capítulo 4: “hay hombres que se merecen el cielo y a otros el infierno"

El abre la puerta de su apartamento, y lo primero que lo recibe es un perro... Este perro es de raza japonesa.

Él se agacha y le acaricia su pelaje suave... Después me invita a pasar. Era inevitable que yo también quisiera tocarlo... Doble mis rodillas y paso mi mano en toda su cabeza... Aaaww, es tan lindo y esponjoso.

— ¿Como se llama?...— pregunté yo, con un poco de emoción.

— hachiko...— me levanté y él me dice—... Sé que ahora estás pasando un proceso traumático... ¿Pero deseas algo de comer?— sale su mayordomo a un lado de la cocina, le saludé con un pequeña sonrisa y le respondí...

— por ahora no, gracias...— ya me comienza a picar los ojos del cansancio y Cruel lo nota...

— Félix te llevará a tu habitación... Sí tienes algún problema, no dudes en decirme...— cuando el me da la espalda para irse a su habitación, yo lo detengo tomando su muñeca... Él gira su cabeza y me mira con seriedad—... ¿Ahora que quieres?

— sé que ya te lo había dicho antes... Pero gracias. De verdad aprecio mucho por haberme rescatado de ese hombre que lamentablemente es mi esposo...— Cruel me mira como si estuviera buscando algo en mis ojos, luego bajan a mis labios, se voltea y se suelta de mi mano...

— mañana hablaremos mejor... Buenas noches— camina hacia su habitación doblando una esquina, el perro le sigue sus pasos y se escucha claramente cuando la puerta se cierra... Mi cabeza me empezaba a doler, me masajeo la frente en modo de respuesta a ese dolor. Las palabras de aquel mayordomo me saca de concentración...

— señora black, entiendo que no pidió nada de comer, ¿Pero le gustaría tomar un té para relajar sus nervios...?— su voz es un alivio en el ambiente pesado, su apariencia es de un hombre serio con lentes y cabellos negros, en pocas palabras, es guapo.

No es que yo sea alguien que estaría con todos los hombres lindos que se cruzan en mi camino ya que eligi a Cruel ante todo, pero no puedo evitar sentirme alagada por un buen trato llamado amabilidad... Acepté moviendo la cabeza. Veo que me hace un gesto para llevarme a una parte y me explica.

— la llevaré primero a su habitación, ahí tomará un baño y hay ropa de su talla. El señor Vill le dejo todo preparado para su estadía.

Suspire y sonreí para mí misma. Me va gustando cómo voy conociendo una parte de Cruel, en su forma de dejarme cómoda en su hogar... Sabía que no me iba a equivocar con él... Félix me lleva a mi cuarto para luego irse a preparar el té. Observo detalladamente el sitio tan elegante y sofisticado... Veo la gran cama y no pude evitar lanzarme a ella, rebotaba de lo suave y esponjosa que es... Luego, el pensamiento de cómo terminar con Erik llega... Él divorcio es una opción que no podrá fallarme, entiendo de qué él sea un gran abogado, pero me ah lastimado en varias ocasiones y tengo el testimonio de Cruel... No hay nada que pueda fallar para que me aprueben de inmediato el divorcio.

Erik tenía una pequeña venda en su cabeza por el golpe que Pandora le dió con la sartén... A la vez que cargaba un teléfono en mano repicando la llamada a cierta persona, esa persona le responde...

— Erik...— hablo un señor con un tono de gusto—... ¿Como te va con mi hija?... Sé que ella es una niña obediente y sumisa... Y que no te dará problema...

— señor Frank... Es todo lo contrario a los buenos pensamiento que tiene de su hija... Pandora me a estado siendo infiel con su jefe, y lo pude comprobar viéndola irse con él en una moto...— se escucha un jadeo de sorpresa de la otra línea, él continúa—... Tenía mis dudas sobre eso y desde hace meses me pareció extraño que fuera ascendida rápidamente a un puesto que no va con la inteligencia de Pandora... Y aparté de eso, antes de su huída, me pegó fuertemente en la cabeza con un utensilios de Ia cocina...

La voz de Frank cambia a una fría.

— iré para allá, me tomara días en llegar pero veré si puedo ir lo más rápido posible. Mi hija está descarriada... Y no podemos romper el linaje que Pandora nos dará en el futuro... No te preocupes, ella no es tan independiente para pedirte el divorcio sin pensar antes de mi. Estaremos en contacto, Erik... — Erik cuelga la llamada.

Frank es igual que Erik en todo los sentidos, es un gran abogado, hombre con refinado gusto y sobretodo un mal nacido. La madre de Pandora vivió el mismo destino que ella, hasta el día que un golpe mortal dado por Frank la mató... Y siendo un abogado con gran inteligencia pudo demostrar su inocencia tapando su crimen con el argumento de que su esposa se había caído de las escaleras de un lugar alto, siendo así un accidente y más a su favor de que no había testimonio... Por eso, la antigua Pandora se acostumbró a esa vida de sumisa ante los maltratos de parte del hombre... Erik deja su teléfono en una pequeña mesa y se sienta en el marco de la ventana de su habitación, mirando la calle solitaria... En su mano llevaba un vaso con licor fuerte, toma un sorbo y declara lo siguiente al vacío de la habitación....

— Pandora... No cantes victoria. No te dejaré que seas feliz con ese hombre...

Mientras tanto, Pandora estaba en piyama y sentada en la orilla de la cama leyendo un libro que se encontró en una mini biblioteca de la habitación... Tocan la puerta y Félix pasa con la taza de té... Ella se sentía feliz por estar en un ambiente menos agresivo ni solitario... Ella forjará un nuevo destino a su manera junto al villano que resultó ser su héroe... Sin embargo, ¿Podrá lograrlo con el obstáculo de su esposo y padre?

Gracias por leer 😁

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