capitulo 18

CONTINUACIÓN........................

Después de desayunar con Franco y dos de sus hombres recibí una llamada, tenía que viajar a Italia ya que era la semana de la moda y mi querido Tom me había mandado una invitación pues sería su invitada especial.

Franco: todo bien?

Fernanda: si, debo atender algunos asuntos y viajar a Italia está misma noche, necesito ver a los hombres que capturaste

Franco: yo me haré cargo de ellos

Fernanda: se pelear mis propias batallas, me dirás dónde los tienes o me harás trabajar el doble

Franco: está bien pero ire contigo y no me importa que no estés de acuerdo

Minutos después ambos subimos a una de sus camionetas y detrás de nosotros venían sus hombres y los míos, salimos de la mansión y después de 50 minutos aproximadamente llegamos a una casa o almacén abandonado a las afueras de la cuidad. Todo estaba en silencio y no se veía ningún movimiento,nos bajamos de las camionetas y pronto mis hombres me rodearon y también había dos hombres más de Franco cuidado mis espaldas

Alan, uno de mis escoltas me dió un arma y dos cartuchos, reviso que el arma este cargada y al ver que sí la coloco detrás de mi espalda, exactamente en mi cintura al igual que los cartuchos, caminamos unos cuantos metros y veo una puerta, está se abre y al entrar veo que había varios hombres y había sido modificada completamente y eran varios pisos hacía abajo, entramos al segundo piso y veo a tres hombres colgado de ambos brazos, sus cuerpos tenían bastantes golpes y sus cabezas colgaban ya que estaban inconscientes

Veo a mi alrededor y hay todo tipo de arma he instrumento para torturar

Fernanda: puedo disponer de las cosas de aquí?

Franco: son todas tuyas

Franco y dos de sus hombres se sientan en los sillones que había en este piso y sólo se dedican a verme, Alan y Óscar se acercan a mí y se quedan detrás de mi

Fernanda: creo que han dormido demasiado, que su despertar sea electrizante

Ambos empiezan a colocar lo necesario y sin más empiezan a pasar electricidad por su cuerpo hasta que los tres hombres gritan por piedad, amo escucharlos gritar, me acerco a Gael y empiezo con preguntas

Fernanda: quien te envío?

Gael: no te diré nada perra, puedes torturarme pero no diré nada

Saco mi arma, le quitó el seguro y le disparó en una de sus rodillas, Gael grita y me insulta pero no dice nada que otra veces no me hayan dicho antes

Fernanda: quien te mando?

Este aún sigue sin decir nada por lo que le disparó en la otra rodilla y en un brazo

Fernanda: habla y hay si me dices lo que quiero te dejare vivir

Gael: me... me contrataron para hacerme pasar por tu escolta, pero para.... eso mate al teniente Gael y aquí estoy.... no sé quién me mando solo tenía que ayudar al hombre con quién bailaste

Y como dije lo dejaría vivo si me daba lo que quería pero al no hacerlo le disparó en la cabeza, me acerco al segundo hombre que fue él que me jalo para bailar, le disparó en su masculinidad y esté grita de dolor

Fernanda: quien te mando?

x: por favor no me mates, no se quién me mando

Le disparó esta vez en una pierna y después en un hombro, recargo mi arma y la pongo en mi cintura, tomo un cuchillo y lo clavo en su pierna dónde está la herida de bala

X: hablaré, habla...re, yo tenía que secuestrarla y llévarla al punto de encuentro, como ví que no iba ser fácil llevarla le ofrecí dinero al mesero y le di una droga para así poder dormirla

Fernanda: quien te pidió secuestrarme?

X: El ruso Rogelio kgnor, el líder de la mafia rusa, está obsesionado con usted, la quiere para hacerla su esposa sea por las buenas o a las malas

No solo tenía que lidiar con un hombre que se sentía mi dueño si no que también con un loco obsesionado conmigo, vaya el ser hermosa y sexy si que era difícil hoy en día, terminó con su agonía cortándole el cuello de lado a lado. Veo al mesero y aunque me puso la droga es en parte inocente, pero no podía dejarlo libre, no podía arriesgarme así que solo le dispare en su cabeza y terminé con su sufrimiento

Me limpio las manos y veo que mi ropa se había manchado con gotas de sangre, muevo mi cabeza en negación y siento como alguien se pone delante de mi

Franco: si ya terminaste aquí, mis hombres limpiaran y se harán cargo de los cuerpos

Fernanda: si gracias, ahora debo irme necesito dejar algunos asuntos arreglados para irme a Italia

No dejo que diga algo, solo me doy la vuelta y salgo de aquel lugar seguida de mis hombres, salimos de ahí y sin más nos subimos a la camioneta, Alan me entrega mi bolso y al sacar mi teléfono veo que tengo miles de llamadas de Álvaro y su hermana, como también mensajes pero todas ellas fueron cuando yo estaba siendo drogada.

Hola queridas lectoras, espero que les este gustando está nueva historia, lamento mucho no poder estar actualizando diario pero mi celular sufrió ahogamiento a manos de mi hijo y por mucho que lo mande a reponer no quedo bien, espero pronto cambiar de cel y seguir con usted, les mando un saludo y por favor tenganme paciencia

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