Martillo

Patrick

Desperté con Sara en mis brazos, la miraba dormir y no podía dejar de sonreír, era hermosa, radiante, hasta dormida sonreía, no podía creer la suerte de tenerla, me comprendía, me tenía paciencia y no me presionaba, era alegre e inteligente, fuerte, decidida, y hermosa como nadie... como si fuese demasiado para mí, solo sabía que iba a cuidar de ella del mundo entero si fuese necesario. Mi teléfono sonó y me levanté rápido para no despertarla, apenas eran las seis de la mañana.

- Que hubo martillo nos vemos en dos horas?-

La voz de Adam sonaba a qué recién abría sus ojos, se preparaba junto conmigo para el entrenamiento y Max nos ayudaba a diario.

- Mm no creo, quizás los alcance más tarde-

Le dije mientras me servía un café, ni de broma iba a dejar sola a Sara.

- Estás con Sara? que venga, yo estoy con Michelle y le pedí que venga, después podemos almorzar juntos si quieres-

Necesitaba ir, pero no me gustaba la idea de que Sara me viera, simplemente porque prefería mantenerla al margen, como ella decía su imaginación era poderosa y de solo ver se iba a preocupar demás

- Ok, ella duerme, cuando despierte te aviso-

Adam iba a decir algo más, pero sabía que por más que insitiera no obtendría otra respuesta de mí, así que se despidió.

Sara despertó y su rostro era de lo más adorable, su ojitos y labios hinchados, la miraba sonriendo y solo pensaba en controlarme para no hacerla mía en ese momento. Fuimos a ducharnos juntos, Sara era increíble porque por más que yo quisiera contenerme aunque sea un poco, ella me provocaba para que no lo hiciera, la tomé allí mismo, pero aunque ella no se diera cuenta me contenía, y demasiado.

- Que quieres hacer hoy? recién es viernes, debería estudiar para mí examen pero no tengo ganas-

Me dijo torciendo su boca mientras desayunaba sentada en mi regazo como siempre.

- Tenía que ir con Adam y Max a entrenar pero tampoco tengo ganas, podemos hacer nada juntos? -

Ella río y giro quedando a horcajadas sobre mi pasando sus brazos por mi cuello

- Nada de eso... ve si tienes que ir, yo esperaré aquí, trataré de ver cómo hace mi cerebro para entender esos malditos números de economía que tanto odio-

Me dijo resoplando molesta lo que me hizo reír

- Y porque no me dijiste? los número son lo mío-

Le hablaba y me sentía estúpido porque no podía dejar de sonreír, solo apretaba más a mi cintura

- Sabes de economía? en serio? será un alivio para David, porque creo que quiere golpear mi cabeza-

Me dijo de lo más animada, y no pude escuchar más que David.... definitivamente lo mío era enfermedad

- Mi título es de economía y finanzas, quien mierda es David? -

Le pregunté serio, ya mi sonrisa se había borrado por completo y mi ceño estaba arrugado

- Un compañero que me ayuda después de clases, te va a encantar es de lo más agradable, acepto que me ayudes después que regreses, ahora vete te esperan-

Me dijo y se acercó a besarme de una manera que hacía que no quisiera irme, se pegaba más a mi y yo no podía soltarla.

- Quieta Tatlı... si no quieres que te lleve a la cama en este momento -

Le dije contra sus labios y ella sonrió sin abrir sus ojos

- No me agrada una mierda, es más ya me cae mal ese tal David -

Sara rió a carcajadas, y se puso de pie para limpiar lo del desayuno y yo la seguí para ayudarla

-Ohh el estaría encantado contigo, le gustan así de como tú... serios y grandotes... David, es gay Patrick... tu neandertal interno puede estar tranquilo-

Me dijo riendo de mí que la miraba de costado, y ni así en me quedaba tranquilo.

- Quieres venir conmigo? la novia de Adam estará allí, pero puede que te aburras-

Le pregunté dudoso, no me convencía demasiado, pero no quería dejarla, pero se dió vuelta entusiasmada y sonriendo

- En diez minutos estaré lista, juro que no me voy a aburrir, tienes ropa en mi armario que dejaste el otro día-

Me dijo mientras se iba corriendo a la habitación de lo más entusiasmada, no podía dejar de reír de verla, parecía una niña.

