Capítulo 7 Mi Rralidad

Lorena

¡Mi tarde fue unicaaa!!! De verdad ese hombre es divino, me encanta. Tan caballeroso, la verdad no sé porque estoy pensando en él, está súper lejos de mis posibilidades sin mencionar que es rico y poderoso o sea es un CEO importantísimo y yo pues... una becada nada que ver.

Mi familia es de clase media alta, mi padre tiene una empresa de calzado y se han mantenido a lo largo de los años bien posicionados. Pero eso no importa para mí... recuerden que soy como la cenicienta, pero con una madre vivita y coleando que no es capaz de hacer nada por mí a veces me pregunto si de verdad me quiere o qué sé yo. Las madres son atentas, serviciales, amorosas, demuestran cariño a diario, Un como te fue, qué tal tu día, te duele algo, ya cenaste, lo que sea, una pequeña demostración de que por lo menos le importo es lo que quiero que ella algún día me dé. Me frustra suponer o pensar en eso.

— Al fin llegas. ¿Dónde andabas mugrosa? — Mi Hermana en serio disfruta esto, ruedo los ojos e intento seguir el camino hacia el interior de la casa.

— En serio ahora no Paula — Parece que le hubiera jalado los pelos con esa respuesta.

— Estos días andas muy alzada ese compinche con esa gorda no te hace nada bien deberías escoger mejor a tus amistades. — Me chófer que se meta con mi amiga y que hable así tan despectivo de las demás personas.

— Que no te importen mis amistades... déjame en paz!! — Me da una cachetada olímpica y se pone a dar gritos.

— ¡A mí no me gritas igualada! Papá *dando gritos* te voy a amargar estupidaaa!! — Llegan los papás corriendo a la sala.

— ¿Qué es lo que pasa aquí?¿Por qué gritas hija? — Papá y mamá observando todo.

— Papá Lorena se atrevió a gritarme y a golpearme!! Me dio una cachetada... *Fingiendo llanto*

— Lorena explícate!! ¿Es cierto lo que tu hermana dice? — Por lo menos me preguntó, aunque de nada sirve si al final van a creer lo que ella dice.

— Pues claro que lo es... acaso dudas de mi papá? *llorando*

— Déjala Hablar Paula! — Me sorprendió tanto que mi mamá hablara en mi defensa. Normalmente, no lo hace solo baja la cabeza como si yo le avergonzara, esto era nuevo, ¿será que mis súplicas estaban siendo escuchadas?

— Cállense las dos. Lorena habla ahora o lárgate a tu habitación, siempre tú molestando a tu hermana y llevando la contraria a todos, no eres más que un error en esta casa... Agradecidas deberían estar tu madre y tú de estar en esta casa gozando de los privilegios que les da tener mi apellido. ¡Largó de aquí todas!!!

— Estoy cansada de que siempre me echas en cara todo cuando es tu culpa!!! Tu desatención y tu falta de amor. ¡Ni te atrevas hacer pagar a mi hija por errores que son solo nuestros Fabricio!!! *enojada* — Habla mi madre enojada.

— ¡Cállate malagradecida!! — Mi padre le da una cachetada y se marcha a su despacho, subí corriendo a mi habitación luego de todo ese drama familiar, la verdad no entiendo nada. Cada vez que las cosas se descontrolan mis padres se hablan como si ocultaran un gran secreto y se odiaran entre ellos. Pues en las apariencias son un matrimonio envidiable con una hija supertop y una fea nerda

En definitiva esta es una familia de locos... y esta era mi realidad.

— Hija toma, te traje algo de comer... — Entra mi nana Rocío a mi habitación con una bandeja de comida para mí, cosa que le agradezco y me hincha el corazón.

— Gracias Nanita No te hubieras molestado ya estoy acostumbrada. Hoy ya solo quiero dormirme y despertar en otro planeta. — Me río de mi desgracia tratando de dejar tranquila a la anciana delante de mí. Es la única que en realidad se preocupa por mí en esta casa.

— Hay mi niña a ti siempre te quedan energías para bromear. Anda cómetelo todo... — Es bromear o dejarme caer de la tristeza.

