1- Un mensaje.

Me encuentro terminando mi curso de fotógrafa, capas que no tanga mucha validez lo que les voy a decir cómo es que yo nací, mi padre es de China de Shanghái y mi madre de Canadá, mi madre viajo a Shanghái para su compromiso y quedo encantada por el paisaje y la vida que se llevaba ahí, salió a caminar encontrándose a un pobre diablo que tomaba fotos a todo lo que se moviera, mi madre que le pidió que la fotografiara si eso le serbia luego de pasar 3 días con ese total desconocido, volvieron a Canadá y pasaron nuevamente ella estaba más que decidida, destinada y preparada para casarse pero al final se arrepintió y volvió a China para encontrase con él y decirle que yo venía en camino, y aunque su padre no estaba de acuerdo que se casara con un Canadiense, este término aceptando luego de 8 meses y nací yo, y si soy una mezcla o por lo que los chinos nos nombraban “mestizos”.

A la edad de 12 años mis padres me regalaron mi primera cámara de fotos, no sabía cómo usarla a veces me enojaba porque no salían como yo quería y luego de casi un años de mirar videos y con ayuda de mi padre, comencé a fotografía el cielo ya que en ese momento lo único bonito e intocable para mi es el cielo, como en la serie japonesa Koizora... bueno ¿Quién no la vio? En Japón es muy famosa, en fin a cuando cumple 15 años llegue a revelar 22 secretos en mi escuela y cerca de mi casa, eso no me trajo problema bueno casi todos el directo teniendo un amorío con la maestra de historia o como mi vecina se robaba las verduras de la huerta a mi madre, es gracioso si lo piensas pero luego llega lo más trágico y aterrador, fui secuestrada a la edad de 17 años por mis abuelos en china y así poder quedarse conmigo, en fin mis padres se enteraron y los reportaron la policía algo que no salió muy bien , luego de un mes me saltaron triste historia. Ahora que tengo 21 años, ruego que nada de esas estupideces me pase, que pueda conseguir trabajo o más bien que alguien me contrate, pero teniendo a un padre empresario y a una madre que es reconocida por ser entrenadora de los atletas en los juegos olímpicos es algo sencillo, soy una empleada más para el resto pero para mis padres soy su hija preferida e única. Luego de todo eso, tengo a mis dos mejores amigos, Brandon y Christopher, a decir verdad ambos son buenos chicos pero en la mayoría de las veces en las que me encontraba en problemas ellos, estaba a mi lado, cubriendo me o impidiendo que mis padres se enteraran, esas son amistades.

2022 Presente – Shanghái – China.

07:00 am.

Me desperté luego de una noche corta y agitada, miro mi vestido extendido en la silla de mi escritorio y mis zapatos todos manchados con barro y pasto, ya que las secciones de fotos de ayer, fueron en medio de la nada porque la novia quería que sus fotos fueran única, pero el único problema fue que ella no dejaba de coquetear con su padrino de bodas, mientras que el esposo la pasaba lindo con los invitados lo que me daba pena es que el padre de la novia la cubría y ella feliz con lo que hacía. Me senté en la cama y tomo mi cámara para revisar las fotos y que ninguna haya salido mal, cada una de ella tiene una calidez hermosa pero al momento de fotografiar a los novios, es como si la imagen de opacara. Es una lástima porque ellos sí que hacen una linda pareja lo malo que ella no quiere dejar su vida de soltera en el pasado pero no soy nadie para juzgar.

Miro el despertador y apago la alarma me levanto y le saco una linda foto al cielo de invierno y me entro a bañar, desde la cocina se escucha a mi madre que me llama salgo del baño y comienzo a cambiarme, al terminar tomo mi mochila, mi cámara con el estuche, celular, auriculares y las llaves de mi auto y bajo.

