Capítulo 15

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MARATÓN 4/6

Avanzo un poco más entrando en otra parte de la casa que estaba más decorado que todo lo demás, había cuadros sumamente extraños con letras largas que no entendía porque eran letras árabes.

Me detengo cuando veo otro libro como él anterior, pero este me llama mucho la atención porque le tenían como más protegido como si fuera especial además de que se le veía más gordo con muchas más páginas.

Abajo había una alfombra roja, miro al suelo pisándola comenzando a acercarme más al libro viendo las letras que parecía que estaba escrito a mano todo, levanto mi mano tocando la hoja con mis dedos.

Era interesante ya que estos libros de este tipo se los solía ver en museos porque solían tener muchos años con una gran historia detrás.

Con mucho cuidado paso una página encontrándome con la sorpresa de que estaba escrita en mi idioma.

Entonces comienzo a leer lo que pone.

"Hay días llenos de viento, hay días lleno de furia, hay días llenos de lágrimas, pero también existen días llenos de amor, que nos dan el gran coraje para seguir adelante a pesar de las circunstancias"

"Los cambios son para los valientes, los cobardes prefieren quedarse donde están, aunque no sean nada felices"

Paso más páginas con cuidado encontrándome con significados por las fechas en la que naciste supuestamente.

Busco rápido la fecha de Derek entrándome la curiosidad encontrándola al poco tiempo.

Entre abro mis labios sorprendida cuando leo lo siguiente...

"Poderoso, lleno de fuerza y vitalidad, tiene bastante energía, si lo haces enfurecer su gran furia podría alcanzar un gran nivel que perderá los estribos, él mundo se volverá ceniza y fuego, será demasiado difícil calmar su furia, no cree en nadie ni en nada"

Me rio cuando termino de leer, era gracioso porque pocas cosas calmaban al humorado de Derek Lombardi mi italiano preferido.

Mirarle a los ojos y decirle que íbamos a tener sexo eso sí que le calmaba.

Vuelvo mi vista al libro continuando con mi pequeña lectura.

"No le importa lo que opinen los demás, se piensa que es el dueño de todo y sobre todo de la verdad"

"Ordena, odia recibir órdenes de otros, odia que se resistan a sus impulsos que tenga, nunca retrocede en nada y menos cuando toma una decisión importante"

Sin duda alguna estaba definiendo al italiano, me acuerdo cuando me negaba a llegar a mi límite con él por no suplicarle...

-Aléjate ahora mismo de ese libro y aparta tus sucias manos asquerosa... - mi sonrisa se borra al momento cuando escucho esa voz.

Rápido me doy la vuelta viéndola lo cerca que estaba de mí.

Se trataba de la madre de Malek que me mira con gran odio.

¿Se llamaba Dalila? No lo recuerdo bien...

-¿Perdón? ¿Quién eres tú para hablarme así? - ella me mira de arriba abajo.

Parecía como si esta mujer me estuviera echando una maldición, la verdad que esta mujer no es nada de fiar y da mal rollo parecía una bruja.

-Llevas solo casi tres días y has hecho ya daño a mi hijo – me habla tajante.

-Él se lo ha buscado – la contesto al instante.

-Maldecí el mismo día en que mi hijo se fijó en ti, mi opinión nunca cambiara al respecto sobre ti – yo también estoy de acuerdo con eso maldigo él día en que Malek puso sus puñeteros ojos en mí. - Eres un demonio como él otro, todo lo que tocas se convierte en ceniza, puedo ver como tienes otra maldición de ti por el resto de tu vida, traerás al mundo a dos demonios, por eso debes morir antes de que sea demasiado tarde - ¿Estaba hablando de Derek? ¿Y qué cosa con traer al mundo dos demonios? Esta mujer sin duda me confirmo que está loca. - No te quiero aquí y menos que te conviertas en la esposa de mi hijo Malek porque serás una ruina para él - yo tampoco quería casarme con su hijo por eso la contesto.

-Yo tampoco quiero casarme con Malek así que puedes hablar con tu puto hijo psicópata para que la boda no se haga, todo será mejor y yo me iré por mi camino sin hacer nada, está loca señora no sabe de lo que está hablando, ¿Qué dos demonios? - observa mi abdomen, frunzo mi ceño mirándome también para volver a mirarla a ella.

-Veo él futuro perfectamente y se de lo que habló dos demonios que no deberían llegar a este mundo porque vienen del mismísimo demonio, al igual que veo la perdición en mi hijo por ti, por eso estoy deseando que llegue el día en que se haga la boda, pero solo para que tu padre se marche de mi país y no pueda protegerte más así podremos deshacernos de ti de una vez por todas, estoy segura que cuando tú mueras la maldad se ira contigo y no acabaras pudriendo a mi hijo y menos traerás a más demonios al mundo... - jodida perra asquerosa.

