Capitulo 15

Elijah

Ha pasado una semana desde que estoy aquí en la manada de Damon. Una semana en que no he escuchado la voz de mi mate.

Hoy el alfa presentará a su luna a la manada. Por más que trato de ayudar, no puedo mi mente solo está pensando en la mujer que está desde hace una semana en una cama.

Reece y Karol hace más de tres días que se fueron, ellos aquí no iban a portar nada en cambio en la ciudad si. Ya que Reece se hace cargo de mis negocios cuando yo no estoy.

—Elijah nuestra luna ha despertado. Seth me habla y de una vez me voy corriendo hasta la casa del alfa.

Gracias diosa luna por devolverme a mi chica. Toda esta semana no he podido dormir bien. Las ojeras son tan notables, pero eso no importa, lo que realmente importa en estos momentos es que mi luna ya ha despertado.

Llego hasta la habitación y veo a las dos brujas que han estado con mi mate en todo este tiempo.

—Mi vida. Llego hasta su lado. Ella me mira como si no me conociera y siento una presión en mi pecho.

—¿Que le pasa porque está así?. Las brujas no me dicen nada y salen de la habitación.

—Amor responde me.

—Seth. Grito. —y no me contesta.

Lucy me mira y cae en la cama muerta de risa.

Ahora entiendo todo. Solo se estaba burlando de mí. Y eso no me causó nada de gracia.

—Estoy muy bien. Dice después de que se canso de reír.

—Eso debiste decirlo desde que entré a la habitación. Le hablo un poco fuerte. Ella no sabe todo lo que pasé en esta semana para que ella solo esté haciendo broma.

—Lo siento. Me dice bajando la cara y comenzó a jugar con sus manos.

—Te extrañé. Me lanzo a ella para abrazarla con toda mi fuerza.

—yo igual te extrañé.

—Eres una mentirosa. Le digo y me mira con los ojos muy abiertos.

—Si te extrañé. — me grita parándose de la cama.

—Ummm claro. Le digo y su cara es todo un poema. —Seguro estuviste toda la semana ocupada con Seth. Le digo y salgo de la habitación para buscarle algo de comer.

Voy hasta la cocina y ya una de las chicas que están en aquí me entregan una bandeja llena de comida que creí que para tres personas comen bien.

Subo hasta la habitación y no la veo en la cama. Dejo la bandeja en unas de las mesas y voy hasta el baño. Y allí está ella cepillando sus dientes.

—Acaso estás enojado porque estuve con Seth toda la semana. Me grita tan fuerte que creo que toda la manada la escuchó.

—No. Me río. —Eres nuestra mate, Seth es el único que puede ver lo que es mío.

—Eres un tonto. Me dice y sale del baño.

—Soy tu tonto.

—Idiota.

—Tambien soy tu idiota.

Lucy

Elijah y yo nos comemos toda la comida que trajo, la verdad moría de hambre. Cómo estaba dormida mo necesitaba comida pero eso no quiere decir que no deseaba tener algo dulce en mi boca.

Pasé toda una semana con Seth y fue increíble para nosotros dos. Aunque pude sentir como cada día que pasaba elijah casi no podía dormir y estaba muy triste.

El alfa Damon tiene un fiesta está noche donde presentará a su luna a la manada. Elijah y yo estamos invitado, aunque para mí es extraño estar rodeada de seres sobrenaturales y yo siendo una simple humana.

Me meto a la ducha y me doy un baño. No quiero llegar tarde a la celebración... una de las bruja me ayudó con mi vestuario.

Veo a Elijah dar vueltas por la habitación. Creo que ya estoy tonta de tantas veces que lo veo pasar de un lado a otro.

—¿Que te sucede pregunto?. Lo veo un poco angustiado.

—No es nada. Me dice y por como me lo dijo no le creo nada.

-—Sabes que puedes confiar en mí. Le digo mientras tomo su mano.

—Lo sé. Musita caminando hacia mi.

—Ya podemos irnos. Pregunto y Elijah me toma de la mano y salimos de la habitación.

Elijah me ayuda con el vestido ya que es muy largo y con los tacones se me hace muy incómodo bajar las escaleras. En la entrada de la casa del alfa Damon, lo encontramos a el y a su bella mate.

Los cuatros vamos juntos hasta el jardín de la casa ya que ahí se hará la fiesta. Muchas personas de las que están aquí, nos miran y eso me hace sentir algo incómoda. Nunca me ha gustado ser el centro de atención.

Tomo la mano de Elijah ya que aquí el vestido no me molesta para caminar.

Muchos alfas de otras manadas saludan al alfa y a su mate.

Elijah aprieta mi mano, pero no tan fuerte como para lastimarme.

Lo noto más tenso de lo normal. Le doy un beso en las mejillas para ver si así se tranquiliza pero es en vano. No sé que hacer para que esté tranquilo, o tal vez solo son cosas mías.

La fiesta termina, ya casi todas las personas se han ido a sus casas y los invitados se retiran hasta una parte de la manada dónde hay casas que son para personas que vienen desde afuera.

Una presencia detrás de mi hace que me espante y Elijah se ponga en alerta.

—Ay hermanito. Parece que si lograste despertar a tu mate.

Miro a la persona que dijo eso y es la misma chica que apareció en la casa de Elijah y me hizo que durmiera.

—¿Que haces aquí?. Elijah le pregunta y se pone delante de mi.

—La manada fue invitada por el alfa hermanito.

—Yo no soy tu hermano. Habla con enfado en su voz.

Dos personas más llegan, junto con la chica.

—Hola hijo. dicen los dos al mismo tiempo.

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