Capítulo 16

Dymitri

-Jajajajajajaja -no entendí que le hacía tanta gracia a Josh- hermano, le contrataste por dos años; ten en cuenta de que ella es una excelente abogada y cuenta con el apoyo de los Mozorov, además Park me hizo añadir una exigencia para su asociación y resulta que es el hecho de que la asociación se mantendrá siempre y cuando la señorita Robin se mantenga en la empresa

-¡Maldición!

-¿Que te molesta tanto? Ella no es tu tipo

-Solo dejémoslo así

Salí de allí y justo la cruce al mirarme un intenso rubor se extendió en sus mejillas, odiaba eso

-Resume y archiva toda la información de la empresa Robin, y espero eso en mi escritorio en dos horas -claro que quería presionarla y que renunciara era demasiada información para tan poco tiempo- antecedentes y separa a aquellos que sean de peligro para mi o para el CEO mayor, Hades.

Robin

Estaba terminando el trabajo para el señor Dubois con casi una hora de ventaja, no era tan complicado lo que me había pedido, quizá me hubiera desempeñado mejor si no tuviera en mis brazos a una pequeña niña que dejaron tirada en la sala de juntas; quien quiera que hubiera sido tendría que ser una persona horrible, la bebé carcajeaba a mi lado y gracias a los analgésicos podía sostenerla en brazos juraría que ese angelito no tendría más de seis meses. La cargue por que claramente no pensaba dejarla sola, y fui hasta la oficina de mi jefe cuando la secretaria, una señora gordita muy guapa y amable me vio palideció

-Niña ¿Donde encontraste esa bebe?

-Ehhh en la sala de juntas. La dejaron sola y lloraba a todo pulmón

-Que horrible, el jefe estaba ocupado. Pero no importa entra y si pregunta por la bebe dile exactamente lo que me dijiste a mi

Me pareció bastante extraño pero no le di mayor importancia a lo sucedido, entre a la oficina y vi a una mujer deslizando su vestido por su cuerpo, ella era despampanante y me daba un aire familiar; pero al contrario de lo que sentía al ver a Victoria ahora no me sentía inferior a esa mujer

-¿Que haces aquí? -hasta su timbre de voz era similar al de Victoria- y ¿Que haces con la bebe?

-Robin ¿Que haces con la bebe y por qué me interrumpiste?

-Ya terminé con lo que me pediste Dmytri, y esta hermosa bebe la encontré tirada en la sala de juntas ¿Como pueden haber unos padres tan desnaturalizados?

-Eso no es verdad yo se la deje a tu secretaria

-¿Tu eres la madre de esta bebe? - pregunté incrédula de lo que escuchaba, como podía ser capaz de dejarla tirada solo por acostarse con su jefe- pues la secretaria no se ha movido de donde está y la bebé estaba llorando a todo pulmón en la sala de juntas

-Sal ahora mismo Valentina, luego trataré contigo

Valentina se acercó a la bebé y aunque dejó de reírse apenas entró a la oficina ahora comenzó a llorar a todo pulmón

-Valentina fuera

Solté las carpetas en el escritorio y me senté en el sofá de la oficina mientras calmaba a la bebé, ella segundos después comenzó a reírse como si no hubiera mañana

-Robin ¿Eres madre, estás casada, tienes novio?

-Ehhh no a todo -esta mañana había tenido una pequeña mancha de sangre en mi ropa interior y aunque estaba segura de que no era nada grave prefería aún mantener mi embarazo en secreto- ¿Por qué?

-Te aumentarse un 50% el sueldo y cuidaras a mi hija.

-¿Que? Esta bebe es tu hija!!!! ¿Por qué la dejaste sola? De verdad lloraba muchísimo

-Valentina debía cuidarla, pero en fin; si aceptas vivirás en mi casa cuidando a mi hija cuando puedas de lo demás lo hará la nana, no estaremos solos si eso te preocupa Josh y Alexi también viven allí

-¿Esa mujer también?

-No, ¿Te preocupa más esa mujer que vivir con tres hombres?

-Se que no soy su tipo, ni la de ninguno de sus amigos. Pero no acepto

-Que lamentable, mi hija deberá seguir en manos de Valentina

Siguió diciendo sin número de cosas así que no lograba soportar a tan bello angelito en manos de semejante bruja, terminé aceptando y ellos enseguida me llevaron por mi ropa; afortunadamente no había desempacado nada y todo fue bastante rápido, llegamos a la mansión lúgubre y triste, estaba muy entretenida jugando con la pequeña Zoe y Dmytri no había pronunciado palabra alguna

Al bajar había una caja tirada al lado de la entrada se veía bastante curiosa, al acercarme vi a tres cachorros tan negros como un carboncillo

-¿Que miras?

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