Capitulo 16

Si las miradas matarán, la emperatriz ya estaría muerta.

Tanto las concubinas como el emperador, no dejaban de mirarla feo. El señor Milton al ver esto tosió para llamar la atención y dijo

Señor Milton: Disculpe la irrupción majestad, pero me habían dicho que esto era importante.

Abigaíl: Por supuesto. Emperador explique usted por qué los mando a traer.

Steven: (le dedicó una última mirada y dijo) Claro, las mandé a traer a ustedes junto con el Señor Monzón, para preguntarles ¿Por qué gastaron tanto dinero este mes?

_ Esposo usted no puede pretender que vivamos en la miseria, teníamos que hacer refacciones como la emperatriz.

_ Así es además la emperatriz tiene a un montón de sirvientes trabajando para ella cunado es una sola y nosotras que somos muchas solo teníamos a veinte a nuestro servicio. Era necesario más personal.

_ Usted sabe que los jardines de nuestro harén estaban secos necesitaba más vida por eso contratamos al mejor paisajista para remodelar todo el lugar.

_ Y bueno también necesitábamos vestidos nuevos y joyas para la fiesta de la Emperatriz. No pretenderá que hubiéramos ido con los mismos vestidos y joyas de siempre.

Steven: Silencio. Ustedes van a devolver todo lo que gastaron.

El dinero de su mesada será suspendido por...

Señor Milton: Ya hice los cálculos majestad, para devolver todo lo que gastaron no tienen que recibir ninguna de ellas su mesada por seis meses.

Steven: Perfecto por seis meses no recibirán mi un centavo.

_ Eso no es justa majestad.

_Si ustedes nos dijo que nunca haría diferencias con sus esposas.

_ Eso es cierto, pero ahora pareciera que la emperatriz tiene más lujos que nosotras.

_ Está faltando a su palabra.

Steven: Eso...

Abigaíl: Déjeme que yo les explico. Primero que nada yo no puede ser nunca comparada con ustedes, porque yo soy la emperatriz y por ende debo recibir mucho más que lo que el emperador les pueda llegar a dar.

Segundo yo trabajo, algo que ninguna de ustedes hace, satisfacerse las necesidades del emperador no se considera un trabajo, señoras. (dijo está con una sonrisa burlona)

Tercero mis hermanos son Emperador y príncipe de un imperio diez veces más grande que este, ellos pagaron mis refacciones y contrataron mi personal por qué saben que este imperio no tendría la cantidad suficiente para pagar todo eso mensual.

Por último quiero aclararles algo el dinero no sale de los árboles ni llueve del cielo. Ese dinero que se gastaron sin ninguna pena, es el trabajo y sacrificio de todo el imperio. ¿ Qué pasaría si llegará una enfermedad o una guerra? ¿De dónde creen ustedes que sacaríamos el dinero para costear medicamento, carpas caretas, armas? Hay que estar prevenidos, no siempre pueden estar a la espera de ser salvados por mi familia.

Si en un futuro llegará a pasar algo así y la fortuna de la corona ya no existiera por su culpa, yo haría las cosas muy sencillas, me llevo a mi gente, mis concubinos y ustedes defiendan a su imperio con zapatos y esculturas para el jardín.

Steven: Tú no serías capaz...

Abigaíl: ¿Querido todavía no entiendes? La Abigaíl tonta que conocieron ya no existe. No me considerabas capaz de tener un concubino y mírame ahora tengo diez.

Con respecto a usted Señor Monzón ya no es necesario sus servicios.

Señor Monzón: ¿Qué ? Disculpe, pero esa es decisión del emperador no suya...

Steven: Ya escucho a mi Emperatriz.

Tanto el señor Monzón como todas las concubinas quedaron impactadas por la decisión del emperador.

Señor Monzón: Majestad no se deje manipular podemos vivir sin su ayuda...

Abigaíl: Ja, ja, ja ¿Por cuánto? ¿Una semana? Al paso que van dejan en ruinas al imperio antes de que yo me vaya de este lugar.

Steven: Ya he dicho, señor Milton usted se hará cargo temporalmente de la tesorería hasta que encontremos la persona idónea para eso.

Sr. Milton: Claro majestad.

Abigail: Bueno dicho todo lo que se tenía que decir se pueden retirar de mi oficina tengo trabajo que hacer.

Las concubinas salieron de la oficina rechinando sus dientes estos no se quedaría así ellas harían pagar a Abigaíl por esto.

Una vez salieron Abigaíl se puso a trabajar y luego de una hora tocaron su puerta. Una vez dio el pase entro el hermano de esta.