En las escaleras me detengo al mirar por una ventana que justo da a la casa de mi vecina sexualmente activa, aunque no tengo mucho dialogo con ella se que nos llevaríamos muy bien, sus gritos de placer se escuchan a pesar que tengo las ventanas cerradas, me acerco para escucharla mejor pero me tope con la imagen de sus senos pegados en el vidrio ella toda y completamente despeinada, el sujeto la sostiene de su cintura moviéndola salvajemente con fuerza haciendo que grite con locura, no sé porque pero quiero ser ella quiero que me agarren así, quiero que me den como cajón que no cierra ~Esta bien, puede que este exagerando un poco~ deseo que hagan el amor con locura, no sé cómo explicar la necesidad que tengo es como si tuviera la necesidad de beber agua cuando estoy sedienta, es esa maldita sensación. Sus gritos provocan que mi corazón se acelere, aprieto mis piernas mis manos sudan ante mi imaginación, termino sentada en los escalones cierro los ojos muerdo mi labio inferior mientras que paso mis manos por encima de mis senos, imaginando que alguien más es, puedo sentir como besa mi cuello, aprieta mis muslos, no pude aguantar más el gemido y deje que saliera pero no duro mucho que lo tuve que cortar, llamaría la atención de mis padres me detengo y trato de escucharla, pero al parecer ya terminaron me levanto y me acomodó un poco la ropa.

Me acercó a la puerta del comedor y la veo con papá, preparando el desayuno no quiero negar que no parece real esta escena pero sí lo es, desde hace años que quiero dejarlos descansar pero ellos no me sueltan las manos, quiero empezar a vivir sola tener mi propio lugar, pero hasta que no tenga la “valentía” de hablarle a la cara no puedo hacer nada. Respiro profundo y me acerco.

Bonnie- ¡Buenos días! - Dejo la mochila aún lado y me siento.

Madre- No sé porque no me haces caso, siempre haces todo lo contrario a lo que te digo. – Pongo el plato de Bonnie enfrente de ella. – Bonnie, cariño dile a tu padre que ya no está para las salidas a los antros. –

Bonnie- ¿Por qué le diría eso? – Al sentarme mi padre me tira un beso. – Deberías estar contenta que al menos quiera salir los hombres de su edad no salen mucho. –

Padre- Sabes un cosa Bonnie debería castigarte por tu comentario indebido. – Reímos entre los tres. – Vamos apresúrate, tienes que trabajar. –

Madre- Sabes una cosa Bonnie, tienes razón a su edad se mueve muy bien. –

Bonnie- Mamá, no comiences por favor… - Me levanto luego de tomar jugo. – Me voy adiós mamá. –

Padre- Y tú no te quedes atrás cariño – Le guiña el ojo.

Bonnie- Sera mejor que me valla, no vaya a ser que terminen de volver loca. – Siento que mi celular vibra.

Madre- Adiós bebe. Ten mucho cuidado. –

No pude responder a lo que me dijo, no lo encontré necesario pero una parte de mi me dice que les cuente sobre el trabajo en Corea del Sur y la otra me dice que no les cuente, que se lo diga cuando sea el día de viajar. Puede que no sea tan buena hija, hay muchas cosas que no les eh contado como aquella vez que casi termino perdida en un bosque solo porque estaba siguiendo a una ardilla para sacarles fotos y me había olvidado de marcar el camino, o como también que junto a Luka encontramos cocaína en el mismo bosque pero esta estaba cerca de una cabaña abandonada pero decidieron derrumbarla cuando se reporto a un niño perdido y encontraron su camiseta dentro de esa cabaña, no puedo negarme tuve una muy buena infancia lo malo fueron las circunstancias en la que pasaron.

Una de las cosas que jamás olvidare fue mi primer beso con Luka, un niño muy lindo y cariñoso pero su lado contrario posesivo y algo controlador y aunque nos hicimos la estúpida promesa de casarnos cuando seamos grandes, pero Luka decidió caminar por otro camino e ignorar que su padre odia a los homosexuales y aunque a veces cuando niña me preguntaba si me llegarían a gustar las niñas pero luego miro a Luka y lo doy por hecho, que con Luka no me voy a casar hemos tenido muchos problemas porque se mete con hombres casados o con un traficante, como Brandon pero él es pagina aparte.

Mi mente incomoda y mi cuerpo con la necesidad de ser deseada por el sexo opuesto pero tengo muchas cosas en la mente que solo puedo pensar en mi trabajo y que si no llego en menos de 30 minutos, estaré en serios problemas. Cuando salgo de la casa veo a mi vecina salir acompañada con uno de sus amantes, es lindo ver como una chica tiene la capacidad de controlar su vida y todo lo que la rodea, cuando ella era una niña recuerdo que siempre le preguntaba a mis padres para que yo pudiera salir a jugar a veces salía otras veces nos, ya que si su madre estaba en su casa era muy probable que hayan hombres y aun que era incomodo decirle que no a una niña inventaban excusas hasta el punto de no poder salir de casa o escondiéndome dentro del auto como si me estuvieran secuestrándome.

