Salida con amigos

Tuve un día agotador, mis padres tienen pensado abrir otra sucursal en España y quieren que vaya el próximo mes para la inauguración.

Hoy tuve una reunión con mis empleados y les informé que Marcelo, mi mejor amigo y gerente general de la empresa será el que este al frente mientras yo esté ausente.

Es viernes por la tarde, estoy saliendo de mi empresa y estoy cruzando el estacionamiento para llegar a mi auto, cuando escucho a Marcelo gritarme para que no me vaya.

-Hey, vamos por unas cervezas al Bar de David. Alejandro y Diego nos esperan a las 8.

- No sé, no tengo muchas ganas de salir, prefiero ir a casa y descansar. O pueden ir ustedes a mi casa y tomamos las cervezas ahí.

- Ya deja de hacer vida de ermitaño Iván, salgamos a tomar algo y divertirnos un rato. Hace 4 años que no salimos entre amigos. Y creo que te hace falta respirar otro aire.

De verdad que no tengo ganas de salir.

- Si no tengo noticias tuyas para las 19:30 vamos a tirar tu puerta abajo y entre los cuatro te vamos a llevar a rastras.

Me reí, no por imaginarme la secuencia, sino porque sé que lo harían si no voy al bar.

- Está bien, vos ganás. Te veo ahí a las 8. No hace falta que vos, y esos dos delincuentes tiren mi puerta abajo.

- y sacate ese traje, pareces de luto.

- El negro es un color bonito, solo para personas de gusto muy especial.

Reí a carcajadas y chocamos puños.

-Si claro, como sea. Te veo en un rato.

Subió a su auto y yo volvía a mi casa.

Me mudé hace un mes y medio más o menos, volví a la casa donde me crié con mis padres y mi Hermanita.

Todavía se me hace muy raro volver a vivir en casa, mis padres querían que venda la propiedad y me vaya a vivir a un lugar más lujoso en el centro de la ciudad. Jamás lo haría, tuve una infancia feliz y hay miles de recuerdos que no quiero que se pierdan. Algún día quiero que mis propios hijos corran por esta casa.

Puedo tener todos los lujos que quiera, pero me gusta la vida sencilla, y esta casa aunque no sea sencilla me encanta.

Se abre el portón eléctrico y guardo el auto. Busco las llaves y entro a la casa, me encanta el olor a madera y cuero que invade mis fosas nasales al entrar. Pongo música a todo volumen y subo para darme una ducha, en un rato tengo que encontrarme con mis amigos.

Me saco el traje y lo dejo tirado en la silla que ya tiene pilas de ropa acumulada. Me quito los zapatos y entro a la ducha.

Al salir del baño, envuelto con una toalla en la cintura busco que ponerme. Saqué un jean Negro y mi cinturón con tachas, mi remera de Metallica favorita y mi campera de cuero. No hace falta tanta producción, solo vamos a ser los chicos y yo.

No me decidía en sí ponerme los borcegos o alguna de las zapatillas negras que están en sus cajas. Creo que va a ser una noche fresca, asique agarre los borcegos. Me peine de manera desordenada frente al espejo, me puse un poco de perfume.

Una hora después salgo de casa, son las 19:30 y como si no conociera a mi amigo me escribió un mensaje.

🗨 Estamos en el Bar con Ale, Diego no tarda en llegar. 👊

🗨 Estoy en viaje 🤘

Pare para cargar combustible, y un paquete de cigarrillos que no quiero abrir y unos chicles negros. Tengo que dejar ese mal hábito.

Continuó mi viaje al bar, no hay muchos lugares para estacionarme, hasta que vi a mi viejo amigo David afuera, y me dio el lugar que él estaba dejando, En realidad era su esposa saliendo del lugar.

Me estaciono y bajo cerrando el auto.

-A que se debe el honor de tu visita al bar. ¿Te sacaron la Correa?

Dijo a las carcajadas.

- En realidad me la saque yo solo. Los chicos insistieron en que venga al bar. ¿Los viste adentro?

Dije sonriendo

-Así es, entraron los hermanitos primero. Después llegó Diego con su novia.

- ¿Su novia?

- Sí. Así me la presento, como su novia.

Pensé que eramos solo nosotros cuatro.

-Gracias David, nos vemos en un rato.

-Voy a estar en la barra con mi hijo. Pasa a buscar tu wisky, la casa invita.

-Gracias, amigo.

Entre al bar, todavía es temprano y no hay mucha gente, eso me gustó, al menos no iba a hablar a los gritos por un rato. La música sube después de las 10. Busque la mesa de siempre y ahí encontré a mis tres amigos y a la novia de Diego.

- Hola muchachos.

¡Se juntó la banda! Dijo Ale, Que me dio un Abrazo, hacía tiempo no lo veía.

Lo mismo con Diego

- Que bueno verte amigo, veo que estás muy contento y parece que se debe a la señorita.

-Iván, te presentó a mi novia Noelia. Noelia, él es Iván, que como estos dos son como mis hermanos.

-un placer conocerte Noelia. Cuida de nuestro amigo, a veces puede parecer muy serio, pero es un gran hombre.

-Así lo haré, dijo Noelia dándole un beso en la mejilla a Diego.

Me senté en una silla con mis amigos y les pregunté si ya habían pedido algo para tomar.

- Todavía no. La mesera todavía no vino a traer la carta.

- Ok, voy a la barra.

- Espera Iván, tenemos que decirte algo.

- Diego trajo a su novia porque quería presentarla. Pero nosotros también queremos presentarte a nuestras novias y no tardan en llegar.

Me acerqué a Marcelo con cara de pocos amigos y le dije

-Y yo que mierda voy a hacer metido en el medio de ustedes si están en pareja. ¡Son unos idiotas!

Él solo dio una sonrisa de lado.

- Tranquilo Homero...

-Homero, llevo años diciéndote que dejes de llamarme así. No Encontré a la tal Morticia, no estamos en la secundaria. Ya madura. Mejor voy a la barra a buscar las cervezas.

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