capítulo 10: “una alianza inesperada"

— Vic-Victor...

— León... Déjanos solos— dijo él con voz pesada...— el médico camina hacia él y coloca una mano en el hombro de Víctor, dándole a entender que no fuera tan severo con la joven. León cierra la puerta sin mirar atrás... Él se acerca tomando una silla, la colaca al frente de Pandora y se sienta, ella se fijaba hacia otro lado para no chocar con la de él...— mírame...— demando Víctor fríamente, ella cierra los ojos con gran pesadez y cuando lo abre, lo hace en la dirección de él.

— oye déjame...

— ¿Crees que soy un hombre sin sentimientos para que pienses que te dejaré sola? ¿Que solamente te dejaré a tu suerte?

Hice un gesto con mi voz débilmente— ¿Eh?...

— Pandora quiero que entiendas que también es mi culpa de que estés pasado por ésto, jamás te pedí que te protegieras... No somos niños, tampoco vamos a actuar como unos... Te debo ser sincero, no estoy preparado para ser padre, de hecho, nadie nace para esa labor, sin embargo, se aprende en el camino y yo lo quiero hacer contigo... No pienses que estás sola, ya que el bebé tendrá a su padres a su lado...— soltaba las lágrimas por las palabras que me dejaban sorprendida, el continuaba—... No veamos a este niño como un obstáculo, si no como una unión entre nosotros... Pandora, yo-...— no puede evitar abrazarlo de rodillas sin dejar que terminará, ya que a buen entendedor pocas palabras... El se levanta junto a mí, envolviendo sus brazos alrededor de mi cuerpo, su mano presiona mi cabeza a su pecho...— quiero protegerte de ese hombre, por eso, mantendremos el embarazo en secreto hasta que sea oficial tu divorcio...

— Víctor...— susurré su nombre con sentimientos...

— vamonos, quiero que guardes reposo...

— ¿Me mantendrás cautiva?

— dependiendo de tus locuras...— explicó el con un poco de burla. Luego toca mi vientre — solo quiero que venga sano, y que tú también te cuides...

— que afortunada me siento.

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Erik es un hombre con varios contactos, siendo un abogado de élite, ah sacado a personas de acusaciones graves, personas como la mafia... El entra a una gran residencia estilo oriental... a los minutos después se encuentra hablando con un hombre con ropa japonesa, fumaba su pipa sin compromiso...

— vaya, miré quién tenemos aquí... Erik, el abogado prodigio... ¿A que se le debe el honor de que nos visites?

— la mafia del tigre dorado... Necesito que se encarguen de cierta persona... Tú, como líder de esta asociación, vine a pedírtelo personalmente, Tora.

— ¡Oh!... Veo que no quieres ser legal esta vez, está bien, nosotros te debemos un pequeño favor así que ¿Por qué no devolverlo...?

— se trata de Cruel de Vill...— Tora fumaba su pipa y lo exhala con un aura tenebrosa... Su voz alegre cambia a una seria

—... Creo que tendrás que pedirle a otro Clan que se encargue de eso, aunque todo se negarán a esa petición... Cruel de Vill a hecho tratos con nosotros y tenemos negocios con él. Podemos ser lo que sea, menos traicionar a un compañero...— se levanta con un consejo para Erik —... Es mejor que te olvides de Cruel, nadie se atrevera a tocarle un solo cabello a él... Te devolveré el favor cuando esté a mi alcance— Tora se retiró de la habitación y Erik apretaba su mandíbula con rabia, él tampoco irá a presentar la infidelidad de Pandora, ya que el juez de inmediato le daría el divorcio a ella, y lo menos que el quiere es dejarle el camino libre a ella para que seas feliz, hará lo que seas hasta tomar medidas drásticas para separarlos...

Erik sale de la gran residencia de la mafia del tigre dorado... Caminaba pensativo en la acera de la calle concurrida...

— si lo sé... Pandora se llevó todo el crédito de mi gran idea...— dijo una mujer con tono lloroso, Erik se detiene en seco al escuchar el nombre de su esposa, mira a un lado y ve a la mujer con pequeños rastro de lágrimas... Era Dayana —... La odio... Se hizo pasar por mi compañera para robarme mi idea, me hizo quedar como si yo fuera la tonta en debes de ella... Y-...— Erik se va a su frente intimidandola con su apariencia...— ¿Qui-Quien es usted?— El abogado toma el teléfono y corta la llamada— ¡Oiga!...

— ¿Conoces a Pandora black?— Dayana lo miraba confundida, el vuelve a preguntar afincando su voz — ¡¿La conocés?!

— sí, ella me quito la gran oportunidad de mi vida.

— entoces, tu y yo tenemos un asunto de que hablar, sígueme.

— no lo creo, yo apenas lo conozco y...

— ¿Acaso no deseas vengarte de ella?...— Dayana lo pensó pocos segundos para dar su opinión...

— si quiero...

— bien, no perdamos más tiempo que hay mucho en que discutir...— ambos se van a un café lo más cercano posible... Llegan y toma asiento al fondo del lugar, los dos pidieron un café, antes de entra a la cafetería ellos hablaron un poco —... Así que trabajas al lado de mi esposa...

— trabajaba, pediré la renuncia, pienso irme de la empresa, no soportaré más humillaciones de parte de Pandora.

— no renuciaras— demandó él, con su lengua controladora—... Si quieres vengarte de ella, tendrá que hacerte pasar por su amiga para que me pases información y yo poder idear un plan...— toma su café cerrando sus ojos con relajación

— podría hacerlo...— Dayana mira el rostro angelical de Erik, y le propone algo...— con la condición de seguir encontrándonos seguidamente...

— no tienes derecho a poner condiciones— baja su taza y saca su sonrisa—... Pero haré una excepción...

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Toda la tensión que sentía hace rato se desvaneció cuando Víctor decidió darme su apoyo en mi embarazo, le hizo prometer a León y a Félix que guardara la noticia hasta mi divorcio, por suerte solo tengo 6 semanas de gestación y no se notará por ahora. Llegamos al apartamento con unos dulces que él me compro... Le pedí que se comiera uno junto a mí lado, el accedió gustosamente... Me encantaba verlo así...

— los dulces son para ella y el bebé, papá glotón... Ojalá y te ahogues— expresó Félix sin despegarse de su laptop.

— ¿Celoso de que no te dieron?

hablé con un dulce en la mano— le ofrecí uno a él, pero no quiso...— miré el rostro de Víctor—... Oye, tiene crema en tu labio superior...

— ¿Eh?...— saca su lengua y trata de limpiarse...

— ¿Listo?— preguntó él.

Me reí —... No, aún tienes aquí.— me coloqué a su lado y lo limpié con mi pulgar, el detiene mi mano y dice...

— tu también tiene un poco en tu boca...

— claro que-...— levanta un poco su rostro y me besa con delicadeza... Me separé a centímetros de su cara y le susurré —... Una buena excusa para besarme...

El me pregunta felizmente — ¿Quiere que te de otra excusa para llevarte a la cama?

— no hará falta...— está vez, yo le besé...

Gracias por leer 😁

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— no estoy pintando a la pared ¿Sabían?— explicó Félix que seguía escribiendo en su laptop, la pareja aún seguía beso tras besos y Víctor solo le dedica un gesto a su hermano, sacándole el dedo grosero a su dirección... Félix cierra su herramienta de trabajo y se levanta, su voz estaba irritada— mejor me voy...

ahora sí, gracias por leer 😊

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