CAPITULO 4

Hoy es mi aniversario de bodas, como desde que tuve al bebe no hemos tenido nada de intimidad, osea si ha habido besos y agasajos, pero todo termina cuando el bebé empieza a llorar por hambre, o por que está hecho y pues nunca culminaron lo que empezamos, por ese motivo decidí rentar un cuarto en el hotel más grande y hermoso de Los Ángeles solo para nosotros dos, e ir por él a la oficina de sorpresa para irnos juntos al hotel. Mi bebe lo deje en casa de mis padres por esta noche, también le deje varios biberones llenos de leche para cuando tuviera hambre.

Me alisto me pongo un vestido que compré especialmente para este día, con la esperanza de que le guste a mi esposo.

Llego al bufete en donde trabaja mi esposo, ya es tarde así que las mayorías de las luces de la oficina están apagadas, me voy a acercando a la oficina de mi esposo y me quedo sorprendida por los ruidos que provienen de ahí, aunque yo sé muy bien lo que en verdad pasa en ese lugar, mi corazón no quiere aceptarlo. Después de respirar y calmarme un momento decido a abrir la puerta y veo a su secretaria encima de él sin nada de ropa. Cuando se dan cuenta de que estoy ahí él la aparta en seguida, y trata de cubrirse y explicarme las cosas, pero para mí no hay excusa o explicación alguna que me dé que diga y me convenza de que lo que veo no es lo que estaban haciendo.

¡Mi amor, déjame contarte que lo que vez no es lo que crees!

¿Qué no es lo que creo? Si está más claro que el agua lo que pasa aquí-con un nudo en la garganta-crees que soy tan imbécil como para no saber lo que pasa.

No mi amor, ella me sedujo, yo no quería hacerlo...

Pero lo hiciste, y eso es lo que cuenta, pudiste rechazarla y no caer en su seducción, pero pensaste que no me daría cuenta, y verme aquí te hace pensar que si lo niegas una y otra vez yo que te perdonaré por esta traición. Estás mal. (me doy la media vuelta y me voy)

Cuando salgo de las oficinas trato de contener mi llanto, subo a mi carro y me dirijo al hotel, ya que no quería que mis padres me vieran llorando, ni tampoco quería volver a casa porque sabía que él iría hacia allá. Por suerte no le platiqué sobre la reserva así no sabrá en donde estaré. Llegue al hotel pedí mi llave y me fui al cuarto, tomé todo lo que estaba de licor en él y me di una larga ducha en el jacuzzi, había apagado mi celular y cuando salí del baño lo encendí, me llegaron muchas notificaciones de él, hasta llamadas de mis padres. supuse que este tonto los había visto y le había dicho algo, así que decidí llamarlos para que no se preocupara y que no le dijeran a Lucio en donde me encontraba, después de eso lo volví a apagar y empecé a llorar, llore mucho esa noche hasta no saber cuando me quedé dormida.

A la mañana siguiente desperté con un resaca horrible, así que pedí a servicio a la habitación algo bien picozo de desayunar, para que se me quitara esta resaca. Mientas desayunaba pensaba una y otra vez en que hacer con la situación a la que me enfrentaba, yo amaba mucho a Lucío, pero no podía soportar el hecho de que él me haya sido infiel, y si no fue una vez en la que se metió con ella, si fueron varias veces, aunque hayan sido varias veces no puedo dejar de lado el hecho de que me traicionó, traicionó mi amor, nuestra familia, su promesa de juntos por siempre. En estos momentos estaba muy confundida, no quería perder mi familia, pero la confianza que había entre nosotros se había destruido. Regrese a casa y me lo encontré en la sala en cuanto me vio me hizo un montón de preguntas, a las que yo solo escuché sin decir ninguna palabra hasta que me dijo

¿Estuviste con alguien más no es cierto?

¿Qué me dijiste? ¿Enserió crees que soy como tú? Que traicionaste de la peor manera la confianza, amor y respeto que tuve por ti

Lo siento mi amor, es que como no volviste a casa no supe qué pensar, discúlpame por favor lo que viste a noche no tenías que saberlo ni mucho menos verlo. Te juro que fue la primera vez que tuve relaciones con ella, yo sé que estuvo mal, pero por favor no me dejes.

Ni un lo siento mi amor, ya tú disculpas no me importan, solo quiero tranquilidad y te agradecería mucho que te fueras de aquí, necesito estar sola, y pensar bien las cosas.

Está bien mi amor, solo promete me que no me dejaras si por favor te amo- me da un beso en la frente y se va.

Ya ha pasado una semana después de que descubrí su infidelidad trate de que las cosas volvieran a hacer como antes por amor, pero sentía que algo ya se había roto y era imposible unir. Un día mientras lavaba los platos me llega un mensaje de un número desconocido era de su amante en el texto se adjuntaba una foto en él en donde me decía que Lucio aún le pertenecía y que nunca la iba a dejar y más porque ahora estaba embarazada de él. Me dolió ver a mi esposo en sus brazos desnudo, pero una parte de mí se río a más no poder por como estaba presumiendo de su embarazo, no le conteste al contrario le mande un mensaje a mi hermano, (mi hermano es abogado y uno muy bueno) en donde le pedía de gran favor que me ayudara a tramitar lo más pronto posible el divorcio, me pidió explicaciones y solo le mande la foto que la amante de mi esposo me mandó, con un texto que decía no hay mucho que decir después de la foto. Él accedió a tramitar y agilizar los papeles del divorcio y seguí como si no supiera nada de su aventura.

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