estoy confundido

_ Paul iba en el auto pensativo, entristecido en cada stop del camino, aprovechaba para golpear el volante y maldecir toda aquella situación, su teléfono volvió a sonar insistentemente el se detuvo aún lado del camino para poder ver de quién se trataba.

_ Nuevamente, lo estaba llamando Anna y Paul un poco molesto decidió atender el teléfono y de forma grosera le respondió:

_ Aló!!! Te dije que en cuanto pudiera hablaría contigo, para qué insistes en llamar.

_ Anna: Lo sé Paul, pero quiero saber que es lo que está pasando sé que en un principio dijimos que solo sería diversión, pero de verdad necesitamos sentarnos hablar.

_ Paul: lo sé Anna, pero ahora mismo mi prioridad es Miranda y no tengo cabeza para nada más.

_ Anna: entiendo que estés tan confundido, pero sabes que cuentas conmigo y solo quiero que lo sepas.

_ Paul tocaba su frente en señal de desesperación, no creía que ese era el mejor momento para hablar de relaciones cuando su matrimonio estaba destrozado a causa de su infidelidad

_No pudo decirle nada más a Anna y decidió desconectar la llamada y apagar el teléfono, siguió manejando en dirección a la casa de Roberto.

_ Al llegar timbro roberto le abrió y los dos se dirigieron a la sala.

_ Roberto decidió que no tomaría licor, pero Paul si decidió servirse un trago.

_ Se sentaron nuevamente en la sala, Paul observaba el trago mientras Roberto le decía: _ Que piensas hacer Paul, como veo las cosas y lo rápido que se desarrollan los acontecimientos, me da la impresión que Miranda está decidida a seguir adelante._

_ Paul: lo sé primo, jamás pensé en que este asunto se convertiría en un puto desastre y no sé que hacer, no sé por donde empezar arreglar este desastre no imaginé que pasaría por todo esto.

_ Roberto: y aún no sabes que tanto sabe Miranda o como se enteró, no sabes nada lo único seguro es que te encontró en la casa de Anna.

_ Hay! Primo fíjate, si escuché rumores, pero no los creí, es decir, no creo que fueras capaz de arriesgarte así y más porque siempre pensé que tu vida estaba completa con Miranda.

_ Que fue lo que realmente faltó ahí, para que decidieras meterte con Anna y lo más importante, porque no se lo contaste a este servidor.

_ Paul: ni yo mismo sé cómo terminé enredado con Anna, es solo que todo se volvió una rutina, la casa, el trabajo, el matrimonio todo se volvió tan seguro y tan aburrido entre nosotros, que en ese momento nos descuidamos tanto que Anna se volvió el escape a la rutina.

_ En el sexo era todo tan distinto, que empecé a querer estar mucho más tiempo con Anna, por momentos deseaba que Miranda no estuviera para poder estar de una buena vez con Anna.

_ Roberto: Hombre! Ahora si me has dejado sin palabras, ahora mi recomendación dale el divorcio a Miranda, porque con lo que me cuentas ahí ya no hay remedio no la quisiste lo suficiente como para conservarla y apreciarla, deja que otro le dé toda la atención que ella realmente necesita y merece.

_ Paul volteo a verlo sorprendido por lo que acababa de decir su primo.

_ Paul: como crees que voy a darle el divorcio a Miranda, ella es mi esposa la madre de mi hijo y no pienso divorciarme de ella.

_ Roberto: el problema es que no la mereces y tu confusión es tan grande que no te importa lo que ella siente en todo este asunto, únicamente importa lo que tú sientes y necesitas, quieres seguir aparentando que son un matrimonio feliz.

_ Paul: ahora mismo no sé ni que hacer, pero si sé que no quiero darle el divorcio, ella es mi esposa y lo seguirá siendo.

_ Roberto: y Anna donde queda en todo este asunto, porque ella también merece una explicación y un lugar en tu vida.

_ Paul: Anna es... la pasión, son las ganas de hombre con ella es todo diferente es poder hablar, divertirme. Estoy tan confundido, maldita sea!...

_ Porque Miranda tenía que enterarse de todo.

_ Roberto: realmente no te entiendo, ya tienes la oportunidad de estar con la mujer que realmente te gusta, pero aun así no quieres dejar a Miranda.

_ Paul: estoy muy confundido, esto me agarró tan desprevenido que no sé que hacer.

_ Dijo Paul llevando sus manos a la cabeza.

_ Roberto se levantó y se fue a su habitación paso, por un lado, y le puso la mano en el hombro y le dijo:

_ Piensa bien que vas a hacer, porque Miranda y esa otra mujer no merecen tu confusión ni tu egoísmo no es justo que trates de quedarte con las dos y les hagas daño.

_ Paul: Lo sé primo, sé que ninguna merece nada de lo que estoy haciendo ni de lo que les hice, quisiera regresar el tiempo y parar este desastre, pero no puedo.