Lo sabía, lo sabía que Malek tenía algo más planeado y su madre estaba a favor de él...

Suelto un largo suspiro para después acercarme a ella despacio como cuando él león va atacar a su presa después de haberla estado vigilando por un rato antes de pillarla por sorpresa.

La miro con gran asco y odio como miro a su hijo Malek.

-Pero que equivocados estáis... - la comienzo a decir. - ¿Te crees que necesito la protección de mi padre? No, se defenderme lo he demostrado clavando un cuchillo en la mano de tu hijo que por cierto a gritado a cuál nena cobarde... - la digo seria. - No sé si lo sabrás, pero ya me escapé una vez de tu querido hijo así que puedo volver a hacerlo sin que nadie se lo espere y sin duda tu hijo quedaría de nuevo como un pelele que se arrastra por una mujer que le abandono dos veces – después de lo que me había dicho esta mujer tenía que irme si o si, ella sin darse cuenta me había contado el plan que tenía Malek conmigo después de casarnos, me lo esperaba sin duda, Derek de nuevo tuvo la razón lo único que quería Malek era esto para hacer conmigo lo que quiera pero no lo va a conseguir.

No pensaba esperar a que él me torturara, abusara y me matara para usarme a su antojo, no pensaba aguantarle toda mi vida.

-Eres una prostituta ramera que se merece todo lo peor, no pienso hablar más tiempo contigo tienes al diablo encima de ti todo el tiempo y solo me traerás desgracias – sonrió sin poder evitarlo.

La verdad que sus palabras no me molestaban, se creía con él derecho de juzgarme sin conocerme una mierda.

Pero eso si igual que ella me juzgaba yo también podía hacerlo perfectamente.

-Uy si no hable conmigo mejor ves con tu hijo y dale clases de educación y traumas y todas esas mierdas, porque no hay peor cosa que tener a un hijo que abusa de adolescentes están tanto vivas como muertas – sonrió de nuevo viendo como ella empieza a sacar su lado malo cabreándose por mis palabras hacía su hijo. - ¿No crees que se ha ido demasiado del camino? A parte de ser un cobarde que tiene que fingir ante los demás siendo alguien que no es – la gran ira llega a ella y en solo un segundo después se escucha él fuerte sonido de su mano abierta impactando contra mi mejilla dándome una gran bofetada.

-¡RASTRERA ASQUEROSA NUNCA VUELVAS A MENCIONARTE DE ESA MANERA CON MI HIJO SOLTANDO ESAS PALABRAS SUCIAS DE ÉL! - siento el sabor metálico de la sangre deslizarse por mi labio saboreándola con la punta de mi lengua, llevo mis dedos viendo la sangre.

Entonces no me lo pienso y la meto también una gran bofetada que termino tirándola al suelo cayendo de culo tirando uno de los jarrones que había detrás de ella.

¿Enserio se pensaba que tenía el derecho de pegarme y que no se lo devolviera?

No me conocía de nada, puedo ser una hija de puta cuando me buscaban y ella me había encontrado.

Ojalá se hubiera partido la cabeza contra él jarrón, un problema menos.

Me tiro a ella posicionándome arriba suya soltándola otro guantazo.

-¡Valla! ¿¡Que te paso vieja asquerosa!? Igual que recibió tu hijo por lista tú también vas a recibir – vuelvo a golpearla agarrándola de su cuello comenzando a asfixiarla. - Nunca en tu puta vida vuelvas a levantarme la mano ni tocarme porque la próxima te matare lentamente, no tienes idea con quien te estas metiendo...

Mi lado psicópata sale a flote de nuevo.

Veo como su mejilla golpeada comienza a hincharse y de su nariz salía sangre, su mejilla estaba comenzando a ponerse morada además de tenerlo rojo.

-Te voy a cortar esa mano y luego te hare que te comas tu propia mano – me levanto soltando mi agarre de su cuello viendo como comienza a toser fuerte en el suelo.

No puedes golpear a una persona porque te esté diciendo la verdad y que encima no piense que se la voy a devolver, porque sí, yo no me cortaba ni un pelo quien me tocaba la pagaba así de fácil me la sudaba que fuera la madre de Malek.

Ella me mira con odio, juro que si me volvía a tocar no iba a responder porque la mataba con mis propias manos aquí mismo y él aladino se quedaba sin madre.