Salió muy contenta y mentalmente se decía hoy conseguirás un trabajo claro que sí hoy sí!!.

Paso por todas las instituciones preguntando nuevamente incluso propuso ser de mantenimiento pero no la aceptaron.

Cuando se disponía a ir de vuelta a su casa recibe una llamada.

—Señorita Adri sandoval buenas tardes.

—¡Buenas tardes! ¿con quien tengo el gusto?.

—Le habla el Doctor en educación Orlando Rodriguez director del Instituto Colegio Santa Fe, la estoy llamando para informarle que hemos visto su hoja de vida y queremos entrevistarla.

— Oh, que bien, si usted dígame ¿cuándo sería?

—¿ puede hoy mismo?

—¡si!, en 20 min estoy allá.

Ella tomó un taxi y se dirigió a la institución, estaba feliz por fin había logrado una entrevista.

Al llegar la hacen pasar y le muestran la oficina del director.

La secretaria la anuncia y la hace pasar.

Ella entra y se queda sorprendida de ver como la oficina del director fuera tan lujosa.

— Tome asiento Srta Adris Sandoval, Bienvenida

— Gracias Dr Orlando.

— Le aclaro que esta es una simple entrevista de aquí decidiremos que hacer con usted, ¿queda claro?

—¡Ah si como el agua!.

— Muy bien comencemos.

El indago más sobre su vida personal que profesional es que las personas que trabajaban allí debían tener una vida y conducta respetable vivo ejemplo de vida a seguir.

— Muy bien Señorita mañana la esperamos a las 7 a.m.

— ¿Eso quiere decir que tengo el trabajo?

— Sí, en estos momentos queremos gente joven.

— Le prometo que no se arrepentirá Dr Orlando.

Adri salió muy contenta de aquella institución quien iba a pensarlo que en la más prestigiosa era de donde la contratarían, cuando iba saliendo de la institución vió al vigilante que le recibió su hoja de vida, se le acercó y lo abrazo dando las gracias.

- Señorita me llamarán la atención por esto

- No importa yo les explico después.

soltando el abrazo.

- Muchas gracias por haber tomado el tiempo de entregar mi hoja de vida.

- Solo lo hice porque la vi muy preocupada y triste.

- Yo me llamo Adri seré la nueva profe ¡muchas gracias!

- Yo me llamo Julio y estoy a sus órdenes profe.

Adri se despidió de Julio con otro abrazo y se fue a su casa, llego feliz dando la noticia y preparando todo para el día siguiente, llamo a su amiga Laura le contó lo que había pasado y ella estaba sorprendida.

La noche pasó y Adri estaba muy emocionada.

Se levantó temprano por la mañana se vistió casual y se fue.



Llego temprano a su primer día de trabajo, le dieron el uniforme ý le asignaron su grado.

Ella emocionada entró al salón de clases para esperar a sus alumnos.

Era un salón muy hermoso, con todo lo necesario y más para inspirarse a enseñar, ella quedo maravillada.

Se sentó y comenzó a esperar a los niños, que llegaron en compañía del director Dr Orlando.

Presento a Adri y la dejo sola con los niños, ella noto que no había tanto protocolo y decidió comenzar la clase, eran niños pequeños así que no tardó en hacer varios juegos, las risas se escuchaban en el salón de a lado, luego dibujaron, pintaron, repasaron la lección todo fluía muy bien para ser su primer día.



Llegó la hora de salida, los niños iban felices y cada niño contaba a sus padres lo bien que lo habían pasado.

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En otra parte de la ciudad

—Ya no puedo con Estefanía cada vez esta más rebelde no sé que le pasa necesito que estudie y se prepare si no le van a quitar su herencia.

— Williams ya te lo dije coloca las clases particulares así la vigilas desde casa.

— Es que también mi trabajo me impide estar atenta a ella las 24 horas del día y ya con esta profesora son 10 las que renuncian, no les importa la paga simplemente Estefanía las hace que renuncien.

— Entonces ¿qué piensas hacer, dime? creo que no te queda otra opción vuelve a llamar a tu amigo y pídele otra profesora.

— No me queda otra opción.

Williams Smith, CEO de constructoras Smith Hombre de 40 años multimillonario, de semblante imponente, seriedad ante todo, pocas veces se ve sonreír, de 1.90 de estatura, Delgado, piel Blanca ojos cafés, cabello liso con canas y algunas veces se deja barba, su físico nada que llame la atención, soltero, con una hija adolescente que nadie quiere por rebelde y que ha sido expulsada del Colegio por mala conducta.



—Sr Smith ¿A que debo su llamada?.

📱—Espero este bien, profesor Orlando, ante todo darle las gracias por todo lo que ha hecho por nosotros, y comentarle que la profesora Rojas acaba de renunciar.

—Williams hijo sabes que te aprecio tu padre fue mi mejor amigo y te considero familia, pero Estefanía esta pasando por un momento de rebeldía que no se deja ayudar, creo que deberías contactar algún psicólogo si no quieres los del colegio.

—Lo se profe, pero me gustaría intentar con otra profesora se que ya casi todas han pasado por aquí, pero tal vez quede alguna .

—Todas Williams, todas ya han trabajado con Estefanía, no te prometo nada, pero intentaré convencer a alguien de que vuelva si no fani perderá el año.

—Esta bien profe Orlando esperaré su llamada.

— ¿Que te dijo Orlando?

— Bueno Rubén intentará convencer a otra profesora de que venga a dar las clases particulares.

Rubén Steven era el abogado y mejor Amigo de Williams, delgado, alto, rubio, ojos verdes, muy inteligente y mañoso con las leyes, abogado muy reconocido no había perdido ni un caso., siempre lo mantenía al tanto de todo y de las jugadas que debían hacer para siempre estar un paso adelante de la competencia en cuanto al ámbito legal.



Colegio Santa Fe

En la dirección se reunieron los profesores más antiguos con el profesor Orlando, discutían quien debía volver a trabajar con Estefanía.

Nadie quería, todos la habían pasado mal trabajando con ella, la paga muy buena pero aún si no querían trabajar allí.

Una de las profesoras hace una intervención.

—Y que tal si colocamos a la profe nueva, hoy a Los niños los vi contentos, cuando se despedían de ella, creo que la pasaron muy bien.

— Jajaja ella no podrá con Estefanía, no durará ni un día.

— Démosle una oportunidad, aunque creo que puede durar dos dias—decía otra profesora

Orlando interviene.

—No sería nada mal, pero la alertaré de todo primero.

Las demás profes se reían y decidieron hacer una apuesta, para ver cuánto tiempo duraría Adri como profe de Estefanía.

Transcurrido unas semanas semana, Adri era feliz trabajando con los más pequeños, hasta que el director la mando a buscar para conversar algo serio con ella.

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