Bastian: ¿Hermana estás muy ocupada?

Abigaíl: No (pasá). ¿Dime, que querías decirme?

Bastian: (Tomo asiento y dijo)Bueno dos cosas la primera que ya es hora de volver. No puedo seguir desatendiendo a mi imperio. Y la segunda es que Gael se quedará contigo, no confío que ya estés fuera de peligro.

Abigaíl: Bastian gracias. En este tiempo que estuvimos juntos pude apreciar lo que era tener un hermano mayor.

Bastian: Sé que nunca fuimos tan unidos como lo eres con Gael, pero yo te quiero hermana siempre contarás conmigo.

Abigaíl: Y tú conmigo, prometo ir a visitarte.

Bastian: Más te vale pequeño demonio, porque si no le diré a nuestro hermano que te lleve a la fuerza.

Abigaíl: Ja, ja, ja bien ¿Cuándo viajan?

Bastian: Mañana por la mañana.

Abigaíl: Perfecto nos queda tiempo para entrenar juntos.

Bastian: ja, ja, ja no, pero te quiero dejar a alguien que te va a enseñar todo lo que yo sé.

Esté se levantó camino hacia la puerta y abrió para dejar pasar a un soldado de su escuadrón de soldados.

Abigaíl: ¿Quién es el hermano?

_ Permítame presentarme majestad. Mi nombre es Cristofer Robledo capitán del primer ejército del imperio de Barcella y uno de los de guardias personales de su majestad Bastian.

Bastian: Y mi mejor hombre, quiero que se quede contigo. Él te enseñará a defenderte, pero también te protegerán en todo momento.

Abigaíl: {Por Dios ¿Zeus por qué me invitas a pecar? Controlate Luciana ya tienes once esposos, ya son suficientes. Aunque pensándolo bien nunca me dijeron hasta cuántos podía tener ... }

Bastian: ¿Hermana me estás escuchando?

Abigaíl: Mmm... ¿Sí que decías?

Bastian:(Levantó una de sus cejas y dijo) Nada que ya nos vamos.

Abigaíl: Me gustaría conocer mejor al caballero. ¿Le molestaría compartir un momento más conmigo?

Bastian: No (Este se levantó de su asiento y se acercó a su hermana para susurrarle.)

Él es solo un soldado no un futuro concubino compórtate.

Abigaíl: ¿Qué he hecho hermano?

Bastian: Te veo las intenciones, pero no, tienes que controlarte ya tienes muchos esposos.

Abigaíl: Uno más no me haría daño.(Dijo está con una sonrisa juguetona)

Bastian: ¿Qué haré conmigo? Bien me voy.(Dijo este para luego dejar solos a su hermana junto con el capitán)

Abigail: Tome asiento sir Robledo.

Cristofer: Así estoy bien majestades, bueno dígame ¿Qué quiere saber de mí?

Abigaíl: Mmm ¡Directo al grano he! ¿Bueno quiero saber si mi hermano te está obligando a quedarte o lo haces por voluntad propia?

Cristofer: ¿Enserio todavía no me reconoce? Sé que pasaron muchos años de la última vez que nos vimos, pero usted para mí no cambio mucho, sigue igual de bella que la última vez que la vi.

Abigaíl: ¿Disculpe? No entiendo a que se refiere.

Cristofer: ¿No? ¿Ya se olvidó de la promesa que nos hicimos?

Abigaíl: Perdí la memoria. No sé de qué promesas hablas.

Cristofer: ¿Cómo que perdiste la memoria? ¿Qué te paso?(Dijo este acercándose a ella, tomo su rostro y la miro fijamente a espera de una respuesta)

Abigaíl: {Humm… Interesante. Parece que Abigaíl no era una blanca palomita, este chico enserio parece preocupado y además tiene mucha confianza como para venir a tocar mi rostro sin importar nada. } Estoy bien luego del último intento de asesinato perdí muchos de mis recuerdos, pero esto nadie lo sabe y así quiero que se mantengan. ¿Ahora me podrías soltar?

Cristofer: Si claro, perdón. ¿Entonces no me recuerdas?

(Dijo este bajando su cabeza)

Abigaíl: No, pero cuéntame.

Cristofer: Tú y yo éramos amigos de niños. Prometimos casarnos cuando fuéramos adultos, Pero luego apreció ese mocoso y arruinó nuestra amistad.

Abigaíl: ¿Quién?

Cristofer: Ahora es el emperador de este imperio.