Salgo de la casa, acompañada de mi madre y me acerco a mi auto cuando me subí ciento el celular vibrar y lo saco para ver los mensajes.

Mjs- ¡¡Niña!! Rápido, yo estoy en la parada de autobús. -

Rts- Está bien, en un momento salgo para allá. –

Tenía la idea de no ir a trabajar hoy pero si no voy Chris terminaría por matarme, ya que le prometí que lo ayudaría con un problema de rechazo, en fin. Cuando llegue me quede unos segundo dentro del auto y recordé que me había llegado mensajes y saco el celular.

Mjs- Te veo, camina hasta la cafetería de siempre. -

Rts- Está bien, en un momento estoy ahí. -

Me quedo unos segundos en el auto pensando. Pero me percato que hay una mujer discutiendo con un joven, pero lo más gracioso es que este joven parece no interesarle en lo más mínimo lo que ella le diga salgo de mi auto y camino hasta el lugar para saber lo que está pasando y porque discuten, hasta percatarme que ella le reclama que la abandono. No tiene sentido que siga escuchando conflictos de pareja, pero aquel sujeto no tiene el más mínimo interés en ella y aun así ella sigue detrás de él. Sigo de largo para entrar a la cafetería cuando escucho un golpe, volteo y veo que él se soba la mejilla derecha y ella seba caminando, era más que obvio que recibiría un muy gran golpe. Dentro del lugar, pido dos expresos con y sin azúcar, pago y me siento en una de las sillas para poder espera mi pedido y veo a Morgan entrar para luego sentarse enfrente de mí.

Morgan- Bonnie... - Me siento enfrente. - ¿Supiste lo que paso mientras tú estabas en la boda de la mujer coqueta? -

Bonnie- Ammm, no... ¿Qué paso? - La camarera llega con el pedido, nos levantamos y salimos del lugar. - Vamos, o llegaremos tarde... ¿Sabes algo de Christopher o Hansol?-

Morgan- Además de gustarle las fotos ella mando un correo diciendo que no hagamos la foto gigante que al final se va a separar. ¿No porque? - Entramos al auto y ella se pisó en marcha. - ¿Que harás con la agencia de fotografía cuando te vayas? -

Bonnie- ¿En serio? Qué pena, hacían una muy linda pareja y en cuanto a la agencia, no lo sé aun no hablo con mi padre. - Me detengo en el semáforo y miro mi celular, lo pongo en un sujetador y me pongo el auricular para atender la llamada.- ¿Hola quien habla? –

Morgan- ¿Ya comienzan a acosarte? – Ella sonríe.

Christopher- ¿Bonnie? ¡Bonnie! Soy yo, Christopher.... ¿En dónde estás? -

Bonnie- En camino ¿Porque? ¿Qué sucede? - Acelere, no quiero que en la agencia ocurra algo mal por mi culpa. - ¡Hola! ¿Christopher?-

Christopher- Bo... Bonnie... hay...- Se corta la llamada.

Morgan- ¿Que sucede? - dije mientras saco mi celular y llamo a Hansol. - Creo que la loca volvió. -

Bonnie- Solo espero que ella no rompa nada o Hansol paga las consecuencias... - Luego de 15 minutos llegamos, al bajar puedo ver que el auto de esa señora está aquí. - Maldición... yo me encargo. - Al entrar escucho los gritos de aquella señora que siempre es la misma historia. - ¿Que sucede aquí? -

XX- ¿¡¡Como te atre vez a llegar tarde!!? ¡Esto es un desastre y tú llegas tarde! - Ella se sentó en mi silla como si el estudio fuera de ella. - Si, yo no hubiera llegado esto aun estaría hecho un desorden... ¿Entiendes la gravedad de tus errores? -

Christopher- Madre deténgase por favor... - Ella me miro, y lo único que sentí fue miedo. - Sabe que Luka trabaja aquí. –

Bonnie- Tranquilo Chris, yo me encargo. – Aparto a Chris y Hansol se acerca. – Después hablamos, Hans. –

Madre- Es por ella no quiero que trabaje aquí, desconfió de ella - Luka se acerca a Bonnie y se coloca enfrente. - Nos iremos a casa ahora mismo... -

Bonnie- Lo siento, madre de Luka pero no puedo permitir eso... él es uno de mis mejores trabajadores y debo agregar que es uno de los únicos que se desempeña más que el resto. - Me paro al lado de este y nos miramos. - Y debería discutir eso con su esposo, ya que fue él quien dejo que Luka trabajara conmigo... - Ella se puso más histérica.

