Capítulo 12

Donde esta john?

El bartender le dijo que habia ido por mercancía.

- VAMOS TE LLEVO A TU CASA!

- No hace falta.

Puso sus ojos en blanco.

- COMO QUIERAS!

Empece ayudar a John a levantar todas las facturas. Luciano habia entrado al despacho por que escuche el portazo que dio tan fuerte.

- Dejalo Marcia, ahora te los alcanzo, ve con el Señor.

- No. Esta enojado y me puede regañar.

- Por lo que paso? Nahh es buena onda. Solo que te falta conocerlo un poco.

El bartender termino por entregarme todas las facturas y empecé a caminar hacia el despacho. Estuve apunto de abrir la puerta cuando escuche que estaba con alguien, bueno pienso que es con John.

- POR QUE COÑOS LA DEJASTE SOLA?

- Señor fui por la mercancía dividiendo todos los gramajes.

- AUN ASI NO DEBISTE DEJAR QUE SE QUEDARA SOLA. QUE TAL SI NO LLEGABA? EEHH

- Si señor, disculpe no vuelve a pasar.

- ELLA NO ESTA PARA ATENDER A NADIE! SI ES ACASO SOLO AMI. ENTIENDES?

- Si. Señor disculpe nuevamente.

- DILE A JOSS QUE LA LLEVE A SU CASA.

- Si señor.

Antes que saliera del despacho, corri un poco para que no se diera cuenta que habia escuchado todo. Vi salir a John. Estaba con la cabeza baja.

- Estas bien?

- Si. Solo fue el susto.

- Dire a guardaespaldas de Luciano que te lleve a tu casa.

- No hace falta en verdad.

- Marcia, no hagas las cosas mas difíciles. Ve a llevar eso y te estará esperando Joss.

Asenti con la cabeza. Ni siquiera tenia ganas de entrar, sentía que me podría regañar por algo que paso en su restaurante y lo peor es que no fue mi culpa.

Abri despacio la puerta. Levanto su mirada fijándola en mi. Cerro la pantalla del portátil.

- No debiste quedarte sola.

- No importa, en verdad, John estaba ocupado.

- Si importa, si no hubiera llegado a tiempo quien sabe que te hubieran hecho, además los que vienen a esta hora no siempre serán cortes con alguien.

- Gracias.

Levanto una ceja, confuso a lo ultimo que dije, pero era la verdad, a pesar que era un hombre muy difícil de entender y aveces algo duro, pero se que el en fondo pero muy en el fondo estaba aquel corazón dispuesto a ayudar a una persona si era necesario.

- NO ME AGRADEZCAS DE ALGO QUE PUDISTE EVITAR. SI ESTUVIERAS HACIENDO TU TRABAJO Y NO OTRA COSA.

- No quise ser descortes, los chicos no querían ser atendidos por nadie mas.

Pegue un gran brinco cuando Luciano golpeo la mesa tan fuerte que las facturas nuevamente se me habían caido. Rapidame me agache un poco para poder regogerlas.

- Deja eso vete.

Le levante nuevamente acercándome rápido al escritorio para dejar las que tenia en mi mano. El habia abierto su portátil para seguir con lo que estaba haciendo. Me aleje rápidamente de donde el estaba.

- Luciano?

Levanto su mirada, con una sonrisa hermosa, pero claro no era por mi, si no mas bien con lo que estaba escribiendo.

- Se te ofrece algo.

- Amm. No.

Vi como redeo los ojos poniendolos en blanco, llevando su mano a su rostro.

- Entonces sal, y déjame en paz.

- Bueno si.

Trate de dicimular pero no me salia hablarle sobre el pago. Él dejo nuevamente de escribir.

- Hasta mañana.

Sali rápidamente del despacho, sentía que estaba sudando frio. Tome mi bolso, despidiéndome de los demás. Me urgia llegar a casa y quitarme la asquerosa sensación de las manos de ese cerdo. Cuando Sali, mire como habia una enorme fila para entrar al restaurante. Pero que cosa como podía ver tantas personas en el lugar si prácticamente todo ya estaba cerrado. La mayoría eran hombres, muy pocos venían acompañadas de mujeres y las que estaban parecían menores al igual que yo.

