Capítulo 6 Almorzando juntos

Leonardo

La ayudé con La puerta y otra vez ese olor increíble inundando mis fosas nasales. ¿Puede alguien oler más rico que esta mujer? Y qué decir lo que sentí al tocar, el solo contacto con su mano me estremeció y con eso solo aumenta mi curiosidad y las ganas que tengo de tenerla.

En Todo el Recorrido ellas Hablaron Tranquilas Mi Chica con ese tono de voz suave y delicado. Como me encanta escucharla Las deje tranquilas pues mi hermana estaba haciendo un gran trabajo haciéndole preguntas y yo atento a todo solo quería saber más y más de ella.

— Listo chicas llegamos... — Les digo llegando al restaurante.

— Aleja yo no creo que deba entrar a este lugar mira como estoy vestida yo no quiero avergonzarlos. — Pero que mierda!! Porque ella se siente así y piensa esas cosas.

— ¿Disculpa? Nadie debería juzgarte por tu forma de vestir Y no nos avergüenzas para nada. ¡Entremos! — Le digo y ella agacha la cabeza, yo arrugó la frente en señal de molestia y mi rostro se tornó serio. Mi hermana me mira mal y toma la palabra.

— Tranquila amiga, estás con nosotros. Ni hermano ni yo te dejaremos sola. Si hay que patear traseros pues pateamos. ¡Vamos!

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Lorena

— Si, Disculpen Mis Miedos Vamos!!— Y así fue como mis inseguridades fueron aplacadas y mi corazón latió al ritmo que se le dio la gana al escuchar a ese hombre tan delicioso hablarme así. Llegamos a la mesa, hablamos un rato mientras llego el mesero a tomar nuestras órdenes, luego de eso Alejandra se disculpó para hacer unas Llamadas Y Me Quede Sola Con este bombón.

— Disculpen chicos Iré a hacer unas Llamadas en lo que llega la comida (necesitaba darle espacio y tiempo a solas con ella a mi hermano así que inventé una excusa) ya regreso. ¡Lore tranquila no tardo nada!

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Leonardo

— Ve Tranquila, yo la cuido (Un guiño) — Mi Hermana tiene pocas o realmente ninguna amiga debes caerle muy bien se conocen hace mucho? — No sabía cómo empezar a hablar con la chica que me gusta y no se me ocurrió nada mejor, se ve que es una chica tímida y bastante acomplejada. Pero mejor así yo seré el primero en todo y lo primero es ayudarle a ganar seguridad de verdad me siento bien al lado de ella.

— Nos conocimos hace unos días en la universidad Aleja, es bastante agradable y enérgica. Me cae muy bien. (Que le digo... ) —

No podía creer lo que me estaba pasando... Yo en un restaurante lindo con una deliciosa compañía y es que no es para menos el hermano de Aleja es guapo caballero educado y era el primer hombre que se acercaba a mí sin hablar de mi aspecto y burlarse. No me quiero hacer ideas, pero mientras disfruto de la vista que tengo al frente por qué al llegar a casa mi tortuosa realidad me golpea.

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Leonardo

— Y dime Lorena, ¿Qué estudias? — De verdad me estaba comportando como un adolescente no sabía qué decir o hacer y ese olor que me estaba matando, era una mezcla entre jazmín, frambuesa y miel realmente rico.

— Ingeniería industrial. Ya estoy en mi último semestre deseo culminar y abrir otra etapa de mi vida. – ¡No lo podía creer! Teníamos más en común de lo que imaginaba.

— Ohh yo también soy ingeniero y aparte estudié administración. ¿Así que supongo que eres mi colega ja, ja, ja y dime quieres que esté en esa otra etapa de tu vida? — Ella no usa maquillaje por lo que verla sonrojarse natural fue todo un espectáculo.

— ¿Qué le dijiste? ¡Mira cómo estás toda roja amiga... toma esto! — Llega Aleja y la hace sonrojar peor, luego le entrega un vaso de agua.

— No seas exagerada solo hablábamos y le preguntaba si quería que yo fuera parte de la nueva etapa de su vida... — No sabía a qué se refería con nueva etapa, lo averiguaré es seguro y también es seguro que estaría. La chica me gusta.

— Pues, si la quieres invitar a salir solo dilo qué etapa ni que nada... — Ríe divertida. — ¿Amiga estás bien? — Casi se ahoga con el agua que estaba bebiendo, quizás soy muy directo y mi hermana más.

— Si, sí. ¿Ustedes siempre son así tan espontáneos? Y amiga como. Se te ocurre decir eso. — Llegó el mesero con nuestra orden y estoy seguro que Lorena agradeció eso. El resto de la comida nos reímos, hablamos de trivialidades y el postre estaba riquísimo.

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Lorena

Nunca había pasado una tarde tan amena y tranquila por qué de verdad me olvidé de todo y de todos pues los hermanos Conti son una gran compañía... ¡No sé si era mi impresión o que, pero sentía la mirada de Leonardo calando los huesos, ese hombre es todo un adonis, me pasaría toda la vida admirando esa belleza y es que en su creación no escatimaron en nada!

Ahora nos estamos despidiendo de Leonardo que tiene una reunión y Alejandra debe volver a la Universidad. Y es que miren...

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Leonardo

Ese almuerzo fue increíble ella superó mis expectativas es que es tan divertida, risueña, alegre, de verdad la pase muy bien.

Ya me inventaré algo para volver a verla por ahora mi hermana me hará saber lo que sepa ósea el auto salió muy costoso ja, ja, ja aunque me gusta que sean amigas yo creo que a mi hermana le cayó bien y más allá de que yo se lo haya pedido la amistad que están construyendo es genuina.

Quiero esperar a ver a dónde me lleva esto no quiero hacerme expectativas de nada lo que mis sentidos me dicen ahora me gusta y quiero seguir sin importar que... si ella es mi chica solo el tiempo lo dirá, pero me encantó tenerla cerca y conocerla un poco más. ¡Ver como se sonrojaba ante mis comentarios me hace ver que le soy indiferente!

La próxima vez sin duda le preguntaría qué aroma usa, que perfume o lo que sea que la esté haciendo tan exquisita ante mi olfato, oler todo de ella, pensar en eso me acusaba excitación, esa mujercita me ponía a mil y ni siquiera le había tocado un cabello. Me estaba volviendo un depravado imaginándome oliendo sus prendas más pequeñas... ¡¡Ohh Por Dios!! la estaba deseando.

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