Investigación

El jefe había llevado a Ikki a su habitación, donde paso su celo con Nala, después de dejar las indicaciones él se retiró dejando solo a Ikki, ahora entendía porque decían los gorilas que el jefe era brutal, la cama era un completo desastre, las sábanas eran negras, pero tenían algunas partes que se veían húmedas, al ir acercándose más, Ikki se dio cuenta que lo que había sobre las sábanas era sangre, el pobre omega estaba muerto de miedo y resistió a duras penas las ganas de vomitar nuevamente, solo tomo las sábanas y las retiro de la cama, el colchón tenía una gran mancha de sangre, no sabía cómo iba a quitarla, pero debía hacerlo, además de la cama, el piso también estaba muy sucio, como si después de haber usado a la pobre chica la hubiera tirado al suelo, ya que ahí se veía el mayor charco de sangre, también encontró unas pisadas que iban hacia otra habitación, Ikki las siguió y al abrir la puerta se encontró con un lujoso baño, pero este también estaba lleno de sangre, Ikki no entendía como ambas habitaciones estaban en esas condiciones, el simplemente no lo pudo soportar más, no tuvo más remedio y vomito todo su desayuno.

Después de pensarlo por un momento Ikki se dio cuenta que tendría mucho trabajo por delante y como no quería que le pasara lo mismo se apresuró lo más que pudo, comenzando desde la habitación y terminando con el baño, el trabajo fue mucho para una sola persona, pero no se rindió y debido a que su nariz también era muy sensible fue muy meticuloso, y no quedo ni un solo residuo de sangre, si entraran ahora, parecería que ahí nunca paso nada.

Completamente agotado por el esfuerzo excesivo, se obligo a arrastrar sus pies fuera de esa habitación, en donde lo esperaba uno de los gorilas para guiarlo al área permitida para todos ellos y evitar que pudiera entrar en alguna otra parte prohibida de la mansión

Un par de horas después el jefe volvió a la mansión, pensaba que el omega holgazán no podría haber terminado con la tarea asignada ya que según su información venia de una buena familia en donde claro, el nunca habría movido un solo dedo, también había algo en su fría mirada que le decía que no era alguien normal, y deseaba poder verlo lloriquear como a todos los demás omegas, quería tenerlo bajo sus pies suplicando piedad, y de ser posible también bajo su cuerpo.

Al llegar a su habitación los gorilas se quedaron de pie sorprendidos, ellos no mandaron a limpiar el lugar, entonces que había pasado.

Gorila 1.- pero como fue que …

Jefe.- puse al pequeño iceberg a limpiar, al parecer con el incentivo correcto no es tan holgazán jajajaja, lastima quería darle una buena lección.

El pequeño iceberg, precisamente ese era el apodo que se había ganado Ikki dentro de la mansión, esto debido a su actitud imperturbable, pasara lo que pasara su semblante frio nunca cambiaba, nunca lo habían visto sonreír, no platicaba mucho con los otros omegas ni se relacionaba con nadie, y también parecía que no le tenía miedo a los alfas normales como todos los gorilas, pero si un poco al jefe.

A la mañana siguiente los gorilas fueron a buscar a Ikki

Gorila 1.- vamos omega, muévete.

Ikki.- Tsk, ahora que quieren, a mi grupo no le toca el trabajo el día de hoy, además saben que no me gusta que me llamen omega, tengo nombre y ustedes saben cual es… tsk Gorilas.

Gorila 2.- Cállate Ikki, son órdenes del jefe, así que muévete y ven con nosotros.

Solo con esa frase lograron que Ikki no siguiera reclamando ni contestando nada, y que “gustosamente” cooperara caminando en dirección a la gran mansión.

Jefe.- Bueno, bueno, bueno, omega, ayer me dejaste sorprendido, hiciste un buen trabajo en mi habitación, no quedo ni el más mínimo olor a sangre como lo pedí.

Ikki.- So-solo hice mi trabajo.

Jefe.- Que bueno escucharlo, porque de ahora en adelante serás el encargado de limpiar mis cosas.

Ikki.- Co-como dice.

Jefe.- todas las mañanas vendrás y limpiaras mi habitación, olvídate de las tareas de todo el resto de la casa, solo enfócate en mi cuarto y en cualquier cosa que te pida,

serás mi sirviente personal, asi será hasta el día de la subasta

Ikki.- Si jefe (* ahora me será imposible escapar, estando bajo la mira del jefe estoy jodido*)

Jefe.- Ahora sube y encárgate de que todo quede impecable y después ve a la cocina y me traes mi desayuno.

Ikki.- Si jefe

Ikki estaba en lo cierto, ahora estaba en la mira de ese jefe despótico, esto aun no sabía si sería bueno o malo para él, y aunque la carga de trabajo era menor, al estar bajo la mira directa del jefe, este trabajo era mas estresante.

Desde ese momento el jefe buscaba cualquier pretexto para molestarlo, aún tenía el firme propósito de ver la cara de Ikki, como la de cualquier otro omega, sonrojado, con ojos llorosos, rogando y temiéndole, sin embargo, lo único que recibía era la mirada seria y fría de Ikki, aunque en el fondo estaba muerto de miedo, pero esto el jefe no lo sabía, 17 años de creerse alfa bajo la estricta supervisión de su padre le habían enseñado a no mostrar debilidad ante nada ni nadie, sin importar la situación siempre debía mostrarse como el alfa ideal y eso lo seguía haciendo a pesar de saber que su verdadera identidad es un Omega.

Después de tratar varios días con Ikki el jefe realmente estaba intrigado.

Jefe.- Tsk, estas seguro de que eres un Omega

Ikki.- Eso dicen

Jefe.- Como que eso dicen

Ikki.- Yo me entiendo.

El jefe no se quería quedar con la duda, esa noche mientras estaba descasando en su habitación, mando a traer los papeles que tenían de Ikki.

Informe de compra

Información personal

Ikki Sun

Omega Dominante

17 años de edad

Resumen de captura

Omega vendido por la familia Laimi, no se otorga más información.

Jefe.- mmmm no tenemos mucha información de la compra, sin embargo… John investigaste a la familia Laimi

John (Gorila 1).- si jefe, aquí está el informe

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