MUCHAS ROSAS

AMÉRICO: << Este viejo tiene casi 60 años, y 40 a servicio de los del Castillo no soy ningún tonto y la vida no ha pasado por mi en vano

Mi niña aunque no lo quiera admitir se está ilusionando y no se que pensar al respecto, Diego Montenegro me parece un gran hombre pero me preocupa pensar en lo que pasará cuando acabemos finalmente con los Rivasplata, después de todo el hombre que lo engendro es el peor enemigo de mi Luisa, mi pobre niña que tanto ha sufrido, recuerdo todas las noches que despertaba sudaba, con miedo a esas pesadillas que la atormentan, Luis fue más que un amigo, un hermano para mí y su desgracia empezó desde el día en que la ambiciosa de Aurora llegó a su vida >>

Mi Dios, si me dejaste ayudar a mi niña dame por favor sabiduría para seguir haciéndolo, déjame guiarla correctamente porque ella ya ha sufrido demasiado

Luisa está sumamente cansada, cansada, confundida y feliz, una sonrisa inexplicable se refleja en su rostro al dejarse caer en la cama con el saco de Diego, su olor la embriaga y le gusta, toca sus labios y recuerda sus besos dulces, agradables y apasionados, la forma en que sus cuerpos se juntaron para bailar y un deseo incesante que la hace cuestionarse cruelmente sus errores del pasado

AMÉRICO: Mi niña que pasó? tenías una sonrisa hermosa hace segundos y ahora mira la carita que traes

LUISA: Me estás espiando viejito?

AMÉRICO: Solo te cuido como siempre, a ver pequeña amazona que pasó?

LUISA: No he dejado de ser la misma inmadura que solo piensa en satisfacer sus estupideces

AMÉRICO: Que un hombre te guste no quiere decir que sean estupideces, Dios niña porque quieres vivir en ese eterno martirio? Lo que pasó no fue tu culpa

LUISA: Fue mi culpa, yo lo decepcione, yo me case con ese infeliz a escondidas, por Dios ya sabes la historia

Mi padre no hubiese sido resumido a cenizas si yo no hubiese pensado con mi maldito corazón, yo le traje la desgracia

AMÉRICO: La desgracia llegó por la maldad de esos hombres, Antonio siempre odio a tu padre, siempre lo envidio.. hija fuiste un jugador mas en el maldito plan de ese perro desgraciado, no puedes vivir con esa culpa y limitando tu felicidad

LUISA: Porque me dices eso? es por Diego? Por favor a penas lo conozco

AMÉRICO: Y salen juntos, almuerzan juntos, se han besado, te desparaciste con el toda la noche y

LUISA: Y no está bien verdad? no pasó nada de lo que te imaginas te lo aseguro

AMÉRICO: Porque estaría mal que te guste un hombre que te trata bien, que te respeta y que te apoya? mi niña recibimos el amor que creemos merecer, recibiste de Sandro un "amor" insano, cruel y egoísta, comprendo que si viene un Diego con su soltura y su caballerosidad te puedas sentir intimidada pero es más normal de lo que te imaginas

No uses a Diego para atacar a Antonio, solo disfruta lo que la vida te ha puesto en el camino, ese hombre va pagar por lo que hizo claro que lo hará, pero no te hundas con ellos, eres joven y hermosa vive y descansa si

AMÉRICO: Te quiero mucho mi viejito

*Después de una importante conversación, Luisa descansa con el saco de Diego a su lado, soñando está vez con la hacienda donde ocurrió su desgracia, pero ahora no hay fuego, ni dolor, ni amargura si no un bello paisaje donde ve en una mesa a su padre sentado y sonriendo estirando sus brazos hacia ella

Ella los mira desde lejos, sabe que es un sueño pero le encantaría que fuera realidad, está vez no hay miedo al despertar solo una enorme felicidad ya que hace años no soñaba con su padre en la mejor etapa de su vida

El despertar es diferente, al parecer estaba muy cansada y ya amaneció muere de hambre, de tranquilidad y siente una armonía que hace mucho no experimentaba, pero eso no es todo un aroma a rosas y frescura llega a su olfato, sale de su habitación y se da con una enorme sorpresa*

LUISA: Alguien me podría explicar que está pasando aquí?

AMÉRICO: No lo sé tal vez deberías tomar este arreglo, te dejaron una nota princesa

✉️ Me dijiste que te gustaban las rosas, gracias por confiarme que las platanbas tu misma junto a tu padre, que tengas un excelente despertar socia, sigue el camino que aún hay más

Firma: Diego Montenegro

LUIS: Dios, está loco jaja

AMÉRICO: Y eso que no has visto lo demás, Ven aquí jaja, el tipo está realmente loco

LUISA: De que hablas? cómo que los demás

Luisa camina con Américo quien la guía sonriente y ella va quedando maravillada al ver cómo está su casa, las rosas están por todos lados y unas lágrimas y emoción la invaden, nunca ningún hombre había sido tan detallista con ella y eso es algo que solo la emociona en sobremanera

AMÉRICO: Mi niña pues que le hiciste a ese hombre, estás planeando conquistarlo para vengarte verdad?

LUISA: Dios no lo puedo creer, como puede ser tan hermoso? cómo hizo todo esto?

No viejito, no.. si en algún momento pensé usar a Diego para mí venganza, eso quedo atrás, voy a destruir a los Rivasplata pero como el dice, el es un Montenegro y me encanta

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