Capitulo 19

*Los nervios del primer día de trabajo estaba a flote, y más aún con un jefe rodando todo el tiempo*

Recepcionista... Buenos días, señorita me llamo Letty y me imagino que usted es la nueva diseñadora, permítame darle la bienvenida y llevarla hasta su oficina.

Valentina... Hola querida, gracias por el recibimiento, pero no hace falta que descuides tu puesto por mí, yo podría llegar sola, solo dime hacia donde cojo.

Letty... Es usted muy amable, pero ese es mi trabajo, permitame llevarla.

Valentina... De acuerdo vamos, y dime Valentina o Valen está bien?

Letty... No podría permitirme a faltarle el respeto.....

Valentina... no es falta de respeto querida, me gustaría que me llamases por mi nombre.

Letty... Está bien Valentina, es un placer.

Llegando a su oficina...

Letty... es aquí..

- Atención a todos, ella es la Nueva Diseñadora tratarla con respeto.

Valentina... Hola, es un placer, espero seamos muy buenos amigos.

Dina... Así que tú eres la protegida, veamos y cuanto duras aquí.

Valentina... A que se refiere con protegida.

Letty... Dina no seas grosera y compórtate, sino quieres que presente una queja con el jefe.

Después de esa presentación un poco acalorada, Valentina es llamada a Presidencia.

Mirta... Señorita, usted es libre de pasar, no hay necesidad de ser anunciada.

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Entrando a la oficina...

Valentina... Se puede saber que fue lo que has dicho para que todos me traten diferente.

Diego... Que podría ser? Valentina tu eres muy importante para mí y lo menos que puedo hacer es que todos mis empleados te traten con respeto.

Valentina... No hace falta que interfieras por mí, el respeto se gana con la personalidad y la responsabilidad pero tú que vas a saber de eso, ¡ha espera, es que estás acostumbrado a que todo se haga como tu lo dices.!

Diego... No quiero discutir contigo sobre eso, si te mande a llamar es por algo distinto, quiero que me digas la verdad, ¿Quién es el padre de ese pequeño?

Valentina... Ja, que cínico eres, contéstame algo, ¿tú quien te crees que eres para meterte en mi vida privada y sobre todo con mi hijo?

Diego... Es algo que me merezco después de haber desaparecido durante 5 años, ¿no te parece?

Valentina... Como veo que no tienes nada importante que decirme, me retiro..

Diego... Tú no te vas, hasta que me digas.

Acercándose rápidamente a la puerta y colocando seguro..

Valentina... ¿Pero que haces? No tienes permitido hacer algo así, habré esa puerta.

Diego... ¡¡Perdóname!!

Valentina... ¿¿Qué??

Diego... Perdóname por haberte lastimado, sé que me porte como un completo imbécil.

Valentina... ¿Tú piensas que unas simples palabras va a cambiar todo lo que me hiciste? Pues te equivocas, ahora habré esa puerta.

Diego... ¿Ese pequeño es mi hijo?

Como un balde de agua fría la sangre de Valentina recorre por todo su cuerpo haciendo que se congelará en el momento.

Valentina... Como te dije, tú no tienes derecho de meterte en mi vida, y quien sea el padre de mi hijo, ese no es asunto tuyo, así que deja de pensar algo que no te corresponde.

Diego... ¿Contesta, o es que tienes miedo de lo que podría hacer?

Valentina... Ja ja, has lo que te dé la gana, hace mucho que deje de tener miedo y más a un hombre insignificante como tú.

Diego... Ok, así es como quieres jugar, pero solo te diré, que el día que descubra quien es el padre no habrá tierra donde se pueda esconder de mí y se arrepentirá de haberse cruzado en mi camino con la mujer que una vez fue mía.

Valentina... ¡¡Cállate!!

Resonó una bofetada en toda la oficina.

- Eres un bastardo, te recuerdo todo lo que mi hiciste? Tú eres el menos indicado para meterte en mis asuntos, no te metas con mi hijo o sabrás quien soy, no soy la misma de antes, así que te recomiendo que te abstengas a tan solo respirar cerca de mí

Diego... Como quieras, por hoy dejemos hasta ahí, ya veremos que opinas para la próxima...

Con la mano adolorida una Valentina sale hecha una furia a su puesto de trabajo, el día se la pasa poniéndose al corriente de todo el trabajo que deberá realizar, claro bajo miradas de la mujer que apenas supo que venía una persona muy especial para su jefe querido los celos le brotaron por los ojos, ideando la mejor manera para que no dure en el trabajo, pero claro que todo le saldrá el tiro por la culata.

Diego por su parte quedo con muchos líos en su cabeza..

- Vaya que tiene fuerza esta fierecita, pero veremos que tanto puede aguantar.

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Diego... Anuncia el concurso del mejor diseño y también que el premio será una sorpresa.

Mirta... Si señor..

Vemos de que material estas hecha mi fierecita.

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