capitulo 2: Inicio de mi triste historia

Estoy despertando después de descansar algunas horas, luego de haber dado a luz a mi hermosa pequeña. Le puse Antonella en honor a mi abuelito materno que se llamaba Antonio, él era muy bueno conmigo, ya hace 3 años que se murió, para mí fue un golpe muy duro, ya que en realidad él fue el único que siempre me quiso y se preocupó por mí.

Voy al cunero, miro a mi hermosa niña, es tan pequeña e inocente, no puedo creer que este ser tan bello haya salido de mí, sin lugar a dudas es lo más hermoso que me ha pasado en la vida, te amo tanto mi pequeño tesoro, prometo cuidarte y ser la mejor madre.

He pasado un sin fin de cosas para llegar a este punto de mi vida, les voy a contar mi triste historia y para eso tenemos que ir varios años atrás.

10 años atrás

Hola abuelito ya llegué del colegio.

Cállate escuincla escandalosa que vas a despertar a tu hermanito.

Perdón mamita no sabía que estaba dormido, mira te traje esta tarjeta del día de la madre, porque eres mi mami y te quiero mucho.

Déjame ver.

Ten mami la hice con mucho amor.

Mira lo que hago con tu amor. Shas shas shas

Mi madre rompió la tarjeta que con tanto cariño yo había hecho para ella, pero con ese acto de crueldad no solo la tarjeta quedo hecha pedazos, así quedo igualmente mi corazón, era una niña de 11 años que deseaba un poco de amor y atención de su madre, pero lo único que conseguía era desprecio y maltrato de su parte.

Corrí llorando a mi habitación, no entiendo Diosito porque mi mamá no me quiere, si todas las madres quieren a sus hijos, pero ella me odia me desprecia, por más que me esfuerzo en sacar buenas calificaciones en ser obediente y buena, ella me trata tan mal.

Pase la tarde encerrada llorando, hasta quedarme dormida, mi corazón dolía por el desprecio de mi madre, como podía ser tan cruel soy su hija. Me desperté al sentir un beso en mi frente, abrí mis ojos con la ilusión de que fuera mi madre arrepentida de haber roto la tarjeta que le di, pero era el rostro de mi abuelito Antonio el que tenía frente a mí, me lance a sus brazos a llorar.

Abue porque mi mamá me odia tanto, que le he hecho, yo la amo porque es mi mamá, pero ella solo me maltrata.

No llores mi niña es algo complicado, pero ella te quiere a su manera, pero en el fondo te quiere, límpiate esa carita, una niña tan linda como tú no debería de llorar o te vas a poner fea.

Te quiero tanto abuelito, eres tan bueno conmigo.

Yo también te quiero ve a darte un baño y vamos a cenar.

Ese fue uno de los tantos desprecios que mi madre me hizo, cada día era más, dura conmigo, soy la mayor de 3 hermanos, si tengo 2 hermanos varones, bueno medio hermanos Daniel de 6 años y David de 1 año hijos de mi madre con su pareja Darío Fuentes, un hombre malo que toma demasiado, llega borracho y la golpea y ella luego se desquita conmigo, yo pago su rabia y frustración de vivir con un mal hombre que la maltrata.

Con solo 11 años debo cumplir con las tareas domésticas más pesadas, lavar los baños, y la ropa de todos a mano, porque no tenemos lavadora, y preparar el desayuno antes de irme al colegio, mi madre me levanta a las 4 am para que haga todo, y si una pieza de ropa no queda bien limpia, me hace lavarla toda de nuevo. Hago todo sin protestar, porque si digo algo me golpea con una vara.

Madre ya he terminado todo, me voy al colegio, hoy hay una reunión de padres para hablar del acto de promoción la maestra dice que debes asistir.

Mira mocosa no seas estúpida yo no voy a ir a ninguna reunión, métete a la cabeza que tú no sirves, sino para ser una sirvienta, no se porque vas a la escuela, si no fuera por mi padre no irías más, Así que le dices a tu maestra que no vas a ir para esa ridícula promoción.

Lágrimas bajaban por mis mejillas, está bien madre yo le digo a la maestra, salí rápido el solo ver el odio y el desprecio en el rostro de mi madre me rompe el alma.

Llegue triste a la escuela, estuve distraída toda la clase, pensando en las duras palabras de mi madre, será cierto que no sirvo para nada, que voy a ser una sirvienta, pero si mi abue dice que soy brillante y tengo buenas calificaciones.

Amanda, Amanda

Oh perdón maestra estaba distraída que me estaba preguntando.

Te dije que si sabías cuál era el resultado de 3570÷6.

Maestra es 595

Riiiiiiiing sonó el timbre.

Muy bien niños, es hora del recreo pueden salir, Amanda necesito hablar contigo quédate por favor.

Amanda te ocurre algo, tienes algún problema te veo distraída, y tu mamá no vino a la reunión.

Yo agaché mi cabeza no quería que mi maestra viera las lágrimas que amenazaban con salir de mis ojos color miel, con un nudo en la garganta dije estoy bien no me pasa nada, mi madre no asistió, porque está ocupada con mi hermanito.

Mira cielo algo te ocurre, tú no eres así te conozco y sé que algo está pasando, puedes hablar conmigo soy tu amiga y voy a ayudarte en lo que necesites.

Mi rostro se humedeció por las lágrimas que corrían por mis rosadas mejillas, maestra mi mamá es mala no vino porque ella dice que no sirvo para nada, y que si no fuera por mi abuelo me sacaría de la escuela para que no estudiara más, no quiero que se lo diga por favor, si no ella me castigara y será peor para mí. Solo quería asistir al acto de promoción, pero eso no será posible dije entre sollozos.

Amanda tú eres una niña dulce e inteligente, eres la más aplicada de toda la clase, no debes dejar que esas palabras te afecten, eres muy valiente al contarme esto, hablaré con tu abuelo y juntos buscaremos una solución, tú vas a ir al acto ,de promoción yo te voy a ayudar. Te quiero mi niña no llores.

Maestra porque usted no puede ser mi mamá y no esa mujer que me odia, la abrace y llore un su pecho, por primera vez sentí el amor de una figura femenina en mi vida, deseaba con todo mi corazón que ella fuera mi mamá.

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