Luka- Ya basta mamá, vete a casa... hablaremos después... - Ella se levanto y se marcho. - Lo siento mucho Bonnie, es mi culpa no de vi dejar que viniera. –

Madre- ¿Cómo te atreves a hablarme así? – Me levanto de silla y levanto mi mano para golpearla.

Creo que en ese momento no lo pensé, pero no fui capaz de reaccionar pero Luka se puso entre medio de las dos bloqueando el golpe que ella me iba a dar, no puedo negarlo Morgan es mi mejor amigo pero Luka es mi pequeño ángel guardian y si lo pierdo creo que me volvería loca. Ella solo se fue disgustada por el acto de su hijo, no la culpo pero puede hablar conmigo sin tener que hacer una escena de lo que está acostumbrada. Mientras que los demás trabajan trata de buscar la manera de calmar a Luka, es muy obvio que este avergonzado pero desapareció de golpe y no lo encuentro.

Bonnie- Tranquilo, no es tu culpa... - Miro a todos observando la escena y golpeo mis manos para llamar su atención... - Ok, ¡¡Todo el mundo a trabajar, no hay nada que ver aquí!! - Una de mis empleadas llega a mí.

Tania- Señorita Bonnie, un cliente la espera en su oficina. -

Bonnie- Dime Bonnie, solo Bonnie... está bien ahora voy. Pero Tania busca a Luka, ahora. - Ella sonrió y me marcho, camino hasta mi oficina y veo a un hombre y una mujer. - ¡Bueno días! –

Tania- Si, Bonnie. -

XX- Buenos días, señorita Stuart... me presento soy el señor Yi Fang, representante del Ídolo, ZTao... - Ella me interrumpió.

Bonnie- Así, mi padre me hablo de ustedes... si mi padre acepto entonces yo también... y por favor díganme Bonnie - Me levanto a la par de ellos y hago una reverencia. - Los veré en mi oficina, Tania por favor llévalos. -

Yi Fang- Esta bien, Bonnie - Veo que Tao se le quedo mirando. - Vamos. -

Morgan- Lo siento... Bonnie, te buscan es... tu padre... - Ella sin pensarlo dos veces, salió corriendo para hablar con su padre.

Bonnie- ¿Qué mi padre? – Asiente. – Necesito que hables con Luka, de lo que paso. –

Morgan- Esta bien yo me encargo. – Antes de que ella se marchara, la detengo. – No te olvides de avisarle. –

Me quedo mirándolo, sé que tengo que decirle a mis padres lo de Corea del Sur, pero capas que no estoy lista no quiero irme aun estoy poniendo demasiados “peros” y eso me está matando, temo que no estén de acuerdo con lo decisión que estoy por tomar y me obliguen a quedarme. Mientras camino muchas escenas pasan por mi cabeza, en donde discuto con ellos y termino por abandonarlos pero pienso que ellos jamás me dijeron que no, jamás me negaron nada siempre me dieron todo lo que quise y estuvieron de acuerdo con lo que hacía y decía, pero también esto es muy fuerte su única hija se muda de país y no sabemos hasta cuando no volveré a verlos.

Sé que anda algo mal, cuando mi padre no quiere entra y no hace falta ser adivina para saber de qué es lo que me viene a hablar, esto no es algo nuevo con la madre de Luka es de todos los días desde que se entero que la jefa de su hijo es 3 años menor que él, es extranjera y en el colegio tenía fama de ser una mujerzuela... pero que le voy a hacer, no tenía un príncipe azul para que me defendiera más bien tenía que hacerlo sola, tengo que valerme de mis palabra, mi valor incluso de mi propio orgullo para aguantar a esa mujer, que lo único que hace es molestar a su hijo, hacerlo pasar vergüenza y para el colmo tener que pasar por lo mismo todos los días, ella sola matar a su hijo, en fin tengo que aguantar los regaños de mi padre ahora pero esto no se quedara así esa mujer me escuchara. Pero no es lo que yo pensaba al final era que él y mamá se irían por unos días a Canadá para visitar a mis abuelos y como yo no puedo ir tengo que quedarme. Triste pero es por trabajo que tengo que quedarme luego de haber hablado este me entrego una bonita cajita que dice no abrir hasta el día 3/1 que es mi cumpleaños número 22 este se marcho y yo vuelva a dentro, veo a Morgan fotografiando al joven Tao.

