El lobo tenía razón, siempre la tenía. Matthew y Guī Xián eran mejores amigos y los cobardes lo llevaban en la piel.
—¿Cómo que alguien? ¿Un amigo?
—Una cualquiera, de esas que estaba, pero no recuerdo como se llamaba.
“¿Viste?” Pero Matthew estaba más concentrado en calmarse y no golpear a Guī Xián en la cara. “¡Ni siquiera se acuerda del nombre de Johana!”
—Ya veo, seguro se hartó.
—¿Hartarse? ¡Ja! La tonta se enamoró de mí —Guī Xián se burló—. ¿Por qué se iría si la trataba bien? Además, creo que pensó que le pediría matrimonio. ¿Quién se casaría con una prostituta?
“Probablemente tú”
Y de nuevo, el lobo estaba en lo correcto. Pero Matthew tampoco podía casarse con ella. No mientras Johana lo odiaba.
—Y que ella no esté ¿Te preocupa? —preguntó con tal de alejar su furia.
—Sí, aunque no lo consideres.
—¿Por qué?
—¿Quién dejaría de disfrutar a hombres como yo? —dijo galardonando de su belleza.
—No lo sé Cho.
—No me digas a sí.
—No puedo evitarlo.
Matthew mostró una gran sonrisa, Cho era el apodo de una novia que tuvo, su primer amor también, lo dejó por estar de picaflor.
—Me recuerda por qué eres así.
Guī Xián se recargó en el asiento y miró a Matthew.
—¿Por qué está tan molesto? Matthew, desde hace días estás molesto por algo. ¿Qué pasó?
—No pasa nada Guī Xián, solo estoy estresado.
—Te he dicho. —Guī Xián se acercó al escritorio—. Que vayas al burdel a donde voy, cobran caro, pero las mujeres que están ahí son preciosas, hacen lo que sea para que estemos felices.
—No estoy interesado, gracias.
—Como quieras, si algún día te decides te llevaré directo con Francis, ella te dará un pase VIP para disfrutar todo lo que quieras.
Matthew comenzaba a impacientarse. Odiaba que le recordara que él ya se había devorado Johana y después que él, muchos más. Muchos obtuvieron placer gracias a ella.
—Veo que estás ocupado, entonces me retiro.
Guī Xián estaba levantándose de su asiento y tropezó con la silla, cayendo sobre el escritorio del hombre, algunos papeles se regaron frente a él.
—¿Qué demonios…?
Guī Xián masculló. La fotografía de Johana y un documento estaba en una pila de papeles, Matthew trató de ocultarlo, pero no fue fácil, Guī Xián podía ver todo con su ojo de halcón.
—Entonces, ¿no sabes que es ir a un burdel? —dijo sarcásticamente—, ahora entiendo todo.
Guī Xián agarró la hoja y leyó, Matthew lo miraba. No le impidió que leyera el documento.
—Johana Miller… ¿Es quien creo?
—Sí, es la mujer que estabas y que, según tú, estaba enamorada de ti.
—No me confundas Matthew… Esta chica es la del club campestre. ¿No es así?
Matthew no respondió.
—Respóndeme Matthew… espero que no sea lo que estoy pensando.
—Si lo es.
—Eres un enfermo.
—¿Por qué? Ella me dejó.
—¿Y eso qué? Si alguien te bota es porque no quiere nada contigo, solo deberías darte la vuelta y seguir. Ni siquiera hiciste lo que un hombre normal haría y es acostarse con quien se dejara, te guardaste para ella y para ya sabes quien.
Guī Xián siguió hojeando el documento y la firma de Francis le confirmó todo lo que quería saber.
—Si únicamente querías una prostituta personal, pudiste pedir a Minji, ella sabe cómo dar placer.
—¿Qué quieres decir con eso?
—Johana Miller necesita más experiencia.
—No lo creo —Matthew afirmó.
Guī Xián miró con ojos abiertos a Matthew.
—¿Ya la probaste? —Matthew sonrió de lado—. -Eres un enfermo…
—Ya lo dijiste dos veces y te recuerdo que tú también ya estuviste con ella.
—Pero no me la llevé a mi casa y la mantengo cautiva —respondió aun mirando la hoja.
—No la mantengo cautiva —argumentó—, no sale porque no quiere.
—No me vas a decir que no cierras con código de 6 dígitos al salir…
Matthew chasqueó. ¿Por qué tenía que rendirle cuentas a alguien como él?
En efecto, Matthew tenía miedo que ella saliera del departamento y huyera, pero dudaba que lo hiciera. El lugar estaba muy asegurado, existían guardias de seguridad, para salir tenía que pasar por tres filtros y todos tenían códigos. Podría lavar dinero y nadie se enteraría. Por supuesto que avisan a Matthew de cualquier movimiento extraño alrededor del área.
—No puedo creer que estés haciendo esto.
—Guī Xián, cállate.
—No, no me voy a callar. Estás usándola básicamente para el sexo, no sé por qué. Es una especie de psicosis perturbadora. Yo voy al burdel y pruebo diferentes chicas, no me obsesiono con una y sabes por qué, ¿verdad?
Matthew siseó al hombre. Guī Xián gruñó de vuelta. Era increíble que se llevaran tan bien, siendo dos Alfas lobo. Naturalmente, los Alfas se repudiaban entre sí, como un repelente para moscas, porque dos de ellos no podían estar en el mismo sitio sin desear matarse. Normalmente, los Alfas siempre estaban con un Beta o con su Omega, pero por alguna razón, nadie quería a estos dos.
—Tu lobo te dice lo mismo, ¿no?
—Guī Xián cállate.
—Ahora tú repites.
Guī Xián conoció a Matthew después que Johana rompiera con él. Ellos se llevaron demasiado bien, pero no como para meterse a la cama juntos, ambos eran heteros y cuando las cosas se calmaron, comenzaron a hacer negocios. Ahora Matthew era prestamista y Guī Xián era el matón; iba a cobrar a las malas, usaba a su gente para cobrar y asustarlos, jamás mató a nadie, pero si infligieron heridas a los que no pagaban. Tras varias borracheras, Guī Xián visualizó a Johana en su mente, pero jamás creyó que era esa chica del prostíbulo. Incluso ahora sabía de las nuevas noticias de Matthew sobre todo lo que le hacía a Johana.
—Me estás diciendo que ella es la que te dio la patada en el club campestre sin ninguna razón, que dejó de devolver tus llamadas y tú nunca oíste de ella otra vez. ¿Y aún no te dice la razón por la que te dejó?
Matthew no dijo nada, solo frunció el ceño.
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Comments
JoJo
Hasta que alguien le ladró sus verdades a Matt
2022-09-09
2
Mew Wenley
Morí con esto 😂
2022-07-20
1
Gaddiel Alexis Alvarez Flores
los dos perros caray
2022-05-31
1