capítulo 3

Manuel: hija y ¿a qué se debe esta cena?

Anna: ¿no te contó nada mi madre?

Anna con ganas de decirle a su padre lo que su madre hizo, pero fue interrumpida por ella

Verónica: hay mi amor, no seas desesperado nuestra hija nos tiene una sorpresa ¿verdad hija?

Anna: si papá (agachó un poco la mirada)

Manuel: está bien seré paciente

Elías: pero ¿estás bien hermanita?

Anna: si, si estoy bien solo un poco nerviosa

En eso el timbre de la puerta sonó a las 8 en punto y los nervios entraron en doble de potencia al cuerpo de Anna haciendo que sus manos empezaran a temblar

Verónica se levantó a abrir la puerta y pidió a Anna que la acompañara a la entrada

Anna se levantó muy nerviosa tratando de disimular sus nervios y su miedo

Las dos llegaron a la puerta

Anna: por favor no mamá aún estamos a tiempo

Verónica: cállate niña, y quita esa cara si no quieres espantar a tu futuro marido

Verónica abrió la puerta y en la entrada estaba un apuesto hombre vestido muy elegante y formal, su aspecto era de un hombre muy serio y aunque era muy guapo tenía unos rasgos de un hombre muy malo y muy arrogante.

Fernando: buenas noches, señora y señorita

Verónica respondió muy amable al saludo de Fernando y se quedó esperando a que Anna hiciera lo mismo, pero Anna estaba sin poder soltar una palabra y con la mirada hacia abajo, tenía miedo así que su madre despistada mente le dio un toque en la espalda y Anna con su voz temblorosa solo le dijo buenas noches

Verónica tomó la mano de Anna y los tres pasaron a la sala donde estaban Manuel y Elías esperando

Fernando los saludo muy educado a los dos caballeros y ellos respondieron de la misma manera

Verónica los presento y platicaron un momento antes de pasar a cenar

Manuel y Fernando se conocieron un poco más, Fernando le contó a Manuel sobre sus negocios y familia, aunque de todo eso Anna no se enteró de nada, ya que estaba perdida en sus pensamientos porque Eric no le daba señales de vida y eso ya empezaba a preocuparle un poco.

La sirvienta de la casa les llamo cuando estaba la comida y todos pasaron al comedor

Verónica muy despistada con su cuerpo orillo a Anna a sentarse a un lado de Fernando, todos comenzaron a cenar excepto Anna que solo picaba la comida y daba una que otra probada.

Después la sirvienta les llevó algunos postres y más tarde Verónica rompió el hielo y les pidió regresar a la sala, empezaba la temporada de frío y platicaron mejor en la sala junto a la chimenea y todos aceptaron

Verónica se quedó atrás con Anna y la tomo del brazo y se acercó al oído de ella

Verónica: a ver si pones una mejor cara niña, tu padre y sobre todo tu hermano ya te están mirando muy raro, ya sospechan algo así que por tu bien espero que logres hacerlos pensar que si te quieres casar muy enamorada

A Anna solo se le llenaron los ojos de agua

Verónica: ¿escuchaste?

Anna: ¡si mamá!

Verónica: tampoco me levantes la voz, y anda vamos a la sala que nos esperan

Anna movió sus manos como para echarse aire y se le pasaran las ganas de llorar, tomo aire y valor y camino muy sonriente a la sala y se sentó al lado de Fernando

Fernando solo vio lo hermosa que se miraba al sonreír y sonrió un poco de lado

Ya que estaban todos Fernando comenzó a hablar

Fernando: Bueno primero que nada muchas gracias por la cena señores, pero es momento de hablar por el verdadero motivo que estoy aquí

Emanuel: no agradezca nada joven

Fernando: sé que para algunos de ustedes va a ser una sorpresa (tomo de la mano a Anna y ella solo lo miro)

Bueno yo estoy aquí porque quiero compartir mi vida con esta hermosa mujer, desde que la conocí quede enamorado

Manuel: ¿cómo? Ustedes son novios ¿desde cuándo Anna?

(llego el momento de actuar de Anna)

Anna: si papá, ya tenemos 5 meses de novios sé que se te va a hacer muy raro no saberlo, pero quisimos manejar todo con mucha discreción, ya que Fernando pues es una persona muy importante aquí y la mayoría del tiempo la prensa anda detrás de él

Pero también desde que lo conocí quede muy enamorada de él con lo guapo que es y luego nos conocimos y nos hicimos novios y la forma que me trato me enamoró aún más

Manuel: entiendo hija, pero yo soy tu padre debí de estar al tanto

Anna: no te enojes papito, compréndeme

Manuel: está bien hija, continúe Fernando

Fernando: así es señor, por mis trabajos la prensa siempre está al pendiente de todo lo que hago y pues no quería que molestaran ni a su hija ni a ustedes

Verónica: bueno ya al grano

Fernando: si señora, bueno estoy aquí porque quiero pedir la mano de Anna, Quiero que me conceda el honor de casarme con su hija señor

Manuel: ¿tú quieres eso hija?

Anna deseaba gritarle que no y que su madre había vendido su vida a un completo extraño, pero tuvo que pasarse ese nudo en la garganta y hablar

Anna: Si papito, como no voy a querer eso si Fernando es el hombre de mis sueños

Manuel: mi hija se me hace muy pequeña de edad para casarse

Verónica: por Dios mi amor tampoco exageres, lo dices porque es nuestra hija y siempre será una bebé para nosotros

Manuel: tienes razón mi amor, entonces si es lo que ambos desean pues está bien agradezco la valentía hacia Fernando y Anna de hacer las cosas bien como antes, en estos tiempos ya todos quieren estar en unión libre y no hacer las cosas bien, así que está bien tienen mi consentimiento

Fernando: Gracias señor, es usted muy buena persona

Anna: si papi tú si eres muy buena persona (le da un beso)

Fernando se levantó del asiento y se arrodilló a los pies de Anna y con un anillo en la mano le preguntó

¿te quieres casar conmigo?

Anna se quedó muda y dijo que no

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