Capítulo 19

En el harén nadie dormía eran las tres de la madrugada y la emperatriz no podía acallar sus gemidos.

Abigaíl: Ah~ más… mmm … No pares.

Stefan: No lo haré majestad.

Esté se encontraba entre las piernas de esta arremetiendo sin piedad. Sus estocadas eran salvajes, profundas, sin ningún tipo de delicadeza.

Abigaíl ya sentía dormidas sus piernas después de la tercera ronda había dejado de sentirlas, su cuerpo se encontraba supersensible y solo podía expresar todo lo que sentía en gemidos y sonidos obscenos.

A la mañana siguiente esta fue despertada por su doncella Norma, ya que tenía que despedirse de su hermano y cuñada. Pero al tratar de levantarse sus piernas fallaron y termino en el suelo.

Abigaíl: Auch… ja, ja, ja

Norma: ¿Majestad se encuentra bien? (Dijo está para luego acercarse y tratar de levantarla. Pero justo cuando estaba por ayudarla fue detenida por una voz fuerte y ronca)

Stefan: Yo la ayudo a bañarse, no se preocupe.

Norma: Pero...

Abigaíl: Está bien Norma. Después de todo es su culpa que este así.

Stefan:(solamente sonrió y la alzó en brazos para luego llevarla a la bañera dónde su doncella ya había preguntado su baño) No creo que se pueda despedir de su hermano así.

Abigaíl: ¿Y de quién sería la culpa? No tuviste piedad de mí...

Stefan: Yo solo complacía sus órdenes majestad.(dijo este depositándola suavemente dentro de la bañera para luego meterse detrás de ella)

Abigaíl: Tú... ¿Y ahora que se suponen que haces?

Stefan: Ayudo mi emperatriz a bañarse.

Abigaíl: Puedo sola…

Stefan: Lo sé, pero yo lo hago mejor. (Esté no la dejo hablar más, ya que bajo su mano a su intimidad y empezó a masajearla.) ¿Usted que opina majestad?

Abigaíl: Ah... que llegaré tarde con mi hermano, pero ni se te ocurra parar.(dijo este recostándose en el pecho desnudo de este para darle más acceso a su punto de placer)

Stefan: (Este solamente sonrió y tomo la mano de este y la llevo hasta su miembro) Yo también necesitó de su ayuda majestades (Le susurro al oído con su voz más ronca y profunda. Eso delataba lo excitado que este ya se encontraba)

Abigaíl tomo el miembro de este y lo empezó a masajear de arriba abajo, cuando Stefan lo sintió lo bastante duro tomo ambas piernas de esta y la levantó para luego sentarlas sobre él y de una estocada entró.

Abigaíl: Mmm... Dios. Eres el diablo… Ah… Llegaré tarde…

Stefan: Seré rápido… Pero en tu oficina lo continuamos mmm...

Abigaíl: mmm ah~ no te bastó con... lo de anoche…mmm…

Stefan: Nunca mm… Tendré suficiente de ti Abigaíl... Así nena muévete más rápido...

Abigaíl se tomó del borde de la bañera y levantando sus caderas empezó a moverse más rápido. Tenía que ir con su hermano y si no acababa rápido este asunto no llegaría junto a su hermano antes de que esté partiera.

Una hora después Abigaíl se encontraba cambiándose y Stefan la observaba desde la cama.

Abigaíl: Mi hermano va a matarme.

Stefan: Pudo haberme parado cuando tenía tiempo, pero usted me pidió no parar.

Abigaíl: Eres un demonio. Tendré que tener cuidado contigo.

Stefan: ja, ja, ja vamos esposa acepta que mucho no me costó convencerte tú también querías.

Abigaíl: Ja mira mejor no me hables. Más tarde me cobraré esto.

Stefan: Mmm… Me encantaría verlo cariño.

Abigaíl:(Sonrió con malicia y dijo) Ya lo verás cariño. Bueno me voy te veo luego.

Abigaíl se dio vuelta para salir de la habitación, pero este de un salto llegó junto a ella y la arrinconó contra la puerta.

Stefan: ¿Y mi beso de despedida?

Abigaíl: Ya tengo que irme.

