Capitulo 14

*Sin permitir que termine de hablar la carga como si de un animal se tratase, la lleva a la habitación y la lanza sobre a la cama y él se coloca encima de ella besándola tan salvajemente que  no le da tiempo a gritar, tomándola tan fuerte desgarra su vestido y mete su mano en sus partes haciendo que grite de dolor, el llanto y las lágrimas se mezclan con la agonía que está sintiendo en esos momentos, mientras él sacia sus deseos insaciables, ella solo pide que acabe pronto esta pesadilla, haciendo que así tome la decisión de abandonarlo, pero antes le pediría el divorcio.

Al siguiente día como si nada hubiese pasado Diego pide hablar con ella en su despacho.

Valentina apenas puede moverse después de aquella noche tan salvaje y traumática, como puede se va al baño a ducharse, llorando incontrolablemente intentando restregarse todo su cuerpo adolorido pensando que así borraría todas las huellas que su esposo le había dejado, haciendo que esas huellas se marcaran en su corazón y que un futuro quien sufra por reinventar todo ese dolor que ahora siente sea un Diego abatido por el arrepentimiento.

Lista para enfrentar a su esposo baja hasta el despacho donde le espera lo que cambiara su vida para siempre.*

Toc, toc

- Adelante.

Valentina: ¡ya estoy aquí!, ¿querías verme?

Diego: toma y fírmalo, son los papeles del divorcio.

*Con una punzada en el corazón Valentina recogió los papeles y leyó detenidamente cada punto, haciendo que una sonrisa amarga se dibujara en su rostro.*

Valentina: ¡no estoy entendiendo nada!, ¿porque me pedirías el divorcio?

Diego: ¿no es obvio? No quiero seguir casado con una mujer que para mí no es más que una trepadora y arribista que seduce hombres.

Valentina: ¿cómo puedes pensar eso de mí?, ¡siempre te he respetado en todo momento! jamas he estado con otro hombre.

Diego: suficiente no quiero seguir escuchándote, será mejor que firmes lo antes posible, te doy toda esta semana para que lo pienses y coloques el monto que quieras como recompensa por estos 2 años de matrimonio.

Valentina: no necesito nada de ti, puedes ahórrate todo ese dinero.

*Con una punzada en el pecho vio firmar aquellos papeles donde la separarían de ella para siempre, no sabía el por qué había sentido eso pero poca importancia le dio ya que el anamoramiento se le había pasado, eso es lo que él creía. *

Valentina: listo, no hace falta que me des tiempo de irme, ye tengo mis maletas listas, si tu no me lo pedias lo iba hacer yo.

Diego: al parecer estabas ansiosa por librarte de mí?

Diego: ¿siempre quisiste eso no? Ahora lo tienes, siéntete satisfecho, ¡ha tengo una duda! ¿Porque ahora y no antes?

Diego: simple, porque no te quiero más en mi vida.

*Esas palabras marcaron el corazón de Diego sintiendo un impulso de revertirlas pero su orgullo no le permite, con una sonrisa en el rostro Valentina se acerca a escasos centímetros de su ahora ex-esposo.

Su cercanía hace que Diego sienta una serie de emociones mezcladas entre odio, amor y confusión.*

Valentina: fue un placer a ver sido tu marioneta durante 2 años, que disfrutes tu libertad.

*Acto seguido le da un cálido beso en esos labios que una vez la tentaron a probarlos, haciendo que todas las fibras de su ex-esposo se removieran sin querer que se alejara de él.

Después de terminar con la farsa del matrimonio sale del despacho y sube a su habitación donde se deja caer contra la puerta derramando las últimas lágrimas por un hombre que no valía la pena.*

*Diego por su parte no sabía cómo explicarse todo lo que acababa de pasar, ahora que ya nada los une, siente esa necesidad de ir tras ella y hacer de cuenta que nada paso, quizá fueran las últimas palabras de su ex-esposa o aquel beso que le dio, pero con remordimiento en su corazón la vio salir de su casa tan solo con un maleta en mano, sintiendo esa extraña necesidad fue hasta la habitación de Valentina donde se quedó impactado por ver aquellas sabanas magulladas y con manchas de sangre, lo que le hizo pensar en esa noche y en lo salvaje que había sido, haciendo que se diera cuenta que jamás estuvo con ningún hombre y que el había sido el primer hombre de su vida, había robado la virtud más valiosa de su esposa.

En la mesita de noche había una nota donde le decía, “solo he llevado mis cosas con las que he venido, todo lo que me has dado se quedan ahí, puedes contar prenda por prenda y joya por joya, si te falta algo solo envíame la factura y te lo pagaré”  reviso el closet donde estaba todas las prendas que él le había enviado y todas las joyas que le había dado, incluso los perfumes más caros aun sellados.*

Valentina busca refugio donde su padre quien con mucho coraje toma la decisión de haber de la vida de Diego miserable, por lo que para resguardar la integridad de su amada hija la envía a otro país donde empezará una nueva vida.

Antes de marcharse visita a su madre quien la recibe con los brazos abiertos, Valentina le cuenta toda la verdad incluyendo el encuentro con su padre, su madre desconsolada llora por su hija, al saber el sufrimiento que iba a tener jamás la hubiera dejado que salga de casa, sus hermanos se alegran de saber que su padre aún está vivo y que no fue culpa de él, por lo que piden verlo y así fue, después de una larga charla la familia Aristisabal Muller vuelven a estar juntos después de 20 años, con la diferencia que su padre tiene una nueva vida y un nuevo hogar.

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