CAPÍTULO. 5 MI MEJOR ACTUACIÓN

***Jean Carlos, se alistó y salió hacia la mansión, que era de su padre y paso a ser de su propiedad por manejar los negocios en España, ya había pasado dos años que no visitaba a su familia pues cada quien tomo su rumbo, aunque a su lado permanecían Brayan y Nicolás, no solo como primos si no también como socios en el negocio, un negocio que viene de generación en generación, los tres hombres desde pequeños fueron muy unidos y lo siguen siendo, apoyándose en cualquier circunstancia, aunque Brayan y Nicolás respetaban a Jean Carlos no solo por ser el mayor, si no por ser el más astuto y predictivo, es como si poseía un don de predecir lo que sucedería, nadie sabía cómo lo hacía, saco la astucia de su papá Yeison, que a pesar de no ser su padre Biológico tenían mucha conexión, en cambio Nicolás era más nerd pues su pasión eran las computadoras y era un excelente hacker y fue quien le sugirió a Jean que contratará a Marcelo cómo su asistente,  sin embargo Brayan se destacaba en los números, la parte financiera era lo de el.. los tres magnates mejor conocido como los tres cazadores, temidos por muchos y odiados por otros.

Una camioneta entro a la propiedad, bajando de ella Jean Carlos, que desde pequeño le gustaba apodarse Jackson Melek era una especie de poder que sentía hasta cuándo el mismo lo mencionaba, en una oportunidad el quiso quedarse con ese nombre pero sus padres no lo permitieron, el hombre con aquel aire de poder, y un semblante sombrío entro a la casa siendo recibido por doña Martha una mujer que se encargaba de atender la casa y también a el joven, siendo está una señora de confianza pues había Sido contratada por Sofia la madre de Jean**

Martha: mi niño volvió, los jóvenes están en el comedor.

Jean: gracias Martha.

(Llegando al comedor)

Jean: buenas, buenas, buenas, que dicen los busca problema.

Nicolás: oh no, yo no me he metido en problemas, mira a Brayan a mí no.

Brayan: prefiero caer en las drogas que en tu lengua Nicolás.

Jean: ja, ja, ja, (sentándose).

Martha: ya les traigo el desayuno. (Todos agradecieron).

Jean: ahora sí Brayan cuéntame todo.

***Mientras tanto en una de las habitaciones de la mansión despertaba Julieta, un poco mareada y aturdida, buscando su celular pero no lo encontraba.***

Julieta: esto es una locura, ahora mi celular, mi hermana, ese maldito de Rocco dijo que la había visto ayer, eso quiere decir que mi hermana está aquí en España, debo encontrarla antes de que ese hombre le haga daño.

***Julieta, miro la gran habitación y al pie de su cama un bolsa con su nombre, ella curiosamente abrió y miro que era ropa, un juego de bragas y brasier, y todo lo necesario, en lo profundo agradeció y fue a hacer su aseo, temiendo salir de la habitación, pues no sabía con que se encontraría.

Al otro lado de la ciudad Zasha, había llegado a una localidad que quedaba a dos horas del centro de la ciudad, buscando una posada para poder descansar y pensar como buscar a su hermana antes de que el maleante de Rocco la encontrará, pero en sus pensamientos no salía aquel hombre que la hacia derretir***

 Zasha: (hablando sola), Dios mío, seguro el lobo ya se habrá dado cuenta de que no estoy, será que me va a buscar? No creo, el lo dijo que no lo haría más, hay que va a pensar la gente yo hablando sola, que estoy loca, pero en esta vida quien no ha hablado sola verdad?.... Y ahora con este tobillo que lo llevo demás de hinchado.

Dos horas después.

Zasha: (sentada en un banco de una plaza) esto parece Narnia, no hay una posada económica dónde quedarme, uufff y ya me está doliendo demasiado el tobillo, en fin…

Hombre: (sentandose en la banca, sacando una navaja y apegandola a un costado de Zasha) no te muevas extranjera, ni volteees, dame todo lo que tienes.

Zasha: (mierda y ahora que, nada Zasha saquemos Mi mejor Actuación) ja, ja, ja, ja, ja, no me haga reír señor, que le puedo dar yo que no tengo ni un euro encima, más bien usted no tendrá algo por allí, que tengo hambre, incluso usted que se la pasa robando y debe ser de esta zona, no sabe o conoce de una posada que me permitan dormir una noche, prometo pagar.

Hombre: (con expresión de aturdido) me estás hablando en serio?

Zasha: vea tengo un tobillo torcido, llevo casi tres horas caminando, y nadie se apiada de mi (lágrimas falsas, que buena actriz soy) deme algo de dinero.

Hombre: (rascándose la cabeza y guardando la navaja) entonces que haces aquí sola, cómo llegaste aquí.

Zasha: (ahí va mi mejor versión) mi esposo es un mafioso, me le escape, y me está persiguiendo, en estos momentos debe estar pensando en matarme, desmembrarme o tal vez que me coman los tiburones.

Hombre: (con cara de sorprendido) es eso cierto?, sabes que? no te creo nada, vamos dame lo que tienes.

Zasha: señor no tengo por qué mentirle.

Hombre: oh no me llame señor, me llamo Darío.

Zasha: (cómo que mucha confianza) bueno Darío, fue un gusto seguiré buscando donde pasar la noche.

Darío: ehm bueno si quieres, le puedo decir a mamá que te dé hospedaje.

Zasha: ehm, no gracias.

Darío: no en serio, mi mamá vive en una de las casas más grande, mi papá es doctor.

Zasha: (que raro) bueno Darío, disculpa que sea entrometida pero por qué robas.

Darío: mmm bueno por qué se me hace divertido, me encanta ver la cara de susto de las personas, ja ja ja ja.

Zasha: (este es un demente y si me pasa como en las películas, el doctor es un asesino, el le lleva las presas y el papá las descuartiza) ehm no no gracias, Adiós.

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