Capítulo 4

La respiración de mi esposa es bastante rápida y la mía también tengo que escuchar lo que me tiene que decir y también tengo que hablar yo, de lo que dentro de poco se avecina.

No sólo estoy involucrado yo, si no ellos también

- Lo siento amor, es que han pasado muchas cosas y...

- Piensas que te estoy tomando del pelo y a parte de todo dices que quién sabe quién es el padre. - Pues si en parte eso era lo que pensaba, pro ya me quedo bastante claro que yo soy el papá. Solo necesito escuchar su historia.

- Cuéntame la historia.

Un poco más calmada empieza su relato, es difícil de creer, pero se que ella no me está mintiendo tendré que hablar de este tema con Tristán que es el que está más empapado sobre hipótesis y esa cosas.

El porque tiene ese conocimiento no lo sé, a pesar de llevar tantos años de amigos no se mucho de él.

- Eso es todo, bueno Malory no está, ha sido todo un proceso con ella.

- Son gemelas idénticas.

- Si.

- Una es vampiro y la otra licántropo. - Parezco un maldito idiota repitiendo lo que me acaba de decir.

- Si, no te mates tanto la cabeza en eso.

- Porque no me lo dijiste apenas te enteraste.

- Para esa época todavía estaba molesta contigo por ocultarme tus orígenes. - Y ya que ella toca ese tema me toca hablar de lo que tengo que decirle.

- De eso también tengo que hablarte. - Nos sentamos en el sofá pero yo no me aguanto más y me apoderó de sus hermosos labios. Me dan ganas de quitarle la pequeña bata que tiene pero nuestros hijos están arriba y no se si ella podría controlar sus gemidos.

Los minutos pasan y yo no me separo de ella, mis manos viajan por encima de la ropa que la cubre, no soy yo el que rompe el contacto, es ella.

- Lo siento amor mío, pero me había estado conteniendo.

- Si me doy cuenta. - Ella pasa la lengua por sus labios.

- Sigue así y no me contengo.

- No vas a obtener nada hasta que comiences a contar la verdad. - Que forma más agresiva de romper el romance, y yo con mi miembro erecto.

- Está bien, como te lo dijo la persona que te llamo soy el heredero al trono de la comunidad de los vampiros, a pesar de que en un tiempo no fue así mi abuelo lo cambio todo al dejar a cargo a mi padre. Cuando nací mis tíos se molestaron.

- Donde están tus padres y tú abuelo.

- Mis padres fueron asesinados por mi tío Camil, se supone que hace cien años mi padre iba a dar la noticia de que yo iba a tomar las riendas pero ese día nunca llegó.

- No es que sea ignorante pero no te entiendo nada.

- Bueno, se supone que el hijo mayor de mi abuelo era el heredero original al trono.

- ¿En este caso Camil?

- Si, pero mi abuelo se dio cuenta de que él era un vampiro avaricioso y no solo eso la crueldad de ese hombre no tiene límites, al enterarse de que su hermano menor lo iba a reemplazar se alejó de todo pero comenzó a crear caos en todos los continentes, él quiere acabar tanto con los licántropos como con los brujos y si se puede llevar por delante a los humanos lo hará, los representantes de los mismos estaban un poco molestos así que mi padre lo envío a un lugar que se supone del que nunca iba a salir.

- Y ahora está...

- Me temo que si, ha vuelto y quiere reclamar lo que es suyo, dentro de poco habrá una reunión en la cual yo tomaré juramento. - Tomo mi cabeza en mis manos.

- Que más hay.

- Como lo puedes imaginar, hay un tipo de bruja que puede elevar los poderes de los vampiros o de los licántropos según sus necesidades, pero también pude matarlos.

- Eso me incluye a mi.

- El problema Dakota es que si él sabe de tu existencia puede que tu vida esté en peligro o la de nuestros hijos. Nunca se había visto que una de tu clase tuviera las habilidades de los tres mundos. Mi madre era una bruja como tú por eso estoy acá. Por esa misma razón es que puedo sentirte.

- Tu tío pudo haber tenido un hijo, porque por lo que me dices el ya no estaría en condiciones de liderar un reino tan grande.

- Antes de que mi padre lo encerrara él había tenido un hijo que se llama Víctor. - No más es pronunciar ese nombre y Dakota se pone completamente pálida. - Conoces ese nombre o más bien conoces AESA persona.

Se levanta de inmediato y vuelve a activar parte de su energía, como es que ha pasado esto, porque ella conoce a esa persona y desde cuándo.

- Amor que está pasando, porque estás tan inquieta.

- Puede que este trabajando para él. - Ahora soy yo el que se levanta de un salto. - Sabía que pertenecía a tu familia pero no al punto de que fuera el hijo de un maldito psicópata, y porque sabía que era de tu familia, por su energía.

- Hay algo más que te está molestando y no es sólo el hecho de que sepas la verdad sobre él y sobre lo que yo acabo de decirte.

- Si hay algo más. - Se sienta de nuevo, pero sus manos tiemblan y está completamente fría, sus poderes disminuyeron drásticamente. - El me vio.

Me cojo el puente de la nariz, las palabras no me salen y tampoco sé qué decirle a ella, así que se forma un silencio un poco incómodo entre nosotros y lo único que lo rompe es la llegada de otra adolescente igualita a Lía, pero está es una vampira.

- Hola mamá y....

- Malory hueles a sangre que has estado haciendo. - le dice Dakota, aunque lo noto hasta ahora es bastante sangre y no es de ella.

- Mamá déjame en paz, eres una metida no me dejas hacer nada, tengo un poder unico y tú lo quieres que lo mantengo uculto. - puedo ver la tensión que ha entre ellas dos.

- Malory por favor... - No la deja terminar de hablar.

- Nada de por favor. - Sale de la sala dejándome anonadado en como acaba de tratar a su propia madre y a mi también, ni siquiera reparo en preguntar quién era yo sino que atacó de una, como si yo no existiera.

- Mi otra hija.

- Lo siento Asher, el tema con ella ha sido un poco más difícil precisamente estaba en el instituto antes de que me atacarán, la sacaron.

La frustración que se le ve en los ojos me entristece mucho, porque no pude estar ahí para ella o para las mismas niñas. Esto cambia está misma noche, ya no va a estar sola, me la llevaré de vuelta.

- Vas a volver conmigo. - Me mira como si estuviera loco.

- No puedo, si es cierto lo que me acabas de decir sobre tu tío y sobre Víctor debemos de saber que es lo que planean. - No me gusta para dónde va está conversación pero se que voy a perder.

Con ella nunca he podido perder una conversación, cuando algo se le mete en la cabeza nada ni nadie puede persuadirla de hacer lo contrario, y se que quiere quedarse y averiguar qué es lo que pasa, pero temo que le hagan daño.

Tanto mi tío cómo su hijo son unas malditas bestias, el poder lo es todo para ellos no importa sobre quienes tengan que pasar.

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