Ya era de mañana, habia dormido un poco mas eran las 11:00 am. Se me paso despertar para ver que todo este bien con mi tia.
- Hola cariña, estabas dormida y no quice despertarte… Como te fue en tu primer dia de trabajo?
- Muy bien, todos los clientes quedaron fascinados con mi trabajo, hasta mi jefe pidió que me trajeran po r uno de sus guardaespaldas.
- Que bueno… Me alegro mucho. Y como te sentiste?
- Bien, hay cosas de las cuales aun tengo que aprender pero me encanto ese primer dia, conocí muchas personas atentas y al igual que muchas groseras pero nada que una bella sonrisa no pueda solucionar.
Empece a desayunar junto con mi tia, estaba un poco apresurada por que tenia que ir a ver al casero. Rapido termine de sayunar, me fui a mi habitación para darme una ducha rápida y me aliste rápida mente, me puse unos leggins y una blusa crop top, con uno tenis que tenia hace unos días… tome mi bolsa…
- Tia ahora vengo.
- Donde vas Lía.
- Tengo que hablar con el casero.
- Hija no es necesario, vendere algunas cosas.
- No. Por favor déjame hacerlo.
Mire a mi tia un tanto preocupado, si no me daban una prorroga, tendría que acudir a Ciro o a Luciano para que me ayudaran esta vez. LE di un beso a mi tia, viendo como se le llenaron sus ojos de lagrimas.
- Tia, vamos! Animo. Si no me dan el tiempo vere que hacer, pero no quiero que te pongas triste y menos que sufras por este tipo de cosas. Si?
Mi tia asintió con la cabeza, pobrecita, me daba pena que con su enfermedad además tenia que preocuparse por donde vivir.
Me apresure buscando un taxi. Mire a mi alredor viendo un auto negro que estaba aparcado con una persona dentro. No lo pude ver bien pero lo deje pasar… Era muy raro ver ese tipo de auto por estos sitios. Al taxista le mostre la dirección del casero para que pueda llevarme ahí, ese lugar nunca lo habia escuchado ni visto asi que no sabia donde quedaba.
Llegue a mi destino, le pague al taxita bajándome.
- Gracias Señor.
Vaya, maldito casero esta podrido de dinero, me trato en una zona residencial, estaba cerca de donde tengo mi empleo. Al menos se donde me trajo, a ver si no me toca un hombre desgraciado. Entre al lugar, habia una chica en la recepción.
- Hola buenas tardes. Me gustaría poder hablar con el señor Benjamin Solueta.
- Tiene cita?
- No. Es un asunto personal y vine hablar con el por favor.
- Si no tiene cita no podrá atenderla señorita.
- Por favor lo puedes intentar si quiera? Digale que vengo de parte de la Señora Marina Bassoul Jarabo.
- Ahh ya veo. Espere un momento.
Tome asiento sin que me lo dijera. Esto para mi era muy importante y no podía irme sin una respuesta positiva por parte del señor. Realmente solo quería unos minutos no le quitaría mas tiempo, pero por lo visto con el tiempo de estas personas no se podía hacer nada. Me levante rápido cuando vi que la chica regreso tomando asiento.
- Lo siento, no puede recibirla.
Que cosa? Pero de seguro que esta estúpida nisiquiera lo intento. Pues me arme de valor pasando de la negación de la chica. Empece a caminar hacia donde habia visto a la chica que de donde vino.
- Señorita… Señorita no puede pasar.
- Solo será unos minutos.
Empece abrir puerta por puerta, no importaba los gritos que estaba dando esta chica. Hasta que vi una puerta central y entre sin previo aviso.
El hombre dejo de escribir en el portátil levantando la mirada.
La verdad, se veía un hombre bien pero con mirada dura.
- Disculpe señor, la señorita paso sin autorización.
- QUE SE LE OFRECE Y POR QUE ENTRA DE ESA MANERA A MI OFICINA.
- Necesito hablar con usted.
- DEJANOS SOLOS.
La chica se retiro cerrando la puerta.
- Disculpe que haya entrado de esa manera pero en verdad quiero hablar con usted. Es sobre mi tia Marina.
- SI SE QUIEN ES, PERO QUE ME PUEDES DECIR SOBRE LA SEÑORA, YA VA A CUBRIR SU ATRASO.
- De eso precisamente quiero hablarle. Mire tengo un mes y tres semanas que apenas llegue y no sabia sobre la deuda que tenia. En verdad necesito una prorroga para juntar el dinero. Mire ella esta enferma y no se puede valer por si misma. Por favor deme un poco de tiempo para ir pagándole.
- LO SIENTO MUCHO POR TU TIA, PERO YA LE HE DADO SUFICIENTE TIEMPO PARA QUE PUEDA IR ABONANDO PERO NO LO HA HECHO.
- Bueno a ella, pero a mi por favor denme el tiempo que le pido y vera que le pago hasta el ultimo euro.
- DIJE QUE NO.
- Pero señor.
- FUERA DE AQUÍ.
- ES USTED UN MALDITO MISERABLE. OJALA NUNCA TENGA QUE PASAR UNA ENFERMEDAD Y CARENCIAS.
- LARGO NIÑA ESTUPIDA!!!!!
Sali del oficina del señor, dando un fuerte golpe a la pobre puerta, pero en verdad que le costaba. Bueno mi ultimo recurso es hablar con Ciro o con Luciano. Serian mi única salvación.
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Comments
Carmen Afanador
hay niña tu vas a pagar x lo que hizo tu hermana
2023-10-26
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