Llegamos y a Sara le asombraba todo, era un predio militar que se utilizaba para pruebas y prácticas, al ingresar la seguridad le llamo más la atención y parecía hasta asustada, le pregunté si estaba bien.

- Es cómo en las películas pero un poquito más simpáticos-

Me decía fascinada, mientras la llevaba tomada de la mano para dejarla con Michelle que estaba en las gradas, me hacía reír de solo pensar lo que imaginaba. Michelle era de lo más amable, la conocía desde hace más de seis años y recibió a Sara de lo más contenta.

- Oye!! trata de que el martillo no golpee a Adam tan fuerte! volvió con la ceja partida el miércoles -

Me dijo Michelle riendo mientras saluda a Sara para irme con el los demás que me gritaban a lo lejos

- Ya te propuso matrimonio? -

Le dije mirandola con los ojos entrecerrados, Adam tenía tres años más que yo, y quería esperar a entrar a Fort Drum para proponerle matrimonio a Michelle, solo que yo no sé lo diría, lo difícil era que los dos queríamos quedarnos, y había dos lugares solamente, pero Max insitia que ambos lo lograríamos, Adam era bueno en lo que hacía, pero además tenía más experiencia que yo.

- Mm no, aún no... pensándolo bien, dale más duro-

Reí y me fui viendo el rostro de Sara, que miraba sonriendo pero confusa, sabía que iba a llenar de preguntas a Michelle, y no me gustaba tanto, pero en algún momento esa información le iba a llegar.

Adam ya me esperaba así que como siempre nos fuimos a correr para empezar y Max nos apuraba, correr y disparar al blanco eran la paz extrema para mí, era como si mi cerebro se reiniciará y nada absolutamente nada se me cruzará por el mismo, era como entrar en un mundo paralelo.

- Oye!! estas lento hoy! el viejo te saco más de tres segundos-

Me decía Max mientras Adam reía de mí y solo le decía que era pura suerte.

- Hey señoritas... ya llegó por quién lloraban... son unos flojos! -

Chris llegó a darnos una mano como todos los viernes, el ya estaba en Fort Drum y salía los viernes con permiso para ayudar a todos los reclutas que se entrenaban ahí, pero se quedaba la mayor tiempo con nosotros, era uno de los mejores tiradores que había conocido

- Primero... Quien es la amiga de tu novia? porque debes preséntame ahora mismo-

Le dijo a Adam estrechando su mano haciéndolo reír junto con Max, y yo quería matarlo

- Mi novia Cabrón, y voy a matarte-

Le dije de lo más enojado golpeando su hombro

- Ouch... bájale... ya sabía! recién saludé a Michelle y me la presentó, era broma. No crees que es demasiado bonita y simpática para ti? -

Me dijo haciendo que acomodaba su hombro de lo más dramático

- Y por eso si esa chica es capaz de soportarlo, se la cuidamos porque ni en sus sueños consigue un niña así de nuevo-

Bromeaba Adam y sabía que iba a pasar a todos les pasaba, las bromas eran para todos por igual

- Es que parece la amiga de su hermanita más que la novia-

El idiota de Max no perdía oportunidad para molestarme

- Y tú novia? imbécil, cómo está ? dejen las estupideces y terminemos-

Max me miro queriendo matarme, fue un golpe bajo pero es que era increíble, había perseguido a Carol por años y lo arruinó en un fin de semana, todos rieron y sabían que era el fin de la discusión.

- De acuerdo...El lunes será el examen de matemáticas, física y lógica, Patrick será un paseo para tí, Adam necesitas reforzarlo, dile a este imbécil que te enseñe sus métodos, no sé cómo lo hace, martes, miércoles pruebas física y táctica de lucha, ambos están bien ahí, jueves, Tiro... Patrick estás en nueve de diez, bien pero podría ser diez de diez, Adam ocho de diez, hasta aquí solo Martillo te supera y el viernes, Dios los ayude... es resistencia y serán más de nueve horas-

Chris nos daba información que al resto no, por el solo hecho de que era un amigo y además iba evaluando una vez a la semana a todos los aspirantes y presentaba los informes, en ese sentido no nos hacía ningún favor, todos éramos iguales.

- Tanque refuerza los números y un poco el tiro, y estás adentro .. y en cuanto a tí, nada, para mí lo pasas sin problema -

Me dijo Chris muy tranquilo pero no iba relajarme por eso.

