^^^♥︎ [ Candela ]^^^
—Candela significa vela, eres la mujer que iluminará mi imperio, no necesito a una esclava ni a una muñeca, te necesito como mi compañera.
Eso dijo su Majestad, quien al igual que yo poseía unos ojos rojos como la sangre, pero su cabello era brillante como el Sol y el mío era oscuro como el carbón. No tiene sentido pensarlo demasiado, simplemente haré lo que este hombre desee.
Sea esclava, una muñeca o compañera, nada de eso importa realmente, porque de todos modos no podré escapar de esta realidad.
...----------------...
Era la primera vez que subía ha un carruaje real, más bien, era la primera vez que subía ha un carruaje. Imaginé que podrían haberme echo caminar fuera junto a los demás sirvientes, pero aunque intente ver todo lo que podía, en ningún momento vi ha alguien sin su caballo.
Habían 12 caballos para 12 caballeros con armadura, habían otros 4 caballos que se encargaban de llevar el carruaje y él hombre que se encargaba de controlarlos, creo que solo vi un sirviente entre ellos y aún así, aquel sirviente no estaba caminando el largo recorrido hacia el palacio imperial, no, él estaba detrás del carruaje junto con algunas maletas.
Era la primera vez en mis 19 años que no estaba viendo la desgracia ajena, pero aún era es muy temprano para sorprenderme, tal vez su Majestad torturaba a sus esclavos alejados de los ojos ajenos.
—Te ves pensativa.—Su Majestad rompió el silencio entre nosotros y se mantuvo viendo mis ojos por un largo rato, tal vez deseaba que le respondiera, pero no estaba acostumbrada ha entablar un diálogo con otro ser humano.
Pasé mi vida con más ratas y cucarachas que humanos, así que no tengo ni idea de como mantener una conversación apropiada con el Sol del imperio.
—Deberías saber el nombre de tu Emperador, pero sé que has estado cautivada la mayor parte de tu vida, supongo que no debería esperar mucho de ti.—Su Majestad nuevamente habló y mantuvo la mirada en mis ojos.—Me llamo Ekain.
Ekain, tal vez este hombre me muestre el verdadero infierno cuando llegue al palacio imperial, pero no tengo miedo, dejé de tener miedo hace mucho tiempo y cualquier otro sentimiento es ajeno a mí.
Más que una compañera, hubiera preferido que me tratará como una muñeca sin vida que puede utilizar en cualquier momento. No importa mucho, pero no quiero creer en un futuro más brillante que la oscuridad del calabozo de aquel hombre que me vendió al monstruo del imperio.
Creo que últimamente he estado teniendo problemas con mis propios pensamientos, hay que veces que me contradigo entre lo que pienso y en lo que siento, no lo entiendo, en realidad no lo entiendo.
Todo sería más fácil si alguien me dijera que es este dolor en el pecho, si alguien me enseñará ha conocer estos dolores que no me permiten dormir, probablemente no estaría tan confundida. Aunque, nada cambiará aún si entendiera mis propios sentimientos, ¿pero acaso los tengo?, creo recordar que hubo un tiempo en el cual lloré cuando una mujer de avanzada edad me dio un pan tan duro como los huesos que comía de las aves ya muertas. ¿En ese tiempo por que habré derramado esas lágrimas?, no lo recuerdo bien, pero si recuerdo que eran saladas, tan saladas como el agua del mar que una vez bebí por ser tan joven e ignorante.
En ese tiempo no sabía de las consecuencias de haber bebido del agua del mar, aunque ahora creo estar bien y ahora entiendo que no debo beber ni comer cualquier cosa en mal estado o eso podría afectar a mi salud.
Me dije que iba a vivir, voy a vivir tanto como el destino lo desee y cuando sea hora de irme, me iré con una sonrisa, porque sabré que solo en ese momento dejaré todos los dolores de mi cuerpo atrás.
No sé cual es la verdadera felicidad, pero quiero creer que seré feliz cuando este dando mis últimos suspiros en este mundo, para luego simplemente desaparecer o quien sabe, también podría reencarnar en una nueva persona quien si posea unos sentimientos que pueda comprender.
—Candela, ya estamos llegando.—Ekain me trajo devuelta a la realidad y abandoné esos pensamientos para encontrarme con esos ojos rojos, tan rojos como la sangre, tan rojos como el odio que creo conocer.
Ese color de ojos no es común, pero por algun motivo me resulta tan familiar y no hablo de mis ojos, su rojo es mucho más intenso y fuerte que el rojo de mis ojos. Todo en este hombre es mucho más intenso cuando lo intento comparar con alguien más.
—Su Majestad, ¿podría hacerle una pregunta?.—No soy una mujer curiosa y tampoco me importa si responde a mi pregunta o no, pero de todos modos quisiera saberlo, no me ayudará con nada, pero quisiera comprender mi significado aquí.
—Puedes preguntar lo que desees, Candela.
—¿Por qué yo?.—Nadie compraría ha una esclava de 19 años que está en tal mal estado.
He escuchado que soy hermosa, pero estoy prácticamente en los huesos, he escuchado que mi cabello es la envidia de muchas jóvenes, pero puedo contar con una mano las veces que ha sido lavado, el mundo es extraño o tal vez sea yo quién sea la extraña, de todos modos, puedo ver que muchos envidian lo que para otros podría ser una desgracia.
—No entiendo tú pregunta, tienes que ser más clara o no podré responder a lo que deseas.—Su Majestad me dedico una sonrisa de boca cerrada, aquello me sorprendió.
Estoy segura de que a esto se le llama sorpresa, no me esperaba recibir una sonrisa de nadie, al menos no en esta vida. ¿Cómo puede sonreír tan fácilmente?, no lo entiendo, pero si es tan fácil dar una sonrisa, ¿entonces por que no recuerdo haber echo una en estos 19 años de vida?, tal vez sea que no soy normal, soy una extraña o bien podría ser una muñeca en realidad que fue poseída por el alma de una joven que no logra entender los sentimientos ajenos ni mucho menos logra entender sus propias emociones.
♤
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 25 Episodes
Comments
Aralctoon
Va bien la historia
2023-12-09
0
yudith del carmen betancourrt abanes
será que la secuestro pequeña quie seran sus padres
2023-05-01
0
🤗Finita💖💫🇲🇽
Pobre no entiende sus sentimientos pero creo que pronto lo averiguara.
2022-09-04
3