T2 E3 EL REGRESO

Intenté usar el aparato con forma de bola de cristal para volver al mundo humano pero no funcionó. Entonces uno de los demonios me dijo:

- La bola de cristal negra no funciona la primera vez en el infierno. Para que te pueda servir debes usarlo en la tierra primero, luego ya podrás usarla aquí también.

- ¿Entonces como salgo de aquí? Volví a interrogar a los Demonios porque Bel ya se había ido y no me dijo como salir.

- Caminando en esa dirección hallarás un mar de sangre, allí hay un barquero. Debes darle algo importante para ti, solo así te llevará a la salida. Dijo uno de los Demonios señalando una colina que había en frente.

- Vaya, que detallito olvidó decirme Bel. Si voy a ser su protegido debería informarme mejor.

- Jajajajaja Se cree importante el novato. Te dije que tenía personalidad arrogante. Nosotros llevamos sirviendo a Bel muchísimo años y jamás nos ha permitido ir al mundo humano. Le dijo uno de los demonios al otro.

Al ver que yo no le agradaba a los Demonios seguí el camino que me habían dicho antes.

Bajé por la colina y justo donde ellos habían indicado estaba un barquero. me acerque a él y le pedí que me llevara a la salida del infierno.

- Jajajajaja. Hace años que nadie me pide que lo lleve a las puertas, ¿Quien eres y porque conservas tu memoria?

- Soy nuevo aquí y fuel Bel quien me conservó intacto. ¿Me puedes cruzar al otro lado?

- Tenías que ser un novato. Hace mucho no los hay por aquí, Bel se aburrío de ellos porque siempre le fallaban. Seguro terminarás igual.

- No te pedí tu opinión sobre mí trato con Bel. ¿Que tengo que hacer para que me saques de aquí?

- Dame algo muy importante para ti, muy importante. Dijo el barquero.

Busqué entre mis cosas pero solo tenía mi equipo.

- Solo llevo las cosas que me dió Bel, si te las doy ¿Cómo voy a trabajar para él?

- Dame uno de tus dedos, con eso me conformo, me gusta la carne humana. Sabe deliciosa y hace años que Bel no me manda humanos.

- ¿Que? ¿Uno de mis dedos? Ya, ¿Que pasa si no lo hago?

- Pues aquí te quedas y busca otro barquero que te lleve.

- No hay más barqueros, eres un aprovechado. Le dije

No tuve más remedio que cortarme un dedo. Saqué la pistola y le disparé al dedo y lo cortó de un tajo. Cayó en el suelo. El barquero se tiró sobre el dedo y se lo comió.

Luego de haberse comido el dedo me dijo:

- Deliciosa carne humana pero me supo un poco a pólvora. Bueno sube, debemos darnos prisa.

Me su subí a su barco sarpamos rumbo a las puertas.

Allí el barquero me empujó, sentí que algo se desprendió de mí y como si se tratase de un portal, en pocos minutos estaba en la superficie de la tierra.

El mapa que venía en mi equipo me indicaba que estaba al sur de México. Entonces quise probar si tenía habilidades extra humanas, intenté volar pero no pude. No tengo esa habilidad. Empezamos mal pensé.

De pronto un Camaro nuevo se acercó dónde estaba yo, al borde de la carretera. Un tipo con una pistola se bajó y me apuntó.

- Quien chingados eres y que haces en mis terrenos. Entrégame la pistola que llevas y sin trucos.

- Vaya señor cálmese, apenas regreso a la tierra y ¿Ya me quieren matar de nuevo?

- No te pases de listo conmigo, si no me entregas la pistola te vuelo la cabeza.

- Si tanto quiere la pistola se la voy a dar.

Saqué la pistola y lo apunté. Apreté, gatillo y al instante el tipo quedó sin cabeza.

- Vaya Bel no estaba jugando. Esta cosa es realmente diabólica.

*Me subí al Camaro*

Y conduje hasta a mí apartamento, tenía que recuperar la calavera de mi hermana, y mi Harley Davidson. Llegué cerca de las cuatro de la tarde. El sol ya se estaba poniendo.

Note que habían hecho remodelaciones, la pintura era diferente, tampoco estaba el lugar donde solía dejar mi Harley. Toqué la puerta, me abrió un chico como de 23 años.

- Hola mira, este es mi apartamento, yo vivía aquí pero hace dos días que me fui por por algunos inconvenientes. ¿Quien les dió permiso de usar mi apartamento? Les pregunté.