— Te quiero mucho Nana... — Hoy mi madre me sorprendió gratamente, defenderme dos veces en un día es récord, debía seguir suplicando, tal vez era lo que hacía falta para despertar su espíritu materno. Es mi madre y no deja de dolerme recibir mejores tratos de parte de mi nana Rocío que de ella, soy su sangre, salí de ella, quisiera que habláramos y me hiciera entender que es lo que le pasa y por qué actúa así conmigo. La amo y guardo la esperanza de que algún día las cosas cambien para bien.

Ahora solo dormiré pensando en lo bien que estuvo mi día al lado de ese papucho, está buenísimo, no me canso de decirlo...

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Leonardo

La reunión salió mejor de lo que esperaba, el negocio se cerró luego de que ambas partes estuvieran satisfechas. Me dirijo a la mansión agotado, pero feliz; quería sentarme un rato a pensar en todo esto que me está pasando y en el hecho de tener unas ganas incontrolables de conocer a Lorena, no sé cómo explicarlo es unas ganas de protegerla, de adueñarme de todo lo que ella es, de saber todo lo que esconde y piensa esa cabecita.

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Alejandra

Veo desde el balcón de mi habitación estacionar el auto de mi hermano y bajó corriendo las escaleras... Quiero hablar con él para contarle muchas cosas y otras no porque solo a Lore le corresponde contar detalles de su vida. El caso es que quiero dejarle claro que quiero conservar esta amistad ella es super linda y me cae muy bien. ¡Así que si él se va a comportar como un idiota mejor lo deje hasta aquí! Lore ya tiene suficiente en casa como para lidiar con este troglodita...

Llegó a la sala y no lo encuentro... voy al despacho y ahí está sirviéndose un trago.

— ¿Me dejas acompañarte? — Le digo y cruzo los dedos a mis espaldas.

— ¡NO! — Ni se molestó en mirarme y me respondió irrefutable.

— Eres un idiota... Espera voy por una cerveza tenemos que hablar... — Le digo y sin esperar respuesta voy saliendo.

— ¡Bien, te espero en la terraza! — Lo.escucho a mis espaldas. Tiempo después llegó a la terraza.

— ¿Qué tanto piensa esa cabecita?

— En ella... en sí de verdad quiero avanzar con esto. *suspirando*

— Si no estás seguro aléjate. Ella me cae muy bien y quiero conservarla como amiga. ¡Y pues ya ella tiene demasiado como para lidiar con imbéciles!!

— A qué te refieres... que sabes? — Me aterra saber la respuesta a esa pregunta.

— No voy a entrar en detalles, pero ella no la está pasando bien, sufre de maltratos y humillaciones a diario tanto en la Universidad como en su casa.

— ¿Qué tan grave es? ¿Por qué se viste así... acaso son pobres? — Me ganó la curiosidad.

— Averígualo tú mismo, su apellido es Villanueva. Me voy a dormir. Adiós hermano y en serio. Si ya se te pasó la curiosidad déjala en paz!!

— No, espera... Quiero volver a verla. ¿Puedes arreglarlo?

— ¡Claro que sí! ¿Vas a averiguar?

— Lo haré... Gracias. — Me levanto del lugar y le doy un abrazo. — Te Amo hermana.

— Yo mucho más tonto ! jajaja Descansa — Con mi hermana siempre nos hemos llevado bien, nos cuidamos mutuamente y respetamos nuestros espacios. Me sorprendió que me advirtiera sobre Lorena y me pidiera alejarme de ella, cosa que no haré por qué simplemente no me nace y al igual que ella yo quiero protegerla y no de mí, sino de todo aquel que quiera hacerle daño.

Mi noche paso tranquila tomé un par más de tragos y me fui a la cama luego de una relajante ducha...

La tarea que me dio mi hermana de averiguar por mi mismo que pasaba con Lorena me intrigó tanto que me puse en eso rápidamente y todo lo que descubrí me sorprendió tanto porque de hecho son una familia con dinero... entonces no se porque mi morenita anda tan descuidada sin duda tengo muchas más dudas…

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