Bienvenidos A La Morgue

Capítulo 6.

Pasaron días, Amanda se entero que Kevin se fue para no volver, aún así no perdía la esperanza de encontrar el teléfono. 

Un fin de semana y Justin junto a Amanda se encontraban en la cueva buscando entre las cosas hasta que Justin encontró un sobre. 

—Mira. Parece ser reciente, la cera del sello se despega fácil. 

—Déjame leer—Amanda la toma abriéndola—. 

'Querida Amanda:

Lamento irme, el diario ya no existe, descubrir la muerte de mi hermana llegó a su fin; enterre el teléfono para jamás encontrarlo. 

También quería confesarte que fui yo quien te puso esa nota en la cueva, la de entregar el diario o te pasaría algo, fue para no meterte en todo el drama que se formaría. 

Mi novia y yo solo queríamos protegerte, ahora regresaré a la ciudad y espero que algún día podamos encontrarnos de nuevo'. 

Amanda observó a Justin, ambos sabían que el teléfono estaría en algún lado enterrado, pero no sabrían donde. Justin reviso la nota con cuidado encontrando algo al verla fijamente. 

—¡Ajá! Tiene huellas de tierra. 

—Obviamente, dijo que lo enterró. 

—No, mira bien, este color de tierra solo puede ser de aquí—Levanta la vista sonriendo a Amanda—. 

—¡Eres un genio!—le da un beso en la mejilla—.

Ambos se pusieron a buscar hasta que Amanda encontró un lugar donde la tierra era más difícil de mover, girando a Justin, se pusieron a escarbar encontrando el teléfono. 

—Deja ver si aun enciende—Justin logra prenderlo—Listo. ¿Cuál es la contraseña? 

—Dámelo…—Amanda lo desbloquea entrando a la galería—Dime, esta foto… ¿Es reciente? 

—No. Saida ya tenía la ceja entre cortada por el accidente que sufrimos en esas tablas de surf—agranda la imagen a la ceja derecha de Saida—. 

—Cierto. Esta es de hace un año, sabía que Saida no mataría a Natalia. 

—Espera, ¿qué? ¿Creíste qué Saida mató a Natalia? Es Saida, el delito más grande que a hecho fue servirse doble porción de pastel en tu cumpleaños. 

—Justin, cariño. Nada es imposible, no olvides que encontré el cadáver de Natalia, no podía confiar en nadie. 

—Bien. Bien. Sobre eso, ¿no notaste algo raro en el cadáver? 

—Ahora que lo dices… ¡No! No me iba a poner a revisarlo cuando lo encontré, esto no es una novela de terror donde no te traumas al ver un cadáver, ¡y más siendo el de tu mejor amiga! 

—¡Lo lamento! Solo decía… 

—Ustedes dos me dirán lo que esta pasando aquí, ¡ahora mismo!—Dante aparece detrás de ellos—. 

—Hola, Dante, creímos que estarías con tu familia este fin de semana. 

Amanda y Justin se pusieron a contarle todo a detalle a Dante hasta que terminó anocheciendo. Amanda parecía sentirse tonta al ver que su regla de no confiar en nadie se rompió, bueno, la mayoría, porque a ninguno de los dos le comento sobre el diario aún intacto. 

—Bien. Encontraron todo esto, pero aún así el diario ya lo destruiste, ¿por qué seguir buscando? 

—Por qué es nuestra amiga, por favor, ¿en serio te ibas a rendir? Entonces que hacías aquí—Amanda cruza los brazos descubriendo a Dante—. 

—¡Está bien! Aun quiero saber quien la mató, era mi mejor amiga. 

—Querrás decir novia…—Justin ve a Amanda y Dante sin sorprenderse—. 

—Ay, lindo… Aun hay cosas que no sabes…—Amanda le da un beso y al alejarse se da cuenta de la mirada triste en los ojos de Dante—. 

—¿Ahora que planean hacer? Descubrieron que Saida no tiene nada que ver, ¿y? Aún no es nada. 

—En realidad, hay una cosa que podemos hacer—Amanda mira a Justin a los ojos—. 

—Oh, no. Eso es vandalismo, entrar a la morgue es una locura.

—Piensa. Dieron por hecho que Natalia se suicidó unos días después de encontrarla. ¿Por qué?—Amanda ve a Dante—. 

—La causa de la muerte debió señalar eso, podría ser corte de muñecas.

—Es explicaría porque había tanta sangre cuando la encontré ese día.

—Aún así, no sólo por eso significa que se suicidó—Justin piensa hasta que le llega una idea—Al menos que quien la mató planeo hacer que luciera un suicidio. 

—¿Pero cómo? Estaba debajo de la cama, así no luce un suicidio y ya. 

—¡Una carta! Cuando la encontraste, ¿no encontraste nada?—Dante observa a Amanda esperando una respuesta—. 

—No. Todo está bien. Al menos que alguien la haya plantado después. 

—Tenemos que ir a la morgue—Dante quiere salir, pero Justin lo detiene—. 

—Espera, ir ahora es marcar nuestro fin. Mañana en la tarde iremos, diciendo que es un trabajo escolar sobre profesiones. 

—Podemos preparar todo y nos vemos mañana en la tarde fuera del lugar para iniciar el plan—Amanda toma sus cosas para irse—.

*Día siguiente, en la tarde*

Los tres habían repasado el plan en la mañana antes de ir; un poco nerviosos entraron al lugar para hablar con un médico forense que después de intentar convencerlo, les creyó dejándolo acompañarlo a ver el lugar. 

—Este es donde están los cuerpos, no deberían entrar, ya que podrían asustarse, así que sigamos—empieza a caminar con los chicos detrás—. 

—Susurros de Justin—Adelante, Amanda, nosotros los distraemos. *Estornuda* 

—Susurros de Amanda—Tranquilos. Yo me encargo. 

Amanda se alejo en silencio entrando a la habitación, sintiendo frío empezó a buscar entre los nombres de cada casilla. Encontrando el de Natalia soltó un suspiro largo y lo abrió de golpe. 

—Pero que demonios… No tiene cortadas en las muñecas, solo en la garganta—Ve un expediente al lado en una mesa—'Informe del cuerpo' 

'Causa de muerte, corte recto en la garganta superior, heridas en los tobillos por intento de huida y corte limpio para detenerla'.

—Hay otra cosa detrás de la hoja—Le da la vuelta—. 

'Se declara suicidio… no hacer público, completamente confidencial por orden de…'

—¡Que haces aquí, mocosa! 

De un momento a otro se encontraban frente al alcalde del pueblo, los tres sabían que descubrieron algo que no debían. Un asesinato que ocultaron para beneficio del mismo alcalde con tan mala reputación.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***