Pero el chico hacia como si no me hubiese visto. Miraba para todos lados, luego dijo:

- ¿Hola? Parece que alguien tocó y se fue.

- No me he ido tonto, estoy aquí ¡En frente tuyo!

*El chico no se inmutó, solo cerró la puerta*

¿Pero que está pasando? Me preguntaba.

Una señora que venía haciendo aseo puso su carrito justo donde yo estaba.

- Disculpe señora, ¿No ve que estoy aquí, ¿Acaso no me ve?

La señora siguió su camino sin haberme escuchado o visto aparentemente.

Definitivamente algo no andaba bien.

Pero tenía que averiguarlo una vez más.

Así que, toqué la puerta de nuevo y el chico salió con una pistola muy enojado y se paró justo en frente de mi.

- Quién quiera que seas, te voy a dar un tiro. Esto no es divertido hijo de p. ¿Dónde te escondiste? Dijo el muchacho buscando por todos lados.

- Estoy aquí. Le dije.

Pero no me sentía, seguía sin escucharme y sin verme.

Sali inmediatamente a la calle, le gritaba a las personas en la cara pero no me veían ni escuchaban.

Definitivamente nadie podía verme ni oírme. Así qué, saqué la bola de cristal que me había dado Bel.

Lo llamé y la bola se iluminó. Al instante se reflejó su rostro en la bola.

- Oye Bel, ¿Que es lo que está pasando aquí? Nadie puede verme o escucharme. ¿Que demonios sucede?

- Jajjajaj Eso siempre le pasa a los novatos.

- No te atrevas a reírte de mi tu también. Ya perdí la paciencia Bel.

- ¿Ross olvidas que estás muerto? No tienes presencia física en la tierra solo en el infierno donde perteneces. Eres un demonio ahora.Tu cuerpo físico se pudre en el cementerio. El cuerpo que ven tus ojos es la apariencia que le quedó a tu conciencia de como fuiste antes de morír. En otras palabras, lo que ves de ti mismo es un recuerdo que tú memoria se reusa a olvidar.

- Y entonces ¿Porqué aquel tipo del Camaro si pudo verme y escucharme?

- Porque el también era otro como tú, llevaba díez años trabajando para mí. Yo hice qué fuera hasta donde estabas, para que te recogiera, pero le volaste la cabeza.

- Pues no tenía buena actitud, desde el primer momento me apuntó con el arma y estaba decidido a matarme.

- Si, ya me dí cuenta. Tendrás que acostumbrarte a estar así.

- Bel, Nadie puede verme ni tocarme, ¿Que hago aquí? ¿Cómo esperas que trabaje para ti así?

- Acabas de hacer la pregunta más importante. Los demonios no tenemos permitido alterar las cosas en la tierra. Así que hemos ideado un modo de poder hacerlo. Es el siguiente; Si quieres interactuar con el mundo humano debes poner en la frente de las personas la bola de cristal que te di y automáticamente entrarás en el cuerpo de la persona. Podrás ver lo que ella ve, hablaras por ella, accederás a sus recuerdos, estarás dentro de ella y serás tú quien manipule los movimientos de su cuerpo. Para salir solo debes poner la bola de cristal de nuevo en tu frente y estáras fuera de ella. Nadie sabrá que pasó.

- Vaya entonces tengo que meterme en el cuerpo de las personas. Me da un poco de miedo acceder a los recuerdos de la gente, por las cosas que han hecho. Preferiría entrar a la mente de un mono

- Temo que no es posible ¿Tienes algo más que preguntarme?

- Si, si, si, por favor espera, comprendo que eres un ser muy ocupado. Solo quiero preguntar una cosa más ¿Cuánto tiempo ha pasado desde que me mataron?

- Diez años. Dijo Bel y luego despareció de la bola de cristal.

- Vaya, díez años, pero si parece que fué ayer. Pensaba.

Me costaba asimilar eso y que ya no iba tener mi rostro de nuevo, sino el de la persona que poseyera.

Volví a tocar la puerta del chico, el abrió y rápidamente entre y bajé al sótano. Busque en todas las cosas viejas allí guardadas y encontré el cráneo de mi hermana.

Luego salí, me subí al Camaro y seguí rumbo a la playa. Quería ver el atardecer. Puse la calavera a mi lado e irremediablemente quedé llorando.

Mientras lloraba desconsoladamente empezó a sonar esa canción.

"Ojalá me lleve erdiablo.. ojalá"

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