- Señoritas tomen sus armas, deben llegar al diez de diez, no se mueven hasta que lo consigan, me voy a ver a los demás, esos si están perdidos -

No dijo haciendo una seña con su cabeza y se fué. Así nos fuimos unos metros más allá donde se hacía tiro, paso una hora y seguía igual, nueve de diez... me senté en el piso frustrado, me esforzaba y no podía .

-Sabes cuál es mi secreto? antes de disparar pienso que ese único disparo va a salvar a la persona que más amo en el mundo, que su vida depende de mí, tomo aire lo imagino y jamás fallo -

Chris se había puesto de cuchillas a mi lado y me hablaba bajo

- De pie cobarde! de nuevo... ahora-

Casi me grito golpeando mi espalda, solo tome aire y pensé en lo que me había dicho, imaginaba a mis padres, Cathy...Sara, las imágenes se me venían una y otra vez a la cabeza, cuando normalmente no pensaba en nada , termine y esperaba con Chris a mi lado que Max revisará

- Maldito Cabrón!!! hiciste once de once!!!-

Gritaba Max más emocionado que yo, que sonreía satisfecho

- Si se pudo .. solo faltaba motivación.. otra vez, no quiero casualidades, doce de doce y te vas -

Me dijo tratando de no reír, y yo solo voltee por primera vez a ver a Sara a lo lejos, que levantó su mano saludando y me la imaginaba sonriéndo porque no veía bien su rostro..el próximo fue doce de doce y solo de imaginar que ella dependía de mí, probé otra vez ... hice de doce, definitivamente Chris era genial.

- Creo que dejaremos el almuerzo para cuando termines viejo -

Le dije dejando todo y apurado por irme.

- Como mierda lo haces cabrón? 9 de 10 y no subo...-

Negué con mi cabeza

- Habla con Chris, llámame para ver tus números -

Me despedí de Max, que me comentó que iría a hablar con Carol, se iba en dos semanas a Irak y lo tenía bastante mal, no solía dar consejos porque era pésimo, solo le dije que se disculpe con ella y acepte que se equivocó

- Pero si ella me había dejado!! literalmente me dijo que no éramos nada!-

Me gritó como frustrado de decir siempre lo mismo

- Y a las horas ya estás con otra mujer? no crees que fue muy rápido? -

Le dijo Adam que descansaba sentado en el suelo, solo me reí y me fuí... era cierto, Max tenía un gran problema si bebía era un hombre totalmente distinto al que era, y ese fue su problema.

- Oye! eres genial... cuando alguien me moleste le diré que tú te harás cargo, además que vas a enseñarme, por si esa perra de Mariam se te acerca-

Me decía Sara mientras caminábamos hacia el automóvil, había dado un brinco y la llevaba cargada en mi espalda, no podía evitar reír de todo lo que pensaba

- No les dirás nada, porque nadie va a molestarte lo juro y salvó tú nadie se me va acercar-

Bajo su rostro para dejar un beso en mi mejilla

- Te conviene, porque no seré tan buena como tú, pero si puedo matarte, aunque tendré que hacerlo mientras duermes, sino no podré hacerlo eres más fuerte que yo...-

Me dijo pensando muy seria y era increíble pero me hacía reír de nuevo porque lo decía totalmente convencida.

- Podemos almorzar con mi hermana? en realidad debo ir yo, me llamo que quiere hablar conmigo, pero tal vez sea mucho para tí... si quiere puedes buscarme al rato-

Ya habíamos subido al automóvil, íbamos a mi casa necesitaba una ducha y ropa limpia

- Que quiere tú Tatlı ? iré con gusto, y si quieres estar sola con ella, te recojo después -

La mire de costado mientras conducía, si algo sabía era que para Sara era importante decidir por ella misma, y siempre le dije que lo iba respetar aunque no me gustara, la ví dudar porque mordía su labio inferior y ese gesto me volvía loco.

- Quiero ir contigo, pero se que va hablar mucho, y puede que te sature... además odio que te mire como si fueses la última gaseosa del desierto -

Me miraba con sus ojos abiertos de par en par como buscando una respuesta en mí, pero me hacía reír y tenía que aguantarme porque se enojaba ya que hablaba en serio.

- Uff puedo con su diálogo, que importa como mire? además es tu hermana-

Si era cierto que notaba que Alma me vigilaba prácticamente, pero jamás dijo ni hizo nada fuera de lugar, mantenía su distancia correctamente, ademas yo tampoco le daba confianza para acercarse.

