Capitulo 7: Un paso a la vez

— Reunión entre Kasir y Cristal —

—¿Que acabas de decir Cristal?

-Oh, eso, parece que no me oíste —le hice una seña a Emily y está colocó los libros frente a Kasir— ponte de mi lado para acabar con la Duquesa Riqueta

—¿Con nuestra madrastra?

-Querrás decir, la mujer que asesinó a nuestra madre

—¿Que asesinó?. Madre murió de causas naturales

-¿Y su recuerdo también murió de esa forma? —Negué con la cabeza— ¿No tienes curiosidad?

—¿De por qué hay tantos libros en mi habitación? ¿O de por qué mi pequeña hermana actúa de manera diferente?

-Bueno, eso tiene respuesta —Levante un dedo por cada afirmación que daba— Porque me cansé de ser maltratada, de que me roben, me ignoren, y maltraten a mi familia y el recuerdo de mi madre

—Siempre dejaste que eso sucediera, ¿Por qué te molestas ahora?

-Ouh, entonces afirmas que lo sabías —Ladee la cabeza y la recosté a mi mano, se mostró una pequeña sonrisa en mi rostro mientras miraba la reacción tan simple y casi imperceptible de mi contrario— y simplemente decidiste ignorarlo y dejarlo pasar —suspire fingiendo una muestra de desinterés— sabía que mantenías tus emociones ocultas y que eras bastante neutral, sin embargo, no sabía que podías ser igual de mezquino

—Cuida tus palabras hermanita, tu eres la única a la que aún le hablo

-Oh, que conmovedor, ¿Debería llorar de alegría? —Solté una risita burlona, lo cual pareció molestarle— en cualquier caso, los dos tenemos un mismo objetivo, y espero que podamos trabajar juntos en ello, si no es como hermanos, entonces que sea como aliados —Le extendí una mano con ansias de hacer un trato— ¿Que me dices?

—Umm, eso depende

-La oferta es buena —Con la mano libre arrastre los cuadernos hacia su posición— ¿Quieres impartir tus condiciones?

—Si, eso quiero

Moví la mano que tenía extendida en el aire hacia un lado, haciendo un gesto a que continuara

-Adelante, te escucho

—Quiero la sucesión del ducado

«El gato está fuera de la jaula» —Susurre, aunque al ver su seriedad simplemente agite la mano delicadamente en el aire— No me importa, quédatelo, sin embargo —Esta vez tome mi diario y lo levanté para colocarlo frente a mis labios— cuando llegue el momento, tendrás que ser tan fiel a la causa como lo es padre al imperio, ya que haré el trabajo sucio por ti, es lo menos que puedes hacer

El se mantuvo serio por unos minutos, parecía analizar mis gestos y mis palabras, claramente la verdadera Cristal, la villana de esta historia, y la verdadera dueña de este cuerpo jamás habría actuado de esta manera, jamás se hubiera acercando primero a su hermano, o tomaría venganza por su maltrato, se hubiera quedado en un rincón de una vieja habitación de castigo en el calabozo subterráneo del ducado, hasta que llegara el momento de enloquecer y morir, pero como yo no soy Cristal...

-Estoy esperando... Hermanito, no tengo todo el día

Yo jamás me quedaré en ese papel tan mediocre, en este momento, en este lugar, ya mismo comienza mi nueva vida como Cristal... Y en esta historia... Será la villana quien gana al final.

—¿Y si me niego?

-Entonces lanzaré los trapos sucios del sucesor de la familia Lawnig, junto con el de su madrastra y hermanos

—¿¡Me estas amenazando!?

Me hice de hombros con una risita —Oh no, no te amenazo, solo estoy colocando... los puntos sobre las ies— ladie la cabeza mientras despegaba el diario de mis labios para que viera mi pequeña e inocente sonrisa— Eres listo, sabrás que es lo mejor para ti— coloque un dedo sobre mis labios, mientras ahora llevaba mi preciado diario a mi regazo— ¿Cómo crees que responderán los nobles y quedará tu estatus al saber que eres cómplice de abuso físico y daño psicológico a una menor?— El no dijo nada, pero con su mirada, bastaba para asesinarme, una sensación muy satisfactoria la verdad— Claramente, no queremos llegar tan lejos, tu tendrás el ducado, yo mi libertad, y ambos tendremos la venganza de mamá, si no pactamos una alianza de hermanos, pactemos una de negocios

—Ummm...

