Los declaro marido y mujer....

Rodrigo...

Marbella se va echando fuego hasta por las narices después de terminar con Antonella.

- Vámonos las cosas están bien. –le digo a los hombres que vienen conmigo.

Luego de unos minutos ya estamos en casa, después de llegar me voy a mi recámara; tengo en mi mente a Marbella se miraba tan preciosa mi reyna, pero a dónde andarias que Samanta regreso borracha.

Me doy una ducha luego de unos minutos me acuesto quedando dormido pues me sentía seguro sabiendo que tenía protección afuera.

Marbella....

tin clon, tin clon....

Me despierto al escuchar la alarma de mi celular, son las seis de la mañana a como puedo me levanto apagó la alarma que provoca sumbidos en mi oído.

Toda tembeleque a como puedo me voy al baño abro la regadera metiendome al instante, habro mis ojos como faros al sentir el agua super helada que se desliza por mi cuerpo.

Luego de unos minutos me salgo enrrollandome en la toalla, después me dirijo al espejo empezando a lavar mis dientes.

Después te terminar mi aceo personal me ciento en la cama, a los pocos segundos se empiezan a venir los sucesos de anoche.

–Esa perra me quiso aniquilar y el estupido de Rodrigo la defendió no lo puedo creer. –Me digo así misma en voz alta.

toc, toc tocan la puerta, se hace presente la voz de una mujer - Hola buenos dias, puedo pasar.

-Si, ya habro. – en cuanto habro la puerta entran tres mujeres. -Pero que hacen aquí tan temprano.

- Señorita no es temprano ya solo faltan 15 minutos para las 7 am, la misa será a las 10 am y tenemos que maquillarla, arreglar su cabello, sus uñas de pies más las manos; todo esto lleva tiempo así que cientese aquí para empezar.

Una mujer empieza con los pies, otra con las manos mientras la que las manda me empieza a maquillar.

Después de una hora y media terminan para después empezar con el peinado, quise algo sencillo, cabello suelto.

El estómago me empieza a gruñir pues ya son las 8:45 am

- Quiero desayunar.

- Lo sentimos señorita pero se tiene que presentar en ayunas a su boda por orden del señor Rodrigo.

- Este imbecil me está jodiendo.

- Nosotras solo seguimos órdenes señorita.

Después de quedar en la guerra pues no me dieron desayuno me quedo quieta y por fin terminan de arreglar, luego me ponen las zapatillas para después el vestido.

Que hermosa te vez Marbella. –Me dice Samanta entrando por la puerta.

- Hasta que por fin te dignas en aparecer creí que estavas muerta.

- Olvida lo de anoche ya se todo.

- Me alegra que lo sepas, ahora dime dónde está papá.

- Está con Rodrigo, yo te voy a llevar a la iglesia donde nos esperan así que porfavor apresurate por qué ya es tarde y la iglesia está algo retirada, no valla ciendo que pase otro percance como el de anoche y ahora sí que me mata mi hermano.

- No digas estupides, ayudame con el vestido para bajar las escaleras para poder subirme al carro.

- Si está bien, pero no la agarres contra mi solo porque mi hermano quería viva a Antonella.

- Si vuelves a mencionar su nombre te mato sin pensarlo.

- Está bien. Deberias ser buena jente conmigo soy tu cuñada.

- la cuñada que sabía todo y dejo que me callera al pozo.

- Nosé de que hablas, pero si te refieres a la boda a mí también me tomo de sorpresa o si es lo de anoche, menos sabía eso.

- Tu nunca sabes nada.

- Más bien no me interesa estar informada sobre lo que hacen o dejan de hacer las demás personas.

- Si ya veo, mejor vámonos que es tarde.

Batallando pero pudimos bajar por las escaleras, luego sebastian uno de los guardespaldas me ayuda a subir al carro para poder dirijirnos a la iglesia.

Rodrigo...

Después de despertar tuve una charla con Enrique el papá de Marbella, quise dejarle en claro que su hija estara muy bien a mi lado, también me encargaría de enseñarle más sobre el negocio.

El señor se quedó tranquilo con lo que platicamos, después cada quien se fue alistar.

Norma se encargo del señor Enrique mi futuro suegro. Empeze alistarme.

Después de un momento quedé listo así que solo tome los anillos llevandolos a mi pantalón.

ya es hora de irme, le habiso al señor Enrique para irnos para que las gentes no nos esperaran.

Llego a la iglesia viendo que ya estaba lleno de invitados así que Enrique se queda afuera esperando a Marbella mientras yo tomo mi lugar en el altar a lado del padre.

Veo que llega la camioneta en la que vendría Marbella.

Marbella....

por fin logramos llegar a la iglesia Samanta se baja dando la vuelta al carro para poder ayudarme a bajar, mi padre ya me espera en la puerta, está tan guapo mi padre.

- He llegado papá.

- Que hermosa mujer en la que te has convertido no cabe duda que los dos serán tal para cual, además tendrán muy hermosos hijos.

- Gracias papá, pero no te apresures.

Luego de una pequeña charla con mi padre nos preparamos para entrar.

Rodrigo...

Escucho que empieza el pianista ha tocar, habisando que la novia está entrando a la iglesia.

Volteo lentamente hasta poder ver perfectamente a la mujer que tanto he deseado, después de tanto tiempo la tendría a mi lado.

Yo fui quien escogio el vestido pues quería que todo saliera perfecto pero ya trallendolo puesto cruzo mis espectativas.

Luego de unos segundos la tengo frente a mi, su papá me da un pequeño discurso como si realmente lo ocupará pero bueno.

Sacerdote....

- Estamos todos aquí presentes para ser testigos de la union en Santo matrimonio de la señorita Marbella Smith con el joven Rodrigo Renaldi.

pueden todos tomar aciento.

- Padre ahorrece tanto discurso y saltece a la parte del acepto.

– Rodrigo le dice al padre con cara de pocos amigos.

- Como usted diga joven. Señorita Marbella acepta usted al joven Rodrigo como su esposo para amarlo, respetarlo, quererlo en las buenas, en las malas, en la salud y la enfermedad hasta que la muerte los separe??.

- Si acepto. –Le contesto.

- Porfavor coloque la argolla.

–Coloco la argolla en el dedo de Rodrigo mientras el miraba detenidamente.

- Joven Rodrigo acepta usted a la señorita Marbella como su esposa para amarla, respetarla, quererla en las buenas, en las malas en la salud y la enfermedad hasta que la muerte los separe??.

- Si acepto.

- Coloque la argolla.

- Por la ley que me otorga la iglesia yo los declaro marido y mujer hasta que la muerte los separe, puede besar a la novia.

vestido de boda de Marbella..

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