capítulo 10- compañía

Jasha aún no podía creer que tenía en sus manos un arma sagrada; apenas llegaron a una posada, Jasha dejo la caja sobre la cama y se apresuró para abrirla, quedo sorprendido de ver una gran lanza dentro, ahora comprende porque la caja era larga.

- vaya, esa es una buena arma.

- lo es, aunque nunca antes use una lanza, estoy acostumbrado a usar la espada.

- entonces dedícate a entrenar, aún nos queda tiempo para la batalla, recuerda que primero hay que tener un entrenamiento, no todo será de inmediato.

Aunque eso quisiera, no se puede arriesgar a llevar a sus aliados a una batalla que no podrán ganar teniendo gente que nunca ha peleado. Jasha guarda el arma, se hace tarde, así que deben dormir, su viaje aún continúa, se desviaron y deben retomar su camino a la frontera. A la mañana siguiente, cuando ambos salen, había una chica, cabello castaño claro ojos verdes, su vestimenta era un traje negro, con falda hasta las rodillas y botas altas, al verlos se acerca a ellos.

- me llamo Elisa Haim, soy una doncella del templo, su señoría me envió para ayudarlos.

- mucho gusto, soy Clhóe, realmente no era necesario, si se vuelve muy peligroso, tendrás que volver, no quiero que el templo se vea involucrado.

- ya estamos involucrados señorita, el emperador del Norte daño a varios de nuestros usuarios sagrados, aunque espero que nadie sepa que soy del templo.

- no diré nada, aunque...supongo que si me niego igual nos seguirás.

- así es, vivo para servirle a su señoría, cumpliré con mi misión como sea.

- eso me gusta, tienes determinación, no como ciertos hombres.

Clhóe mira a Jasha y este frunce el ceño, tal parece que aún no le perdona haber roto el trato antes.

- ¿cuantos años tienes? Una niña no debería arriesgarse.

Jasha se acerco, pues aunque la chica era alta, su apariencia era la de una chica muy joven, quizás tenía 15 años cuando mucho.

- alteza, mis saludos. Quizás no lo parezca, pero tengo veinte.

- ¡oh! Ya veo...me disculpo.

- no se preocupe, entiendo que haya ese tipo de confusión.

Elisa sonríe pero Clhóe puede notar que su manera de mirar a Jasha es muy obvia, aunque es absurdo gustar de alguien con solo verlo una vez. Clhóe sube a su caballo, al igual que Jasha, Elisa, ella iba en un carruaje, que ella misma guiaba, mientras avanzan le explica que el carruaje solo lleva dentro provisiones y mantas, si en algún momento llegan a un sitió donde no haya posada al menos podrán dormir dentro del carruaje o poner unas tiendas para dormir. Al detenerse a comer, Elisa se sentó cerca de Jasha, para poder hablar un poco con él.

- supe que recién recibió su arma sagrada.

- si, aunque tendré que practicar mucho con ella. No suelo usar una lanza.

- si puede usar una espada podrá con una lanza. Con gusto sería su compañera de practica.

- se lo agradezco pero no quiero que salga herida, podría haber un accidente.

- estaré bien, de hecho yo tengo un arma sagrada y es una lanza.

- ¿de verdad? Entonces me vienen bien unos consejos suyos...

Jasha seguía hablando con Elisa, pero puede ver como Clhóe se aleja de su pequeño campamento, al ser de día, la ve perderse entre los árboles, fueron algunos minutos cuando la ve volver.

- se acabo el descanso, debemos llegar al siguiente pueblo antes del anochecer. Lo mejor con este clima es no pasar la noche fuera.

Ambos se apresuran a recoger todo, pues saben que Clhóe tiene razón, aunque estén alejado de la frontera, el frío se siente durante las noches y una tienda no será suficiente. Esa misma noche, cuando se detuvieron en una posada, Elisa salió con Jasha al patio trasero para enseñar como manejar una lanza, aunque para empezar iniciaron usando unos bastones de manera, para que Jasha se acostumbre a que este es mucho más largo que una espada y que debe coordinar bien las manos, Clhóe por su parte salió a un bar a reunirse con una persona que lleva una capucha, este le entrega una carta y se retira de inmediato, Clhóe regresa, pasando por el patio, Elisa y Jasha se habían sentado a descansar, ambos platican muy a gusto, tal parece que se han llevado bien, quizás al final de la rebelión el chico ya tenga una futura emperatriz, al menos así tendrá muy buena relación con el templo; ella solo se fue a la habitación a descansar, esta vez pidieron dos, una donde ella dormiría en compañía de Elisa y Jasha estaría solo.

----------Nota-------

una disculpa por no haber subido capítulo ayer, pero estaba algo ocupada con trabajo. así que si nada lo impide, puede que el sábado haya un mini maratón y trataré de actualizar también capítulo de Rafael. lindo viernes 💕

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