capítulo 16- ¿duelo?

El profesor comenzó con pasar la lista de todos aquellos que eran recién llegados y después presento a todos los de tercer años, diciendo que cada uno tomaría bajo su cargo a un principiante, de ese modo será mucho más fácil para ellos adaptarse, enseguida todos querían ser elegidos por el príncipe ya que era el mejor de las clases anteriores, Maximiliam sonríe y se acerca a Livius sujetándolo de la cintura.

- Livi, tu serás mi compañero.

- ¿queee?!!! No, de ninguna manera.

Le empuja del pecho para apartarlo, pero el príncipe le sostiene con fuerza.

- profesor, me encargaré de Livius Stefan, ya que seguramente nadie querrá ayudarlo.

- n-no yo estoy bien solo.

- no Livi, estar solo no esta bien, cuidare de ti.

Ya lo abrazo por detrás mientras el pelinegro trata de zafarse, pues puede notar las miradas asesinas de los demás.

- cariño vamos, practiquemos en aquel campo libre.

"¿Cariño?"

Hablaron todos casi al mismo tiempo, Livius parecía cada vez más molesto, que no le importará golpear a Maximiliam así sea el príncipe heredero. Al llegar a un pequeño campo, Maximiliam le suelta.

- ¿que carajos te pasa? Ahora no me dejarán en paz por tu culpa.

- quise ser amable y arreglar todo por las buenas, pero si te pondrás de terco, entonces yo seré aún más terco.

Maximiliam mostraba una sonrisa amable, pero Livius se veía totalmente molesto, pues ahora por culpa del príncipe tendrá que aguantar más molestias de todos esos que se crean lo mejor de la sociedad.

- ¿entonces que quieres que enseñe?

- no hay nada que tu puedas enseñarme.

- entonces practica conmigo.

- no quiero herirlo alteza, si no, seguramente su mami viene a reclamar que un omega lo lastimó.

- no soy débil.

Maximiliam le pasa una espada de madera, para que comiencen con un combate. Livius es quien comienza el ataque, ambos van a la par sin retroceder, apenas han empezado pero ya están llamando la atención de los demás, muy pocos podía igualarse a Maximiliam, pero a Livius no le estaba costando, el príncipe tampoco imaginaba que Livius fuese bueno, creyó que solo era experto en magia, pero ahí esta luchando para no retroceder, hasta que en un descuido, Maximiliam es quien pierde la espada y el azabache le apunta en el cuello.

- has ganado...

Maximiliam levanta las manos ya que Livius le mira con enojo, supone que fue porque lo arrastró con él. Livius aparta la espada. Por supuesto todos murmuran sobre lo sucedido y claro no falta quien diga que fue Maximiliam quien se dejo ganar, el príncipe se acerca a Livius y lo abraza de nuevo por la cintura.

- me has ganado, tal como imaginé no solo eres bueno en la magia también eres bueno con la espada.

- ¿no conoces lo que es el espacio personal?

Livius le empuja del pecho para que se aparte, le es molesto que haga eso, ya no son niños para que se le pegue de esa manera.

- si lo se, pero a mi gusta estar cerca de Livi.

Maximiliam solo muestra una gran sonrisa mientras que Livius desvía la mirada, es verdad que esta incómodo pero tanta cercanía, le hace sentir un cosquilleo en todo el cuerpo debido al aroma del alpha.

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