Recorrido

Mónica al ver que Lucius perdió el conocimiento soltó a Roberta para que se lo llevara de ahí

-Mónica edwards: mocoso inservible

- Roberta: *tose* hijo...

Roberta tiene la voz débil, como puede se levanta y carga al pequeño.

Tiempo después Lucius despierta en su habitación, apenas abre los ojos sale corriendo a buscar a Roberta, pero cuando llega a la cocina la ve lavando loza, se pone la mano en el pecho y suspira, pero cuando voltea

-seung edwards: ¿que haces ahí?

-Lucius: yo... Solo veía a mi madre

-seung: ¿a la sirvienta? Ooh, ¿querías robarte algo verdad?

-Lucius: yo... No sé de que estás hablando *se enoja *

-seung: da igual, tengo cosas que hacer, no tengo tiempo para hablar con empleados

Seung mira a Lucius de arriba a bajo y se va

-Lucius: en la fiesta de ayer había tantos bocadillos, se veían deliciosos, lástima que no pude probar alguno

Dice entre murmuros.

Lucius se encontraba en su escritorio cuando se le ocurrió una gran idea. Sigilosamente, se dirigió a la cocina y se escondió en un rincón

- x: ¿esa es la comida de la señora?

- x: así es, llévasela, no la vayas a hacer enfriar

- x: la llevaré inmediatamente - clic * le llega un mensaje*

La mujer saca el teléfono y se da la vuelta para responder el mensaje, en eso Lucius aprovecha y le vuelca toda la sal al plato de sopa.

Comedor familiar

-Mónica edwards: cof, cof ¿Qué es esto? Oye tú, ven aquí

La empleada se asusta y obedece a pasos lentos

Mónica le tira el plato con la sopa caliente en la cara y la obliga a recogerlo

-Mónica edwards: ¿te atreves a salar mi comida? Te recortaré el sueldo de este mes

La mujer no dijo nada y recogió todo, pero por dentro le hervía la sangre, de camino a la cocina se encuentra con Lucius.

Lo ignora y sigue su camino

-Lucius: ¿tú eres la mujer que peleaba con mi mamá ayer, verdad?

Dijo Lucius con una revista en la mano, sin mirar la cara de la mujer

- x: tú, ¡¡eres un fenómeno!! ¿Tú hiciste esto verdad?

-Lucius: yo no podría, no me atrevería

Mientras dice eso se le escapa una risita y se va.

-Lucius: es hora de hacer algo por mi mismo, romperé todas las reglas

Dijo en su mente.

Dos días después

Lucius recorre toda la casa mientras Mónica no está, seung anda en la escuela y no llegará pronto.

-Lucius: esta casa es tan grande...

Mientras caminaba se encuentra un salón con un amplio espacio

Mientras él ponía una mano en un libro escucha que lo llaman desde atrás

-Martín edwards: oye!! ¿que haces aquí? ¿No te han dicho que no puedes salir de tu habitación?

-Lucius: perdone

Lucius agacha la cabeza y sale de la habitación, cuando ya están de espalda se detiene y dice

-Lucius: perdón, ¿acaso nos conocemos? Se que fue usted quien puso la regla de no hacerme ver el sol

Dicho esto sigue su camino

-Martín edwards: espera!!

Lucius se detiene

-Martín edwards: ¿quién te dijo tal cosa?

Lucius sigue caminando y lo ignora por completo, mientras en su mente va diciendo

-Lucius: no soy estúpido, pronto me enteraré de la verdad *frunce el ceño*

En un lugar apartado

-Lucius: mamá *agita la mano*

- Roberta: ¿es mi imaginación? O Lucius está más animado que de costumbre

Roberta acude a su llamado

- roberta: ¿que sucede, amor?

-Lucius: madre, quiero ir a la escuela, todos los niños van, no quiero ser alguien menos

El niño deja caer unas lágrimas de sus ojos, mientras el color de sus pupilas cabían a un rosa claro

- Roberta: mi pequeño, me parte el corazón verte llorar, no estés triste

-Lucius: madre, ¿por que estamos obligados a vivir aquí? Buaaaaa *llora* ¿por que no escapamos y vivimos felices?

Roberta abraza a Lucius fuertemente y le dice

- Roberta: discúlpame mi pequeño... He sido egoísta y no te he puesto atención como se debe

-Lucius: ma... ¿Madre?

- Roberta: yo... Juro que te inscribiré en una escuela, te lo prometo

-Lucius: ¿en serio?

El niño al escucharla decir que irá al colegio se emocionó, ya que siempre ha soñado en ir a una escuela.

-Lucius: Por ahora no puedo hacer nada, me dedicaré a aprender por ahora

Dice en su mente.

Mientras Roberta observa la felicidad de Lucius se dice entre sí

- roberta: ¿ cómo es que se recupera tan rápido? Eso no importa, por ahora le rogare a los amos para que me dejen inscribirlo en una escuela, no me daré por vencido

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