Capítulo 11

Abigail elige dos vestidos y Apolo aparece y le pide a la vendedora que muestre más, él mismo encuentra dos modelos y se los da a Abigail.

Abigail Miller

-Apolo, no necesito vestidos, el armario está lleno de ropa que la mayoría ni siquiera se ha puesto.

Apolo Becker

-Mi amor, pruébate estos dos para que pueda verlos en ti.

Me siento y la veo ir al probador.

Abigail Miller

Me puse el vestido que eligió Apolo y que realmente tiene buen gusto, era escotado en la espalda y la parte delantera favorecía mi cuerpo.

Salgo del probador y él se acerca a mí.

Apolo Becker

-Estás preciosa, mirándote con ese vestido, es difícil resistirse a lo que quiero hacer contigo esta noche.

Abigail Miller

-Apolo, contrólate.

Clara Soares

Entro en la tienda y veo a Abigail, con su supuesto prometido.

Frank

-¡Mira quién está aquí!

Me acerco a Apolo para saludarlo.

Apolo Becker

-Oye, Frank.

Frank

-¿Vienes con la novia a comprar ropa?

Apolo Becker

-En realidad, vine a hablar con Greg y ayudé a mi futura esposa a elegir nuevos vestidos, ¿y tú? ¿Esta es tu novia?

Frank

-¡Es una amiga! Clara, este es Apolo, un amigo mío, dueño de la empresa que hará la fiesta esta noche.

Apolo Becker

-Si quieres más invitaciones para la fiesta de esta noche sólo díselo a Frank.

Abigail se acerca y la presento a los dos.

Clara Soares

-Ya conozco a Abigail.

Abigail Miller

-¿De dónde nos conocemos?

Clara Soares

-¿No te acuerdas?

Apolo Becker

-Abigail sufrió un accidente de avión y perdió la memoria, por lo que no recuerda nada.

Clara Soares

-¡Oh, Dios mío!

Sigo pensando que ahora sé la razón por la que no buscó a mi hermano, prefiero no decir nada, es mejor que él mismo hable con ella.

Abigail Miller

-Me gustaría poder recordarte, pero ¿cómo nos conocimos?

Clara Soares

-Tú solías trabajar en la empresa de mi hermano.

Prefiero decir eso, pero en realidad la conocí en un almuerzo, cuando Paulo la presentó como su novia de entonces.

Abigail Miller

-¿Y qué hacía yo en la empresa?

Clara Soares

-Has sido uno de los mejores en Marketing. Bueno, ahora voy a probarme un vestido para ponérmelo hoy.

Las horas pasan y Abigail ya estaba lista para la fiesta en la empresa de Apolo.

Apolo Becker

Entré en la habitación, miré a Abigail y le dije:

-Estás preciosa, mi amor.

Abigail Miller

-Gracias, tú también estás preciosa.

Apolo Becker

-¿Podemos irnos?

Abigail Miller

-Digamos adiós a Adam y podemos irnos.

Pasamos por la habitación de Adam, le damos un beso de buenas noches y lo abrazamos, luego salimos y subimos al coche en dirección al espacio donde será la fiesta.

Apolo Becker

Después de unos minutos llegamos a la fiesta y en la entrada los fotógrafos nos hacen fotos.

Reportero

-Sr. Becker, ¿es cierto que se va a casar pronto?

Apolo Becker

-¡Sí!

Abigail Miller

Miro a Apolo y me da un beso y luego entramos.

Apolo siempre me presenta como su prometida a todos los que se acercan, después de unos minutos me siento en una de las mesas mientras Apolo sigue hablando con los invitados.

Paulo Soares

Hacía una hora que había llegado a la fiesta con Clara y Fred, se llevaban muy bien, yo sólo miraba a Abigail junto a Apolo y trataba de entender cómo no se acordaba de mí.

Después de un rato la veo sentada sola, así que me acerco a ella.

-¡Buenas noches Abigail!

Abigail Miller

-Buenas noches, me disculpo por la pregunta, pero ¿te conozco?

Paulo Soares

-¡Sí! Nos conocemos.

Abigail Miller

-¿De dónde eres?

Paulo Soares

-Desde Brasil, trabajaste conmigo en mi empresa de Marketing.