- Señorita?

- Si gracias.

El hombre que me llevaría a casa tenia la puerta de la camioneta abierta, esperando que entrara. Me puse en la parte de atrás. Me sentiría un poco incomoda sobre todo por que no tengo bragas. Maldito como se atrevio a ponerme las manos en cima. Me subi a la camioneta. El hombre empezó avanzar.

- Hacia donde?

- Napoles por favor?

- Tan lejos vienes para trabajar aquí?

- Si, es el único lugar donde habia vacantes.

- Por que no le dijiste a Luciano para que te reubique en algún otro lugar de él.

- No. Este esta bien.

Nunca me habia pasado una situación como la que vivi hoy. Claro mi padre era demasiado estricto en los lugares donde íbamos Marcia y yo. Pero siempre cuando nos escapábamos salíamos a discotecas y bares pero todos eran de mi padre y sabían que eramos intocables asi que nos cuidaban a pesar que mi padre nos encontraba. Siempre nos mantenía vigiladas y eso impedia que alguien se nos pudiera acercar.

Trate de espabilarme un poco, no quería que pensara el chico que estaba pensando en Luciano. Bueno si, Luciano esta en mi pensamiento como si fuera un dulce que cuando lo pruebas esta amargo pero luego empiezas a tomerle gusto. Sonrei como tonta pero rápido mire en el retrovisor viendo que Joss me veía.

Mientras avanzamos le fui indicando por donde estaríamos llendo. Alfin llegue a casa.

- Gracias Joss.

- Hasta mañana Marcia.

Entre despacio a la casa, mire el reloj viendo que eran las 3:25 am. Fui a ver a mi tia pero ella dormía plácidamente. Le deje un beso, acomodándole la colcha. Habia un poco de frio y no me gustaría que se le complicara su enfermedad con algo mas.

Me fui a mi cuarto, quitándome el vestido ya que solo eso me quedaba. Me meti al baño dándome un baño con agua tibia, no me moje el cabello para que saliendo sea solo acostarme. Ademas tenia que aprovechar el tiempo de mañana para poder ir a ver al casero. Me pregunto como es que mi tia podía sobrellevar sus deudas, de donde obtendría el poco dinero que tiene. En fin. Sali de la ducha poniéndome unos pants y una camiseta larga. Me tape bien para poder dormir.

Luciano:

Despues del incidente con Marcia me encerre en el despacho buscando mas información con mis informantes acerca de ella. Algo no me cuadraba ya que no recuerdo que sea ese su físico y además ella se veía un poco mas grande que lo que veo.

Guido me habia pasado una información muy importante que Marcia Winchester estaba por casarse a una semana. Entonces como se podía casar si la tengo aquí conmigo. Al menos que ella aun se esconda de su futuro.

Sabia que tenia que dar con la verdad. Franco Winchester es la peor rata pero no tanto como Marcia. Ahora todo era posible, hasta nos pusimos a investigar sobre cirugías y lo mas seguro es que se cirujio para no parecer ya que ella estaba boletinada en Italia.

- Luciano.!

- Guido, que me tienes?

- Aquí esta la información igual sobre su tia.

Empece a leer el informe medico sobre su tia Marina Bassoul, estaba enferma de cancer en la sangre por lo pronto estaba desahuciada, no habia mucho por hacer, prácticamente estaba en etapa terminal. Ademas que demasiadas deudas por saldar. La peor de todas era que si no cumplian con el pago del alquiler las hecharian.

- Lo sabra Marcia?

- No se Luciano. A lo mejor por eso estaba desesperada buscando trabajo.

- QUE LAS HECHEN!

- Estas seguro? Digo su tia esta muy enferma.

- QUE LAS HECHEN COÑO!!!!!

- Esta bien. veré que hacer. Solo que Es viernes y lo mas seguro es que procedan el Lunes.

- HAS LO QUE TENGAS QUE HACER. QUIERO QUE SUFRA TANTO COMO LIVIA LO SUFRIO EN SUS PROPIAS MANOS.

- Si, señor. Me encargo de eso.

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