Abigaíl: Lo siento no lo recuerdo, pero debió ser duro para ti.

Cristofer: Ya no importa, solo quiero mantenerme a su lado permítame protegerla.

Abigaíl: ¿Podemos volver a ser amigos, si quieres?

Cristofer: Si Majestad, igualmente no perderé la esperanza de que sus memorias vuelvan y me vuelva a mirar como lo hacía antes.(Dijo para después tocar su mejilla con su mano)

Steven había vuelto a la oficina de Abigaíl para aclarar lo que había pasado antes de que llegaran las concubinas. Pero al abrir la puerta y encontrarse con esa escena enfureció.

Steven: ¿Qué significa esto?

Abigaíl: ¿Cuántas veces tengo que repetirle que toque la maldita puerta?

Steven: Este es mi palacio y yo puedo entrar a dónde quiera sin pedir autorización de nadie. ¿Tú...? ¿Qué carajos haces aquí?

Cristofer:(Este sonrió con burla y dijo) Soy el nuevo escolta de su majestad.

Steven: De ninguna manera.

Abigaíl: Ja lo único que me faltaba. A ver si dejamos algo claro, tú no eres quien para venir a dar órdenes, ni autorizaciones a nadie. Cristofer retírate por favor.

Steven: ¿Cristofer? ¿Desde cuándo eres tan cercana a él?

Abigaíl: Desde que éramos niños y por lo visto también lo recuerdas porque no tardaste en reconocerlo.

Steven: Si y por eso lo quiero lejos de ti. Él siempre quiso apartarme de tu lado.

Abigaíl: Y ya le pedí disculpas por no haberle hecho caso cuando me lo advirtió. Déjanos solos Cristofer, yo me encargo.

Cristofer: Pero no...

Steven: Que te largues ¿Qué no entiendes?

Esté miro a la emperatriz nuevamente y Abigaíl asintió. Volvió su mirada al emperador y salió.

Abigaíl: ¿Qué demonios te pasa ? ¿Qué son esas formas de tratar a la gente?

Steven: Me pasas tú ¿Me quieres volver loco? ¿Ahora lo trajiste a él para causarme más irritación?

Abigaíl: No sé que me hablas.

Steven: Lo sabes perfectamente.

Estoy llegando a mi límite Abigaíl no me provoques más porque yo también puedo cansarme de todo esto y...

Abigaíl: ¿Y qué? ¿Me vas a matar? ¿Matarás a mi gente, a mis concubinos? ¿Qué?

Yo llevo aguantando tus humillaciones dos años. Y jamás me quejé, tú llevas dos semanas ¿Y ya te cansaste de mi actitud? Pues lo siento querido Emperador, pero no pienso cambiar y volver a ser la misma idiota de antes.

Steven: Me equivoqué lo admito no me di cuenta previamente, pero no me puedes hacer esto yo ...

Abigaíl: Fue suficiente largo de mi oficina.

Stiven: No, vine aquí para arreglar nuestra relación y no me iré hasta que arreglemos está situación.

Abigaíl: Ya no hay nada que arreglar.

Esta no pudo seguir hablando, ya que tocaron la puerta y seguido entraron sus concubinos.

Gustavo: Majestad vinimos a buscarla para comer juntos como nos había prometido.

Bruno: ¿Pasa algo?

Calixto: ¿Se encuentra bien majestad?

Abigaíl: Si chicos estoy bien tranquilos. Bueno emperador ya escuchó tengo que comer con mis concubinos. Es bienvenido a acompañarnos.

Steven: ¿Qué ? No, yo no compartiré la mesa con ellos.

Abigaíl: ¿Por qué no? ¿Acaso yo no compartía la mesa con sus concubinas?

Steven: No es lo mismo.

Abigaíl: Ja lo que diga. Bueno cuando salga cierre bien la puerta chau.

Abigaíl tomo el brazo de Calixto y salió con una sonrisa burlona de su oficina. No entendía que le pasaba al emperador, pero parecía enserio estar celoso. Igualmente, eso a ella no le importaba, pero lo mantendría vigilado para prevenir que no le hiciera nada a sus concubinos...

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Comments

Noe Vilches

Noe Vilches

once es número impar y no es bueno, ahora doce es par y encima es una medida así que es aceptable uno más para que nos vaya bien 💅💅💅💅🤣🤣🤣🤣

2024-02-05

20

Marina Hinostroza

Marina Hinostroza

Ridiculus🤣🤣🤣🤣🤣

2023-12-02

5

KS

KS

🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣

2023-10-03

4

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