Mordelona

Alejandra.

Estoy viajando a Guayaquil, pero siento algo raro.... muy raro es una sensación extraña, llego al terminal terrestre y mi padre no está como otras veces esperándome, baje y camine hacia la salida busque un taxi, el suelo estaba bastante húmedo parece que llovió bastante fuerte anoche, estoy por cruzar la calle para tomar un taxi y un auto con un chófer arrogante y sin humanidad alguna, por poco me envía a vivir al cielo.

Caigo al suelo dónde ensucie toda mi ropa y mi cartera, de revista ese imbecil la hecho a perder.

Alexis---: ¿Porque te atravesaste? por poco te mato.

Alejandra lo mira con mucha rabia ella iba bien el único que cometió el error era él.

Alejandra---: Como te atreves a decirme tal estupidez, fuiste tú quien no sabe conducir y lo peor que no eres un caballero.

Alexis---: Estás sucia como crees, que te voy a tocar.

Alejandra le dió mucho coraje con la expresión que Alexis hizo, miro sus manos que estaban bastante lodosa de la cual se ensucio más y luego se limpio sus manos en la camiseta de Alexis.

Alexis---: Pero como te atreves (levantándose de golpe).

Alejandra---: Ahora tu también estás sucio (poniéndose de pies) eres un pelucón engreído, mira lo que le hiciste a mi cartera me costó cuarenta dólares y es de revista, la próxima vez que te vea es cuando me devuelvas mi cartera.

Ellos discutían, una patrulla se les acerca para ver qué clase de inconveniente había en aquel lugar.

Policía---: ¿Que ocurre aquí?.

Alexis---: Nada oficial(agarrando la cintura de Alejandra y presionando la hacía su cuerpo) lo que pasa que mi novia y yo nos estamos reconciliando, pero ésta muy enojada que se cayó cómo puede ver usted.

Policía---: ¿Es cierto eso señorita?

Alejandra---: (sintió el peñiscon) ah sí el arruinó mi balso y no lo quiere comprar.

Policía---: Resuelvan sus problema puerta adentro y no sigan haciendo el espectáculo en la calle.

Alexis---: Usted que es hombre sabe cómo son las mujeres de quejambrozas.

Alejandra---: Quejambrozas, ¿que te pasa?.

Policía---: Dímelo a mí, 25 años de casado (ingresa a la patrulla).

Alejandra---: Eres un patán. señor policía espere.(llama)

Alexis al ver que Alejandra estaba por hacerlo quedar mal, cubrió su boca con su mano mientras despedía al policía con la otra mano, Alejandra quería hablar pero no podía porque Alexis cubría todo su boca, así que no le quedo de otra que morder su mano.

Alexis---: Auusssh....Me mordiste.

Alejandra---: Te mereces eso y mucho más, atrevido sal de mi vista.

Alexis---: Ahora tendré que vacunar me, puedes tener rabia ya que tienes todos los síntomas.

Alejandra---: Imbecil.

Alejandra empujo hacia atrás Alexis y salió furiosa del lugar, tomo un taxi y fue directo Mapasingue este, donde su padre vivía, mientras que Alexis sonría miro la cartera de Alejandra ya que ella se la había tirado por su pies.

Alexis---: Tan barata es está cartera y ella actúa como si costará millones, ¡que mujeres!

Alexis mira su mano y sonríe ya que la mordida se había inflamado.

Por su parte Alejandra llegó a la casa del papá, de la cual era recibida por Carmen esposa de Pascual padre de Alejandra.

Carmen----: Me había olvidado, hija con tanto problema que no me acordé que llegabas hoy.

Alejandra---: Tranquila, dónde está papá

Carmen----: Ese es el problema, hija tu papá está en el hospital.

Alejandra---: ¿Pero que le pasó a mi papá?

Carmen----: Un pre infarto hija.

Alejandra---: ¡Por Dios! Carmen llévame a verlo.

Carmen----: Mejor duchate y nos vamos pareces que adelantaste el carnaval.

Alejandra---: Me encontré un aniñado engreído, que por poco me atropella.

Carmen----: Pero estás bien.

Alejandra---: Pero no hay que decirle a papá si no le da el infarto completo, lista yo estoy lista

Carmen----: ¿Así sin maquillaje?

Alejandra---: Me veo mal.

Carmen----: No, eres hermosa anda vamos el bus no demora en pasar.

Alejandra camino junto a Carmen y fueron directo al hospital, en otra parte de la ciudad, Amanda y Joselyn hacía compras era una tarde de suegra y nuera.

Joselyn---: Ya quiero estar casada con Alexis, no sabes cuánto lo he anhelado.

Amanda---: Creeme que yo también, mi hijo necesita una mujer como tú lo más pronto posible.

Joselyn---: Yo lo amo, Amanda pero pienso que a veces el no me ama, y eso me preocupa.

Amanda---: No te preocupes hija, Alexis es así pero cuando se casen verás que todo va a cambiar.

Joselyn---: ¡Ojalá! no quiero que se interese por otra mujer y me deje de amar.

Mientras Amanda y Joselyn conversaban en la habitación de Alexis el sonría al recordar a la chica que lo mordió el todavía no sabía su nombre pero era una chica encantadora, sus ojos y ese aroma a frutas tropicales, perfume barato pero muy único decía en su mente.

Alexis---: Será que te volveré a ver algún día mordelona.

Dora---: Joven, el joven Kevin está esperándolo.

Alexis---: Hazlo subir.

Kevin----: Te he llamado varias veces dónde has estado ¿y está cartera?

Alexis---: (sonríe) es de una chica rabiosa, casi la atropello.

Kevin----: Espera un momento, esa risa, esas miradas acaso te gustó la chica rabiosa

Alexis---: No hables tonterías, solo es una chica común.

Kevin----: Por lo que veo no es tan común para ti.

Alexis sonrió al recordarla y de nuevo la pregunta que ha hecho en las últimas horas y los recuerdo invadió su mente.

Kevin----: La dueña de esta cartera te ha dado un golpe en el corazón.

Alexis---: ¿Porque lo dices?.

Kevin----: Tienes una sonrisa de tonto.

Alexis---: No es eso solo, me preguntaba si algún día la volveré a ver, Kevin la manera de como la conocimos fue única.

Kevin----: ¿Te gustó cómo la conociste?

Alexis---: fue un buen encuentro, sabes por la manera de vestir y su acento ella es de provincia.

Mientras Alexis contaba cada detalle a Kevin, Alejandra abrazaba a su padre.

Alejandra---: Papi me preocupe cuando llegue y no te ví.

Pascual----: Hija, llegaste bien y como estás en la universidad.

Alejandra---: Si llegó bien y salí de vacaciones.

Celeste---: ¿Carmen cómo estás, Pascual?

Carmen----: Bien Celeste.

Celeste---: Vine a ver cómo estabas, según tu mejoría, tendré que hablar con la señora para contratar un reemplazo y no pierdas tu trabajo.

Pascual----: Quien podrá reemplazarme para no perder el trabajo

Alejandra---: Papá tranquilo, habrá algún problema si yo reemplazo a mi padre.

Pascual----: No hija, es un trabajo muy pesado.

Alejandra---: Papá yo puedo, se te olvidó que sigo agronomía.

Celeste---: Me parece bien, hablaré con la señora para que empieces mañana.

Alejandra sonrió no quería que su padre pierda el trabajo ya que es el único sustento que tenía para ayudarla en la universidad, su padre pudo haber dejado a su madre pero a ella jamás lo hizo siempre estuvo pendiente de sus necesidades era el momento de pagar un poco la deuda

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