Stefan: Eso no me importa, quiero mi beso.

Esta se dio vuelto tomo al chico el cuello y lo besó.

Stefan:(al tenerla cerca la apretó contra su cuerpo y profundizó el beso hasta sacarle el aire. Luego de separarse dijo) Te veo en tu oficina querida. Ahora vete o se te hará tarde(dijo con una sonrisa burlona)

Abigaíl: Tú… Ya verás cariño esto me lo pagas.(dijo esto último y salió como pudo, ya que aún le dolía sus caderas)

Norma: (Está se encontraba a la espera de Abigaíl, hasta que la vio salir y dijo) Majestad su hermano lleva una hora esperándola y por lo que me dijeron está algo enojado.

Abigaíl: Maldito y sensual Stefan, por su culpa seré regañada.

Esté empezó a caminar hacia su palacio mientras que norma la seguía por detrás. Esta iba aguantando la risa por como caminaba hasta que no se aguantó más muy dijo.

Norma; Majestad traté de caminar un poco menos...

Abigaíl: ¿Menos que?

Norma: Desbaratada ja, ja, ja es que se ve que el joven casi acaba con usted noche.

Abigaíl: Maldición juró que lo mataré. Me duele todo Norma.

Norma: humm No se preocupe yo le prepararé un té medicinal para los dolores y aparte el antibiótico.

Abigaíl: Gracias Norma por cuidar de mí. Ahora apurarnos antes de que mi hermano enloquezca de tanta espera.

Esta solo asintió y ayudo a su Emperatriz le causó gracia la manera que está caminaba y si apuraba el paso se notaba más el estado en el cual el joven Gilbert la había dejado.

Al llegar a la entrada del palacio se encontró con sus hermanos y el emperador. Quienes al verla caminar, Gael aguanto la risa junto con Luna, ya que está había preguntado a su hermano dónde se encontraba y este le había contado que había ido a pasar la noche con uno de sus concubinos.

Por otro lado, Bastian frunció su seño, pero rápidamente su cara cambió a burla al ver cómo el emperador tenía su rostro distorsionado.

Bastian: Hasta que llegas hermana.

Gael: Y completa, pero mucho no le faltó para dejar a nuestra hermana sin piernas.

Abigail: ja, ja, ja ya no se burlen. Perdón hermanó, te voy a extrañar.

Steven:(estaba violeta de la ira no podía creer el descaro de Abigaíl. Esté miro a los emperadores se inclinó y dijo) Tengan buen viaje los dejo, ya que tengo asuntos que atender.

No espero respuesta y salió del lugar echando humo.

Abigaíl: Uf pensé que reventaría esa vena que tenía en su frente.

Gael: Yo igual.

Bastian: Ay hermanita tú sí que eres cruel. ¿Tenías que venir caminando de esa manera?

Abigaíl: ¿Cuál manera?

Gael: Así como que hubiera corrido un kilómetro hermana. ja, ja, ja

Abigaíl: No sé dé qué me hablan.

Luna: Basta déjenla tranquila. Ay querida te extrañaré promete ir a visitarnos.

Abigaíl: Por supuesto (Está se acercó para abrazar y susurro) iré para la llegada de mi sobrina.

La emperatriz sonrió hacía unos días que se enteró de que venía en camino su segundo hijo y solo se lo había contado a Abigaíl, estaba esperando el momento adecuado para contárselo a su esposo.

Luna: Eso espero, o no te lo perdonaré.

Abigaíl se alejó y saludo con un fuerte abrazo a su hermano también y así se despidió de ambos antes de que emprendieran su viajé.

Al quedarse solamente Gael y Norma junto con ella en la entrada.

Gael: (Cargo a su hermana en brazos y ante la sorpresa de esta dijo) Prefiero llevarte así hasta tú estudió que ver cómo te desarmas por el camino.

Abigaíl: ja, ja, ja te lo agradezco hermano ya desayunaste.

Gael: No, desayunamos en tú estudió.

Abigaíl: De acuerdo, ya escuchaste Norma.

Norma: Si majestad yo me encargo.

Así se fueron los tres dejando la entrada libre...

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