Abigail Miller

-Lo sé, eres el hermano de Clara, ¿no?

Paulo Soares

-¿Te acuerdas de mí Abigail?

Mis esperanzas eran escasas, hasta que dijo lo de mi hermana, pensé que se acordaría de mí y de algo que ambas vivimos.

Abigail Miller

-Lo siento, sólo sé que eres el hermano de Clara, porque la he conocido hoy y he tenido la oportunidad de hablar con ella.

Paul Soares

-¿Y esa pulsera que llevas?

Era la pulsera que le había regalado la mañana que hizo el viaje.

Abigail Novais

-Lo tengo desde hace tiempo, no sé cómo lo conseguí, ya que sufrí un accidente y se me borró parte de la memoria.

Paulo Soares

-Yo soy el que te dio esta pulsera.

Abigail Miller

-¿Es un regalo de cumpleaños o algo así?

Paul Soares

-En realidad se lo di el mismo día que tuvo el accidente.

Apolo Becker

Me acerco a Abigail que estaba hablando con un hombre y hablo:

-¡Hola! Buenas noches.

Paulo Soares

-¡Buenas noches! ¿Puedo hablar contigo a solas?

Hablo con Apolo que aparece mientras yo hablaba con Abigail.

Apolo Becker

-No te preocupes, lo que tengas que decir, puedes decirlo delante de mi prometida, no le oculto nada.

Paulo Soares

-Esa no es la cuestión, pero creo que lo que tengo que decir, preferirás escucharlo solo.

Abigail Miller

-No te preocupes Apolo, puedes hablar con él, yo te espero aquí.

Paul Soares

-Veo que la besa y me da rabia por dentro, es demasiado cruel ver a quien amas, no acordarse de ti y seguir mostrando delante de ti gestos de amor por otro, pero no puedo culpar a Apolo, ya que no sabe de quién soy y quién es realmente Abigail.

Apolo Becker

Después de darle un beso a Abigail, hablo:

-Ya vuelvo, mi amor.

Voy a una sala más reservada con Paulo y me siento frente a él para hablar:

-¡Puedes hablar!

Paulo Soares

-No sé quién crees que es Abigail, pero no está soltera.

Apolo Becker

-¿Qué quieres decir? ¿Qué quieres decir?

Paulo Soares

-Abigail Miller es mi prometida, cuando ocurrió el accidente aéreo pensé que estaba muerta, pero cuando vi una foto tuya junto a ella, comprometida, no pude entender, mi prometida no era la mujer que murió en ese accidente, esa mujer que está ahí fuera, pensando que es no sé quién, se llama Abigail Miller, hija única, mi prometida, trabajaba conmigo en el área de Marketing.

Apolo Becker

-Espera, ¿estás diciendo que su nombre es Abigail Miller? Se llama Abigail Maria, es la hermana de mi difunta esposa, la tía de mi hijo.

Paul Soares

-¡Lo siento! La Abigail que describes está muerta, la del salón, no puede ser una tía, ya que no tiene ninguna hermana, es mi prometida que creía muerta, pero en realidad la que murió era la hermana de tu difunta esposa.

Apolo Becker

Escuchar todo lo que dijo me dejó desconcertada, cómo podía estar amando a una persona que ya tenía un prometido, cómo podía traer a mi casa a una mujer que creía que era la tía de mi hijo y no podía ser su tía.

Le miré y le dije:

-¿Estás seguro? ¿Tienes alguna prueba?

Paulo Soares

Saco mi móvil y le enseño fotos mías y de Abigail juntos.

Apolo Becker

-Esto podría ser un montaje, digo tratando de encontrar razones para no creer lo que realmente está sucediendo.

Paulo Soares

-Voy a la galería y muestro un vídeo en el que le pido que se case conmigo.

Apolo Becker

Verla en ese video, fue como si me clavaran un cuchillo en el corazón, me quedé sin aire, sin suelo y lo único que pude sentir fue dolor y decepción, por estar amando a una mujer que llegó a mi vida, pero que no pudo permanecer a mi lado, ya que estaba comprometida con otro.

-¿Podría estar solo?

Veo que Paulo se va y entonces lloro.

Continua...

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