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Thomas/Sean.

Revise las veces que fue necesario el mapa entre mis manos, el calor y el peso de mi mochila se hicieron mayores entre la desesperación de que anochezca de nuevo y no llegar adonde debería.

Los edificios lucen como árboles de cedro, para mi que nunca había salido mas lejos del límite que separa el bosque y el pueblo.

Al final de tres horas más, llegué.

Tal como Han lo describió, las casi cuarenta gradas estrechas entre un almacén y el pub. Baje en la penumbra distinguiendo las pinturas raidas en la pared, todas forman un mosaico quebrado.

La ultima puerta entre dos columnas doradas que relumbran y un cartel que dice: Lawless

Sonreí y aun siguiendo indicaciones toque la puerta en dirección a las agujas del reloj haciendo el circuito completo y separando cada toque por tres segundos.

La puerta se abrió y unos ojos azules resaltaron entre la poca luz.

—Stell, clasificación D00279, sombrero blanco...

Creo que en algún punto mi voz vacilo y el sudor en mis manos no ayuda.

La puerta se abrió por completo y con eso las luces en amarillo neón. Pude distinguir un naranja fantasía en su cabello, lentes de montura gruesa y vestimenta deportiva.

—Pasa.— Su voz es gélida.

Camino hasta un sofá y el me señala así que respondo dejando mi mochila y gorra ahí.

Un grupo de chicos sale detrás de la cortina de luces led que esta apagada y me observan.

—Bien, Stell esta aquí.— él chico de cabello naranja me señala.

—¿Eres Han...? — Además de que nunca había escuchado su voz o visto fotos de ellos, lo siento mas cercano. Quizás solo son ideas mías.

—Han.— dice el señalándose.— Prince.— Señala a otro que lleva unos cascos azules y el cierre de la chaqueta hasta la barbilla.— Win.— Él alza la barbilla resaltando su arete en forma de ancla, su ropa se confunde entre el brillo —. Y ese de ahí es Dawn.— este ultimo tiene un toque de vestimenta formal y colores extravagantes.

Alzo la mano para saludar a todos. Parecen agotados y con sombras bajo los ojos.

—No hay mucho que necesites saber. Nada de platicas extra personales, respetar los límites y no salir del plan concreto.— dijo Han mientras todos se devuelven a sus lugares.

Asentí. No hace mucho tiempo los fui conociendo en rojos puntos de la red. Como hackers, ellos tienen distintos rangos y aspiraciones pero lo mas importante ahora es conseguir información sobre Marcus antes de que me encuentre. Me siento en una silla y comienzo a elegir mis palabras con cuidado.

—No logré conseguir mas información salvo esto.— extendí los papeles unidos por un clip. Son testificantes de propiedad, autos y un currulum gastado.

Han los tomó asintiendo mientras pasa las hojas y apenas noto el movimiento.

—Según lo que hablamos antes necesitas investigar este tipo, ¿no?

Asentí.

—¿Traes el dinero?— preguntó.

El escalofrío me recorrió.— No pude conseguir mas de la mitad, pero, puedo trabajar mientras...no se, compensarlo.

—¿Traes equipo?

Mi cara ardió de vergüenza y negué viendo la ventana bloqueada por el concreto.

—Seré condescendiente por el tiempo que nos hemos ayudado en la red y te dejare usar la utilería, pero no te alegres, te cobraré intereses.

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