- Será mi hermana pero le encantas... al carajo que se conforme con lo que tiene, seguro quieres acompañarme? -

Me dijo poniendo su mano sobre mi pierna y yo apoyé la mía sobre ella.

- A dónde tú quieras... siempre voy a querer-

Le dije sonriéndo, porque en realidad era así, el tiempo con Sara siempre era poco, cada fin de semana que estábamos juntos, debía disfrutarlo al máximo, luego la extrañaba por cinco días que eran eternos. Llegamos a casa y me fui a cambiar y duchar mientras que Sara se quedó conversando con mi madre, Cathy aún no regresaba del colegio y mi padre trabajaba, para irnos tuve que prácticamente secuestrar a Sara, mi familia la quería más que a mí y mi madre usaba cualquier técnica de manipulación para que se quedara, logro que Sara aceptara que vayamos a cenar con ellos, cuando mi Tatlı quiso consultarme mi madre ya había hablado por mí.

- Se que quieres a mi mamá, pero quería llevarte a cenar-

Le dije mientras íbamos a la casa de su hermana y el cabrón.

- Lo siento... juro que no me dió tiempo a nada-

Me decía de lo más sincera porque fue así, así que comencé a explicarle cómo debía hacer para evadir a mi madre sin que se de cuenta.

Al llegar el cabrón nos abrió la puerta, se notaba lejos que el y Alma eran de lo más presumidos, la casa que habían comprado era prácticamente una mansión, como fuera apenas vio a Sara sonrió de lo más feliz, y hasta ella lo notó porque apretó suavemente mi mano y se pegó más a mi, ya empezábamos mal.

Fuimos al comedor donde Alma nos recibió como siempre muy animada, aunque se notaba que le sorprendió verme pero lo disimuló bien, se acercó a saludarme, veía como mientras Sara tomaba asiento, el cabrón tomo asiento rápidamente a su lado, no podía decir nada, así que tome asiento frente a ella y Alma en la punta de la mesa.

-Saruchi hablamos con papá por la mañana, dijo que intentó hablar contigo y no quieres escucharlo, deberías pensarlo bien-

Alma hizo una pausa porque una señora mayor, al parecer personal que trabajaba para ellos nos servía café.

- La respuesta en no, así que no pierdas tiempo, si solo querías eso, Patrick y yo tenemos mejores cosas que hacer-

Le dijo Sara y su mirada había cambiado, era fría y distante, no parecía enojada, pero daba miedo, rogaba que nunca me mirara de esa manera.

- Eres mi hermana, me preocupo por tí, a principio de mes va a quitarte todo su apoyo, sabes lo difícil que será? -

Le pregunto de lo más comprensiva, imaginaba de que hablaban pero no tenía seguridad, esta vez Sara no me había comentado nada, la ví bajar su taza despacio y tomar aire un segundo, luego se puso de pie trayendo su café y tomando asiento a mi lado, la mire un segundo y solo me sonrió, luego miré al cabrón y me imaginé un segundo que pasaba.

- Cómo te decía la respuesta sigue siendo no, y estoy deseando que no me de un centavo, hace tiempo que espero que lo haga, seré muy feliz en ese momento-

Tome la mano de Sara por debajo de la mesa y la entrelace a la mía, solo pensaba como iba a hacer con su universidad y que yo podía ayudarla, pero ella se veía muy tranquila.

- Sara ... no seas tan terca, deberás trabajar y estudiar, vas a la universidad más cara del país, no tendrás dinero para la renta de tu departamento, apenas si tendrás dinero para comer, será por demás sacrificado, y hasta quizás debas abandonar tus estudios -

Le dijo Javier mirándola con tranquilidad entrelanzando sus manos por encima de la mesa, casi con satisfacción de acorralarla.

- Me sacrifico a diario por Kelly y por Blanca, porque voy a abrir sus caminos, no dejaré que mi padre les busque algún imbécil arrogante cómo marido,las traeré conmigo, en cuanto al dinero no es problema de ustedes lo que yo haga, hace tiempo tengo cubiertas todas mis posibilidades, gracias por preocuparte por mi cuñado, pero tú única preocupación debería ser mi hermana -

Me mantenía al margen, pero no pude evitar una media sonrisa ante las palabras de Sara, sonaba serena pero firme y jamás dejo de sonreír.