Luka- Bonnie ¿Me buscabas? - Ella sacudió su cabeza y camina hasta nosotros. - ¿Está todo bien? –

Bonnie- Si, nada serio antes de seguir quiero que sepas que no tienes la culpa de que tu madre viniera a causar problemas… y no, no voy a echarte jamás are eso eres parte de mi familia. - Al llegar veo que Tao, está sentado sobre un banco. - Ok intentemos con una silla de oficina -

Christopher- Esta bien... - Hay una muy gran diferencia y a pesar que es menor que nosotros, no puedo negar que es muy atenta. - Dame, eso lo guardare en tu mochila. -

Bonnie- Gracias, ven ahora... Gira... - Este hace lo que le digo y sonrió. - OK, luego de 20 fotos que se cambie el atuendo. - Acomodo un poco las luces y lo vuelvo a mirar.

Morgan- ¿Que sucede? - No es normal que este tan concentrada y callada me pone nervioso. - Vamos confía en mí. -

Bonnie- Esta bien creo que a ti, no puedo engañarte... mis padres se irán unos días a Canadá... - Agacho la cabeza.

Morgan- ¿Aun no se lo dijiste verdad? - Ella negó con la cabeza y sonrío. - Ok, sabes que puedes confiar en nosotros te ayudaremos en todos

Luka- ¿Decirles que cosa? – Me quedo mirándolos a los dos. – Esta bien perdón por meterme. –

Bonnie- Espera Luka. – Le agarro la mano. – Es sobre el trabajo en Corea. –

Nos quedamos unos minutos, esperando a que todo pasara pero mi cabeza busca la mejor escena para decirles a mis padres y aunque no quiera aceptarlo no siempre fui muy buena diciendo la verdad, casi siempre parece mentira lo que estoy diciendo y lo toman como broma y eso me molesta, por parte de mi madre, mis tías cada vez que me veo lo primero que dicen – Hay niña tienes que comer menos. Si fueras flaca estarías más lindo. Cuando te enamoras, tienes que estar siempre linda y ser tierna. Los chicos siempre se fijan en el físico. – Todas esa palabras me llevaban directo al baño a vomitar lo que había comido, hasta el punto de solo tener agua en el estomago y estar casi 2 días sin comer, mis padres se enteraron de lo que me pasaba y me llevaron a una centro de rehabilitación, para que pudiera curarme pero creo que lo empeoraron, fui perdiendo peso cuando creí conocer a mi príncipe azul, cuando en realidad era un sapo disfrazado porque resulta que no le gustaba realmente solo quería saber si era buena en la cama y eso me empujo al fondo, tocando el fondo del pozo. Mirarme al espejo, pesarme, anotar el peso todos los días, probarme ropa delgada y mirarme para ver cómo me queda y estar totalmente molesta y fisgustada.

Podía ser que cuando era más pequeña me importaba mucho lo que ellas decían, pero cuando cumplí los 15 años, decidí por mí misma que era momento de cambia que dejaría de vomitar dejaría de intentar ser algo que no soy solo por complacer a los demás, me vestiría como me gustara que me haga sentir cómoda.

Volvemos a dentro y me quedo mirando al idol, se lo nota cansado y completamente agobiado como si realmente no quisiera aquí, a pesar que esta maquillado sus ojos se cierran las fotos salen más naturales y son las que más me gustan, es cansador tener que viajar y estar cambiándote de ropa constantemente, da mucho miedo que las demás personas vean tu verdadera manera de ser. Bueno es lo que yo veo en él.

Luego de esa charla que tuve con Morgan y Luka, fue más como una descarga ellos son los único con los que puedo hablar libremente y no tener que estar pensando demás. Vuelvo a mi oficina y me pongo a revisar mi correo para saber si me mandaron mensajes más cliente hasta que me aparece un mensaje algo extraño en donde me pedían tener una reunión en un antro, no es muy normal tener una reunión en un antro pero si es para contratarnos no puedo decir que no.

Correo-

...Buenas tardes señorita Stuart quería informarle que queremos contratarla a usted y a su equipo para los eventos de la empresa Choi, honraría con su presencia para hablar con uno de los hijos del empresario. Muchas gracias....

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