Hombre protector.

Vamos quédate - insiste jalándome por la cintura pegándome a su cuerpo, de un momento a otro la mirada joven y esa sonrisa encantadora cambia de un momento a otro.

Me quedo paralizada cuando se aproximó a mi rostro con toda intención de darme un beso mientras yo sabiendo que esto no es lo deseo actuó rápido, cuando ante mi vista todo pasa en cámara lenta, lo detengo colocando mi mano en medio de su rostro para luego retroceder y alejarme de su cuerpo.

- No es lo que deseo - le advierto molesta por la actitud descarada que el joven se atreve a tener.

Me sonríe de una manera poco agradable- Lo deseas tanto como yo, la pasaremos muy bien juntos -asegura el joven con mucha confianza acercándose esta vez más rápido como si nos conociéramos de siempre.

Lo seguía alejando tanto como puedo pero cada que lo tenía cerca se aferra más a mi cuerpo, intento ser educada pero me es imposible tal parece que por las buenas no entiende y yo me encontró enfadada.

Me sentí diferente y supe que algo no estaba bien cuando empecé a temblar y sentí un fuerte calor recorrer por cada parte y extremidad de mi cuerpo, molesta y muy alterada solo me faltaba golpearlo para qué se termine de alejar.

En ese momento que mi vista se nubla por breves segundos, sentí un jalón por mi espalda el cual me aleja completamente del atrevido joven, todo paso tan rápido que solo pude ver su espalda como una sombra en medio del joven y mi cuerpo.

No entendía lo que pasaba frente a mis ojos pero le preste más atención a mi cuerpo que comenzaba a temblar de una manera extraña y todo en mi se siente diferente.

En cuando pude vuelvo a visualizar la sombra entre nosotros compruebo que se trata de otro hombre, me esforcé para ver mejor, ya que el lugar es oscuro y mi vista está algo extraña.

El sujeto volteo y me miro con una intensa y profundo mirar que reflejaba una mezcla de sentimientos los cuales no logro descubrir.

Mis labios se entre abren cuando reconozco que el hombre era Rodrigo, él mismo en una fracción de segundo recorre todo mi cuerpo con rápida y confusa mirada.

Para luego voltear de nuevo hacia el joven John, Rodrigo empezó a discutir y gritar algunas palabras las cuales no entendí bien por qué la música sonaba muy alto y sentía un zumbido en mis oídos, además de aturdida por lo que recién estaba sucediendo y sintiendo que mi corazón late de una manera sumamente acelerada.

Seguía temblando y totalmente paralizada mis piernas se negaban a moverse, observo mis manos porque sentí que dolían con la misma intensidad en que ardían, como si de la nada me quemaran la piel.

Cuando me fijo bien me asusté por lo que mis ojos presencian, poco a poco mis uñas se empezaron a colocar más gruesas y al mismo tiempo largas, apareciendo en mis delgadas manos unas desconocidas y horrorosas garras.

No tardó mucho cuando Rodrigo se gira de nuevo hacia mi con una molesta expresión me toma fuerte por el brazo me jala casi que arrastrándome hacia la salida del local, mi cuerpo se mueve pero mi mente se encontraba bloqueada.

- Jade cálmate aquí no por favor - susurra cuando lo noto cerca de mi; la voz de Rodrigo era diferente estaba siendo amable asta suplicante podía escuchar su voz, su respiración mezclada con ese fuerte aroma que desprende su piel.

-No me siento bien me quema la piel mi cuerpo se siente diferente no sé cómo explicarlo pero ayúdame- apenas pude decir cuando me soltó el brazo de golpe.

Observo a los lados y apenas me doy cuenta que estábamos en un callejón oscuro, al parecer detrás del café bar.

-Lo sé pero no es el lugar adecuado solo respira y cálmate - insistía pero yo no entendí nada, ¿exactamente que quería que hiciera? ¿A que se refiere?, Rodrigo dio unos pasos atrás y su cara reflejaba más preocupación.

A tan pocos minutos mi cuerpo está más caliente me quejaba desde adentro hacia afuera sintiendo que mi corazón se agitaba como si le inyectaran adrenalina, un vapor sofocante cubría todo mi cuerpo y mis fosas nasales.

La piel ardía como si me quemaran en carne viva, mis pies comenzaron a quedar apretados es los zapatos, observo como los mismos se rompían haciendo un huevo por el frente dejando salir unos dedos verdes y escamosos, sentía cada parte de mis huesos y articulaciones doliendo con tal intensidad como si me fuera a romper en pedazos, mi pantalón comenzó a abrirse por varias partes dejándolo echo pedazos por las aberturas que había se podía notar una extraña piel verde y áspera cuarteada como si fueran muchas pequeñas escamas.

- Que me está pasando, ¿que me sucede? - suplique saber con lágrimas en mis ojos y dejándome caer de rodillas al piso.

-Lo siento, estaré aquí contigo - Dice Rodrigo con mucho dolor en su voz y preocupación en su mirada.

Llorando no pudiendo más con el dolor que sentía cuando se vuelve agonizante, tanto así que temía que muriera en ese momento, la incomodidad y el dolor era tanta que me quite la chaqueta negra de cuero cuando comenzó apretar y sofocar.

Note como de a poco también mis brazos y todo lo que quedaba de mi cuerpo se cubría de esa piel con extrañas escamas color verde intenso, sustituyendo cada espacio de mi cuerpo, mis ojos me ardía, mi mirada cambia y una sombra oscura se apoderó de mi vista.