Capítulo XIX

Castigo

Vanessa tomó asiento en frente de Alejo para que empezará a explicar lo que sucedió, aunque ya ellas lo sabían, pero tenían que estar seguras que era verdad

Vanessa L'ouvrier: Estoy esperando Alejo, dime ¿Porque dices que estamos equivocadas? — su voz era fría

Alejo Smith: No diré que no tengo culpa en esto, porque si la tuve, pero no lo hice por traicionarlas, ustedes me tendieron una mano hace años, desde entonces juré mi fidelidad y lealtad — comienza a titubear, Annelise se desespera

Annelise L'ouvrier: Pero eso no te bastó, querías más Alejo, yo te diré lo que sigue, te ofrecieron dinero y poder, a cambio traicionabas a quienes te ayudaron, ¿Verdad que es así? — lo provocaba para que hablé

Alejo Smith: No, no es así, ellos me amenazaron con matar a mi familia, si yo no le pedía a la señorita Vanessa que me diera a mi el liderazgo, además de ayudarlos pidiendo a mis hombres no hacer nada mientras se llevaba a cabo el robo, con la excusa de que yo los buscaría personalmente, entiendan no tuve elección, mi familia es todo para mí, por favor créanme, y denme su perdón, sino quieren que siga a su lado déjenme ir, jamás me verán, pero no me aparten de ellos — sonaba sincero

Annelise L'ouvrier: Tu familia esta bien Alejo, Grace se encargó de los hombres que la custodiaban, además los atrapó a todos, incluso a quien te amenazó, no tengo nada que perdonarte, tampoco preguntarte porque no nos dijiste nada, tenias miedo — asiente sorprendido

Vanessa L'ouvrier: Nos conoces Alejo, no tienes porque sorprenderte, sabes que siempre buscamos la verdad, si me dolió al principio que preferiste callar antes que hablar con nosotras, pero al enterarme de la amenaza cambié de opinión y entendí tus razones — le dice tranquila

Annelise L'ouvrier: Pero eso no quiere decir que no recibirás tu castigo, además estarás a prueba y serás vigilado, ¿Algo que cambiar o esta bien para ti? — lo mira fijamente

Alejo Smith: No, el castigo se llevará a cabo a partir de ahora y durará un mes, no me permitirán salir hasta que terminen las investigaciones, además de la vigilancia física, tendrán que intervenir mi teléfono para ser monitoreado, no quiero mi puesto, seguiré siendo un guardia como siempre lo e sido, esos son mis cambios mi señora, ¿Esta de acuerdo? — Annelise sonrió

Annelise L'ouvrier: Trató, por eso te escogí como uno de mis hombres eres fuerte y aceptas lo que venga si llegas a fallar, tu castigo lo llevará a cabo Ian, por ser quien salió herido, será un día después de ver a tu familia ¿Te parece? — este asiente y sonríe agradecido  — Liberenlo, ya saben a donde llevarlo, solo algo más Alejo, otro error y no la cuentas — le dice seria

Alejo Smith: Entendido, no tiene que decirlo mi señora, yo mismo me daré un disparo si eso ocurre — ella asiente y se van

Angélique L'ouvrier: Me dejaron sin palabras ¿En que momento se enteraron? — pregunta a sus hijas

Vanessa L'ouvrier: Grace llamó a Annelise, ella me lo contó cuando fue a mi habitación, no quisimos decirlo, y actuamos como si nada, para hacer hablar a Alejo ya que era una sospecha al principio — le dijo calmada

Annelise L'ouvrier: Así es, no había otra opción, aunque si tenía ganas de matarlo, después entendí su motivo, no se salvará de su castigo, pero se ganó el perdón con aceptarlo, lo de prolongarlo ...— interrumpe Vanessa

Vanessa L'ouvrier: No estuve de acuerdo con eso, le ofreciste un castigo, y vigilarlo no extenderlo ni llegar a esas medidas extremas, no entiendo ¿Porque no lo aceptó? — dice confundida

Annelise L'ouvrier: Culpa hermanita, por eso impuso su propia condena, para el traicionarnos significa mucho, lo ayudamos, le ofrecimos un sustento y seguridad, aunque fuera justificado tuvo sus consecuencias, uno de sus compañeros salió herido, pudo haber muerto cualquiera de ellos ¿No te parece eso suficiente para no aceptar? — lo dijo suspirando

Amelia Maldonado: Mi señora todo listo — dice firme

Vanessa L'ouvrier: ¿De que hablan? — le pregunta a su hermana

Annelise L'ouvrier: Después de todo si habrá tortura, traelos aquí — Amelia se retira, Vanessa la mira — Son los hombres de los que hablé ¿No piensas que los dejaría sin saber para quien trabajan? — dice acomodando las armas

Vanessa L'ouvrier: Jamás lo pensaría de ti — ella le sonríe

A lo lejos se veía como los hombres de Annelise al mando de Amelia, traían a los responsables del robo y la amenaza a Alejo, directos a la tumba.

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