7. te ves preciosa

Al siguiente día cuando me desperté, al abrir mis ojos, estaba completamente desnuda y Fuego no estaba por ningún lado, en la gran cama solo estaba yo, pero fue lo mejor, ya que no sabía como reaccionar a tal sorpresa de verlo a mi lado recordando lo que paso anoche, no tenía idea el por qué?… Yo amo a Andrés por qué lo hice tal vez nunca tenga respuesta, puesto que mis sentimientos no están muy claros en este momento y era inexplicable yo no había tomado, él no había tomado, por el hecho de que en sus besos no sentía alcohol, todo pasó por placer, no te ilusiones me decía en la cabeza

En ese justo momento siento un golpe en la puerta… Tock… Tock

— Quien es

— Señorita el maestro le mando un sobre, dice que es muy importante que le lea

— entra, dije sin rodeos después de taparme con las sábanas

—buenos días señorita me presento soy Sara Monterrosa y soy el ama de llaves, bueno el dos, bueno usted entiende, somos dos en la casa

—ok sara, te puede llamar sari

— como guste

ella era muy agradable y tierna, se notaba que era joven, me llevaría muy bien con ella, era de un espíritu muy libre aunque trataba de ser formar, la chica agradable se retira y me deja el sobre ✉ sin más que hacer, con las sábanas envueltas en mi cuerpo me acuesto de nuevo en la cama y saco la carta que estaba en el sobre

……// carta//……

Hola señorita Mel, me place anunciar que tengo un evento hoy a las 6 el cual tengo que hacer presencia y me honraría si usted decide acompañarme para tal evento, ya que seria una buena oportunidad para anunciar nuestro compromiso…

ATT: FUEGO

…… // fin carta //……

al leer cuya carta quede unos minutos en suspenso, que trataba este hombre era imposible que un hombre como el frío, dominante y que su mirada aterrorizaba a cualquiera estaba siendo tan dulce y tierno conmigo, era más que obvio que se traía algo entre manos, estaba segura que algo tramaba

salí de mi estado de show y me dirijo al baño a realizar mis rutinas diarias, al salir trate de escoger algo casual para el día, algo con lo que me sienta cómoda, que sea sencillo después de tanto buscar encontré lo que quería encontrar

un vestido azul cuya tela era delgada, no tenía mangas, tenía un cierre color plateado en la espalda para poder ser ajustado, entre sus barillas tenía rayas plateadas y en falda corta tenía un corazón de medio lado; unas sandalias azules, pulsera y collar plateados y aretes blancos fue la vestimenta que quise ponerme

al bajar a desayunar estaba una mujer la cual desconocía, aunque era muy popular y había sido tendencia en varias noticias, yo no me había enterado de ella

esta mujer era Laura Díaz, a sus 23 años siendo abogada ya se había enfrentado a muchos casos los cuales ni uno había perdido, tenía su propio despacho; este era muy popular, era una de las mejores abogadas de Nueva York, su carrera había sido muy exitosa y era una mujer emprendedora, libre y capaz de cumplir todo lo que se proponía, esta mujer aparte de ser una perfecta abogada también era muy buena en la computadora esta era La leona capaz de arruinar a cualquier que intentara algo contra Fuego, ella a pesar de ser su hermana era la mayor hacker y solo había hecho pocas veces su aparición como la Leona, en un momento donde amenazó con arruinar a todos los que se a atrevieran hacer negocios con el peor enemigo de Fuego, esta mujer era muy astuta solo su hermano sabía que ella era la leona y le había enseñado todo a una persona de confianza para que la reemplazara en lo básico mientras ella se dedicaba a su empresa

ella me vio y me saludo

—Hola, un gusto Laura, ella omitió pronunciar su apellido

— Hola, Daniela Mel, un placer

ella ya acababa de comer así que se despidió y se marchó

apresure a preguntarle a sara quien era esta mujer

— sari tu sabes quien era la señorita de la mesa

— Señorita mejor que usted se entere por su cuenta

A Daniela no le había quedado claro quien era ella así que tomo el celular y se puso a buscar todo lo referente con laura y en menos de media hora ya sabía que era Laura Díaz, pero lo que no lograba entender era que hacía en la mansión de Fuego?… Será su esposa?… Será que yo soy su amante?…

No quería seguir con preguntas locas así que me aliste y me dirigí a la universidad, ya que entraba a las once

… Con Thiago…

Me encontraba en industrias T.D.F puesto que tenía una junta muy importante este encuentro lo hice como Fuego, al terminar ya se hacía la hora del almuerzo así que me dirigí a industrias Díaz y al subir pedí que me llevarán el almuerzo a la oficina firmando documentos me encontré con el evento de esta noche y en ese momento se me se vino la mujer del motel a la mente solo recordaba cuando la tocaba, cada beso cada caricia, y como a pesar de la droga podía sentir lo caliente de nuestros cuerpos, pensaba Fuego sin notar que está mujer cada día se apodera más de su corazón.

… Con Daniela…

La universidad fue todo un éxito, le pedí al chófer que me llevara a la mansión, el chófer que Fuego me había puesto como guarda espalda él quería asegurar sé que no me fuera a escapar, al llegar a casa me dirigí a la habitación y me tire en la cama para dormir y así fue estaba tan cansada que de inmediato me quedé dormida.

— Daniela que hora crees que es

Me despertó el grito que resonó en la habitación, si ese era Fuego con su máscara puesta y su traje perfectamente arreglado

—que hora es, dije medio dormida

—son las cinco de la tarde

—Ok, ok, ya me alistaré

corrí al baño mientras él me seguía regañando

LLEGAREMOS TARDE… COMO PUEDES SER TAN DESCUIDADA MUJER… TE PEDÍ QUE ESTUVIERAS LISTA…

No le respondí, ya que este tipo de escándalos los tenía en mi casa con mi madre y solo me empece a bañar mientras caían mis lágrimas al recordar a mi madre cuando me atacaba por los eventos importantes, los extrañaba mucho y no sabía como estaban después que me despedí de ellos

Salí del baño y en el closet ya se encontraba toda mi ropa, ya que Fuego le había ordenado a Sara que desocupara las maletas

Encontré un vestido perfecto color rojo brillante, era un vestido con dos mangas que se sujetaban en el cuello y dejaba mi pierna izquierda al descubierto, ya que tenía una abertura por ahí, el vestido rojo brillante era perfecto para esta situación Fuego pudo ver los ojos rojos de la mujer y sin saber por qué lloraba salió de la habitación para dejar la vestirse y se fue a la sala a esperar la

El ver bajar a Daniela Mel por las escaleras se quedó boca abierta, pero por la máscara está expresión no fue notada ella traía su vestido rojo brillante unos tacones rojos y su cabello suelto ya secado, en realidad esta mujer era muy hermosa y se apresuró a decir

— Te vez preciosa, ahora si nos podemos ir, dijo estas palabras seguidas para no parecer tierno, pero Daniela al escucharlo le da una sonrisa y le dice