capítulo 14- especial

Jasha tenía las mejillas levemente rojas, mientras que Clhóe lo miraba fijamente con total calma y seriedad después de lo que dijo, ella parecía tan segura de lo que decía.

- no, no voy a tomar algo importante para usted solo por una noche. Ese momento debe ser especial.

- usted habla de que debe ser con una persona que yo quiera ¿cierto? O que sea con quien yo me case.

- si, así debe ser...

- dígame una cosa ¿las mujeres con quienes ha estado, han sido especiales para usted?

- no, pero ellas...esas no fueron sus primeras veces...

- eso quiere decir que ellas tuvieron ese momento especial con otro y aún así no están con esa persona. Aunque sea con la persona especial no siempre se quedan juntos.

- el punto es que no haría algo así con usted...es alguien cercana, no quiero ser quien arruine ese momento que debe ser con alguien a quien usted ame.

- al amor no me interesa...no siempre funciona.

- pero a veces sí...tal vez haya alguien que la ama incondicionalmente.

- pero si yo no amo a esa persona de nada sirve. En fin, pase buenas noches.

Clhóe le jala de su ropa para que se incline uniendo sus labios en un beso, uno profundo y duradero, Jasha se sorprendió pero se dejo llevar correspondiendo al saborear los labios de la chica.

Clhóe se separa y se retira ya de ahí, para dirigirse a su habitación, Jasha no supo más que decir, la chica actua como si nada importará, supone que es por el ambiente en el que ha crecido; dejo salir un largo suspiro y al llegar a su habitación se tiro en su cama.

- que chica más problemática...Jasha tonto, debiste aceptar...no, no, no puedes hacerle algo así...

Ahora estará entre arrepentirse por no haber aprovechado la oportunidad y sentirse orgulloso porque no se aprovecho de esa oportunidad. A la mañana siguiente desde muy temprano, Clhóe hizo que todos salieran a correr alrededor de la mansión, ella iba delante de todos, les sorprendía la fortaleza que tenía esa chica, Jasha es un buen guerrero, pero después de tres vueltas ya se siente cansado, aunque Clhóe les explico que es para fortalecer su resistencia, durante el combate estarán de un lado para otro luchando y deben soportar todo ese movimiento sin cansarse muy rápido. Elisa por su parte solo observa desde el balcón del segundo piso, al parecer Clhóe si se gano el respeto de esos hombres demostrando su fuerza, esa chica es todo lo contrario a lo que ella es y eso la hace sentirse celosa.

- no debí aceptar esta misión...

Se quejo y mejor se fue a sentar en el sofá pidiendo que le sirvan un té caliente. Horas después, todos estaban agotados, Clhóe los hizo correr más e incluso los hizo ir hasta el bosque y volver esquivando los árboles.

- bien, por hoy es todo, pueden irse, excepto tú, tenemos que practicar con tu arma.

Señala a Jasha, quien se pone algo nervioso al recordar el beso, aunque Clhóe se veía normal, como si nada hubiese pasado. Jasha trajo su lanza, mientras que Clhóe sostiene una espada, dando inicio a un combate, Jasha ya se movía un poco mejor, pero aún tenía desventaja, pues Clhóe era rápida, incluso con la espada le era fácil desviar los ataques de Jasha. Ambos continúan hasta que Jasha siente que ya no puede moverse con la lanza.

- me sorprende lo resistente que es...

- el gran Duque me dio el mismo entrenamiento que a Raizel y no por ser niños era gentil con nosotros.

- ahora veo porque es tan fuerte el joven gran Duque...

- y a la gran Duquesa le encanta eso...debiste saberlo, le gustan los hombres rudos...

- deje de molestar con eso, a la señorita Noelle ya la supere.

- entonces le contaré algo...la gran Duquesa llama gatito a Raizel...

- ¿eh? ¿Hablas en serio?

- si, Raizel ante ella parece un minino bien mimado.

Jasha no puede evitar reír, Raizel luce rudo que es difícil de imaginar que es muy dócil con Noelle.

- la gran Duquesa es sorprendente, domo a ese mujeriego.

- lo es, la conocí de niña, ella iba a practicar con los guardias del palacio. Su manera de ser me cautivo.

- simplemente ella no era para ti. Cuando seas emperador, conocerás distintas chicas y entre ellas estará la correcta.

- o quizás no y a la especial ya la conozco.

- eso también puede ser. ¡Oh! Es por eso que rechazo mi propuesta ¿cierto?

- no, no fue por eso...

Bien, anotará mentalmente, Clhóe no capta fácilmente una indirecta. En los siguientes días los hombres que se fueron reclutando, iban llegando, gente común que quería arriesgarse para liberar a su país, pues cada uno de ellos sufre por los malos manejos del emperador, pues lejos de ayudarlos, por el contrario, aumenta los impuestos con la excusa de que servirá para mejorar los servicios y al final nunca reciben nada, por supuesto que se sorprenden de que fuese una chica quien los entrenará, pero quienes querían protestar, pronto no tuvieron tiempo, porque Clhóe les coloco rutinas para mejorar su resistencia, aprender a moverse rápido y por supuesto fuerza, durante el transcurso de la semana uno que otro se rindieron, lo que estaba bien, pues no están acostumbrados a esa clase de entrenamiento y tampoco han estado en una batalla. Ese día al haber salido a correr, de pronto se sintió una gran ventisca ante ellos, se escucho un aleteo y un gruñido venir desde arriba hasta que una cortina de nieve los golpeo, cuando todo se disipa, se asustaron de ver a un dragon ante ellos, pero sobre este, venía un hombre vestido de armadura, piel morena y un físico atractivo.

- ey! Clhóe...

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