Toda la semana ha sido muy dura para mí en la empresa, hacer todo el trabajo no es nada fácil, hasta tengo que quedarme después de que el presidente sale para tener todo ordenado, y lo peor es que he ido a recursos humanos para saber si ya contrataron a alguien y aún no hay ningún candidato para ese puesto.
Espero y se postule alguien rápido, pero de igual manera le pregunto que si no hay alguien que esté dispuesto a cubrir el puesto de asistente temporal, a lo que recibo como un no de respuesta.
Regreso a mi escritorio, toda desesperada porque alguien me ayude, cuando se abren las puertas del elevador, y sale de este el par de hombres guapos, que traen locas a todas las mujeres de la empresa con excepción de mi claro esta, los hermanos Maxwell, Marcus ya lo conocemos pero a Mario es la primera vez que lo veo, pero he escuchado su nombre hasta foto me han enseñado, y puedo decir que es más guapo en persona. Así que me reincorporó para que no noten mi estrés y hago como que trabajo aunque la verdad ni sé que estoy haciendo.
Buenas tardes- habla el Señor Mario- se encuentra mi pa...(no termina de decir la palabra cuando la cambia) el presidente, ¿señorita?
(oh pide mi nombre, por un momento me quedé anonadada por su mirada, guau es muy guapo y tiene una sonrisa hermosa, diablos en que estoy pensando se nota que es menor que yo, pero aun así es muy guapo, salgo de mi imaginación)
Vanessa Marshall- le respondo aún encantada por su bello rostro, pero vuelvo a mi realidad después de sentir un escalofrío recorrer mi cuerpo y siento la mirada penetrante del señor Marcus en mí y contesto- digo mm Buenas tardes, el presidente se encuentra en una junta si gustan pueden esperarlo en su oficina no tarda en llegar- y le señaló la oficina
Enserió, muchas gracias, entonces pasaremos- responde el señor Mario
¿Puedo ofrecerles algo de tomar?
No yo estoy bien- responde Mario- Y mi hermano creo que tampoco, muchas gracias- se apresura a contestar, ya que Marcus no dice ni una sola palabra.
Me retiro de la oficina, aún no puedo pensar lo guapos que soy, aunque sé dé donde sacas tal belleza, por el hecho de que la señora Carmen es muy hermosa también, ya quisiera yo estar tan bella como ella a sus 50 años. Después de que salió de su junta el Señor Antonio estuvo mucho tiempo hablando con sus hijos en la oficina. A lo cual aproveche el tiempo para aligerar la carga de trabajo, y así no tener que trabajar hasta el fin de semana. Ya que sus hijos se retiraron el presidente me llamo a su oficina.
Dígame señor presidente, en que puedo ayudarlo - le digo Cuando entró a la oficina.
Señorita Marshall, quiero darle las gracias por su arduo trabajo, sé que esta semana no ha sido una de las mejores para todos, mucho menos para usted por la carga de trabajo, pero igual quiero agradecerle por no rendirse y seguir trabajando para mí.
Ni que lo diga Señor Antonio- le digo para tranquilizarlo, parece como que creyera que en cualquier momento presentaré mi renuncia.- Gracias a que usted confió en mí cuando más lo necesitaba es que puedo trabajar.
Es una lástima que aún no tengamos ni un candidato para asistente pero mientras eso, pase, quisiera seguí pidiendo su ayuda.
Claro presidente, aquí estaré apoyándolo así que hay que ser exitosos- le digo con una sonrisa alentadora.
¿Gracias, gracias a y una cosa Más no sé si sepa que se acerca el aniversario de la empresa?
oh enserió? - le respondo
Sí, faltan un mes para eso, en 18 de marzo para ser precisos estaremos cumpliendo 30 años desde que junto a mi esposa y amigos fundamos la empresa - me comenta orgulloso
Enserió, como ha pasado los años y ustedes han tenido mucho éxito señor Antonio, ¡FELICIDADES!
Gracias, han sido duros en verdad, pero al final el esfuerzo de todos valió la pena- se queda un rato callado como recordando sus inicios- en fin lo que le quería decir es que todos los años hacemos una pequeña fiesta para celebrarlo y de eso se encargaba mi asistente Erika Cooper, y como en este momento no tengo asistente que se encargue de la celebración, no sé si sería mucho pedir que usted se encargue de eso.
- soy de las personas que no se pueden negar a nada, y mucho menos a mi jefe así que acepto a hacerme cargo de eso, puedo ocuparme de ello por las noches que esté en casa, gracias a Dios el presidente tenía una carpeta con los preparativos de los aniversarios anteriores, y así podía darme una idea más o menos de como prepara yo esta vez la celebración. Por suerte como en dos semanas es el primer cumpleaños de mi hijo le pedí ese día de descanso a lo que él me dijo que no había problema.
Es fin de semana y ya he empezado a realizar los preparativos, la verdad es que no sabia que tenía también varios hoteles a su nombre, y todos son de estrellas michelín, escogí el que tenía su sala de fiestas junto a un patio enorme de áreas verdes, con muchas flores hermosas 💖, aun me falta mucho por con seguir aperitivos, vinos el pastel, la música, la decoración y las invitaciones, pero tengo fe en mi en que lo podré hacer para ese día.
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