Si, sin duda alguna, en esta nueva vida que me han otorgado... vengare a la verdadera dueña de este cuerpo

-Tomalo o déjalo, no tienes tiempo para pensarlo, sino lo tomas, veremos quién gana primero —extendí mi mano hacia el— 1... 2...

—Te has vuelto osada —correspondió el apretón de manos, a lo que sonreí—

-He impredecible —Despues de darle un apretón de manos y soltarle me recosté al asiento tranquilamente— entonces, ¿Qué tal si empezamos por el robo de la duquesa al ducado y a mi?

—Bien, cuéntame lo que sabes

-Entonces, como verás, en estos libros...

(***)

— En la cena de esa noche —

Los sirvientes ponían la mesa y servían la cena, el ambiente estaba tenso, se podía cortar el aire con un cuchillo, luego de servir los alimentos, la servidumbre se posicionó en el lado derecho del salón, esperando, pero no fue hasta que comenzaron a comer que sentí la incomodidad de ese momento.

—Es un honor para nosotros tener aquí a un miembro distinguido del emperador. —Mencionó la Duquesa Riqueta—

–Jo jo, Duquesa, la hospitalidad del ducado es tan agradable como sus palabras —dijo el hombre rechoncho—

En la mesa el duque y Kasir comían en silencio, Eleonoro parecía perdido, absorto en sus pensamientos, y Vanessa estaba atenta a la conversación de su madre con el enviado directo del emperador, sin embargo, prestaba poca atención a nuestro invitado del norte, el cual permanecía callado.

—El emperador debe ser una persona muy ocupada para no haber venido directamente, y enviar a alguien más en su lugar. —La Duquesa continuaba con su "cordial" coqueteo hacia el enviado del emperador—

–Eso es correcto Duquesa, pidió que le disculparan, pero no tenía tiempo para solicitar una audiencia adecuadamente, pero pronto se celebrará un baile en el palacio imperial, y me ha pedido que invite a la familia del duque

—Eso sería maravilloso, mi pequeña Vanessa está por hacer su debut en el mundo social, sería increíble si pudiera hacer algunas amigas que le apoyen

—Cristal también está por hacer su debut —interfirió Kasir, pero antes de que pudiera hacer cualquier cosa la Duquesa, el duque habló—

—Oh cierto, Cristal aún no has hecho tú debut. ¿Por qué?

Sentí las miradas cargadas de diferentes sentimientos, una discreta mirada por el enviado del norte, curiosidad por Eleonoro, mi padre y Kasir, y burla por la Duquesa y Vanessa, aquella pregunta maliciosa solo tenia un objetivo, hacerme sentir mal.

—Sonrei levemente mientras limpiaba mi boca con una servilleta— Eso es porque... —Levanté la mirada hacia los ojos del duque, sentí que su aura frívola comenzaba a quebrarse— deseo mucho que mi padre este presente el día de mi debut

Sonreí de manera tierna, agradecía en mi vida anterior haber estado en el club de actuación durante 5 años, eso facilitaba mis acciones aquí, y por la personalidad del duque, el adoraba la ternura de su pequeña hija Cristal, la cuál se había perdido con el paso de los años, ¿Pero por qué repetir los errores de una historia, en vez de aprovecharse de ellos?.

—Oh mi... Mi pequeña hija, ya ha crecido tanto, siento que pronto dejaras el nido y dejaras a este viejo padre completamente solo —lloroso—

-Mi querido padre —tomé sus manos suavemente , se me hacía tan extraño llamar padre a alguien que apenas ayer era solo el personaje de una novela que leí, y tener así tan vívido frente a mi... Era un sentimiento extraño— por favor, no diga eso, padre siempre estará en mi corazón

Y lo próximo que sentí fue el sonido de algo quebrandose, un dolor punzante se quedó sobre mi cabeza, comenzaba a notar un extraño calor sobre aquella zona adolorida y el extraño olor metálico que se filtraba en el aire. Un grito pequeño, o que comenzaba a parecer lejano fue lo último que sentí, un par de veces alteradas, y otras un tanto burlonas, hasta ver caer frente a la visión semi nublada un extraño líquido rojo, que por el olor a hierro, solo podía ser sangre.

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