- Papá solo quiere asegurarse de que vivamos bien, que seamos felices y no pasemos ninguna necesidad -

Le dijo Alma tratando de razonar con Sara que solo negaba con su cabeza

- Joder Sara!!! que crees que te va a dar este hombre!! vas a dejar todo por él y vivir como una miserable solo por orgullo? aspiras a ser una simple ama de casa que jamás se podrá dar un gusto??!! no vale la pena! -

Le dijo el cabrón alzando un poco su voz y en español, porque además era de lo más cobarde, apreté la mano de Sara porque ya me importaba una mierda que supiera que le entendía, pero no me dió tiempo porque se puso de pie y golpeó fuerte la mesa con la palma de su mano.

- LA REPUESTA ES NO!!! escuchen bien ambos, los únicos miserables aquí son ustedes que ni saben lo que es ser feliz o amar de verdad, porque ni siquiera se respetan, yo soy feliz!!! elijo lo que me hace feliz y Patrick es mi felicidad, no necesito el miserable dinero, porque no lo cambiaría ni por todo el oro del mundo, moriría antes de vivir esta vida de mierda, frívola y materialista que ustedes llevan, y tú... ya te dije que delante de Patrick hablas en inglés!!! o acaso te da miedo?-

Sara les gritó ambos en Inglés y me miro tratando de calmarse, tomando aire, solo me puse de pie y susúrre en su oído que era hora de irnos a lo cual asíntio

- Si es lo que quieres Sara, espero que no te arrepientas, porque papá no me dejara ayudarte aunque quiera-

Le dijo Alma claramente enojada pero en tono bajo.

- Y yo ni muriendo les pediría ayuda a ustedes, puedo jurarlo -

Le dijo con un tono amenazador y tirando de mi mano para irnos, dimos unos pasos y me detuve en seco, Javier venía en silencio por detrás nuestro para acompañarnos

- Te dije que te alejes de ella, vuelves a tocarla y te corto la mano-

Sin dudarlo y con todas las ganas que tenía le dí un golpe fuerte en su rostro que lo hizo caer prácticamente inconsistente.

- Patrick estás loco??? !! lo mataste!!!-

Gritaba Alma que corrió a su lado asustada, Sara se paró a mi lado en silencio tomando mi mano y mirando todo.

- Aún no, pero si se acerca a Sara lo haré, controlalo si lo quieres vivo-

Me di vuelta y me lleve a Sara de allí, sabía que el muy cabrón había tocado a Sara por debajo de la mesa, por eso ella se alejó, quería matarlo literalmente, pero lamentablemente no podía hacerlo.

- Martillo no? un solo golpe? -

Me dijo Sara sonriendo antes de subir al automóvil, parada frente a mi rodeandome con sus brazos mis hombros, pensé que iba darme un sermón o iba a estar molesta, pero por el contrario, no me cuestionó

- Si... es por eso, quiero matarlo Sara-

Le dije abrazándola más fuerte para pegarla a mí

- Estás loco? y aliviar el sufrimiento de la vida miserable que le espera? noo... déjalo sufrir, si puedes acomodarlo de vez en cuando-

Me dijo sonriéndo y besándome con muchísima dulzura, lo que me hacía pasar de cero a cien en un segundo.

- No te preocupes, voy a ayud-

No me dejó terminar de hablar porque volvió a besarme sonriendo.

- Shhh, ya había conseguido trabajo, sabía que se avecinaba desde antes de mi accidente, estaba lista, pero digamos que tengo dinero para vivir muy bien por bastantes años, pagar mi universidad y comprarme una casa, gracias a mis abuelos, me lo depósito mi madre hace una semana... nunca, escúchame bien Patrick... nunca dejaré ni quiero que tú dejes que el dinero cambie nuestra relación... somos más que eso-

Me miraba a los ojos de una manera tan dulce y tan sincera que me derretía, antes de saber que no necesitaba a su padre, ya había buscado trabajo y renunciado a todo por nosotros.

- Cómo no amarte Tatlı... aşkım-

Volví a besarla con ganas y ella a mí

- Que te parece si antes de ir a tu casa pasamos un tiempo solos...-

Me dijo guiñando su ojo y riendo, le di un beso en los labios y le abrí la puerta del automóvil para que suba, si íbamos a pasar tiempo solos, porque no pensaba llevarla a cenar a casa, resolvería eso luego.

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