Capitulo 12

POV LUCIANA.

No otra vez ¿Morí? ¿Cómo puede ser esto posible? Justo cuando ya tenía armado mi harén. Ni un besito les pude dar.

Dios: ¿De eso es lo único que te lamentas?

Luciana: Tu piiiiiip Zeus. ¿Qué fue eso? ¿Por qué no puedo decir piiiiiip? Ahí está otra vez.

Dios: Aquí no puedes decir groserías respeta muchachita y ya te he dicho que me llamo Dios, no Zeus.

Luciana: Lo que digas jefe. Humm ¿Por qué estoy devuelta aquí?

Dios: Tú... no tienes remedio. Bueno volviste por qué te envenenaron.

Luciana: piiiip de piiiip si los llegó a agarrar voy a meter mi pie en sus piiiiiip.(Dios se acercó y tapo su boca con una de sus manos)

Dios: Que estés censurada no significa que los ángeles no entiendan que dices. No quiero después escuchar a mis niños hablar como camionero después de un choque.

Luciana:(Está frunció su ceño y lo miró)

Dios: Te soltaré pero te calmas.

Luciana: Humm... ¿Y ahora que haré, me mandaras a otra novela tonta dónde todos quieran matarme?

Dios: No volverás a la misma si es que encuentran rápido la cura.

Luciana:¿Y qué haremos mientras tanto?

Dios: Estarás en penitencia.

Luciana: ¿Yo? ¿Por qué? no hice nada.

Dios: Te parece poco mutilar a una persona.

Luciana: Ficticia.

Dios: Que sea un mundo de novelas no significa que no existan.

Luciana: Humm... ¿Bien qué tengo que hacer?

Dios: Te quedarás en ese rincón mirando a esa nube hasta que te salven.

Luciana: ¿Y si no me salvan?

Dios: Bueno tu contador está 6/4.

Luciana: ¿6/4?

Dios: Si 6 vas abajo 4 vas arriba.

Luciana: ¿Con abajo te refieres al infierno? ¿Qué tan malo puede ser?

Dios: Créeme que muy malo. Ahora al rincón y espera.

Luciana: piiiiiip Poseidón ya verás cuando vaya arriba te haré las peores travesuras.

Dios: Te sigo escuchando.

Luciana: Y yo le estoy rezando a Poseidón, tú me dijiste que te llamas Dios así que no te metas en mí rezó.

Dios: Tú... mejor no te presto atención eres peor que mi hijo Lucifer. Le gusta sacarme canas verdes.

Narrador omnisciente.

Abigaíl seguía delirando de la fiebre y balbuceaba cosas en medio de su delirio.

Abigaíl: Ya verás Zeus.

Norma: Pobre de mi señora la fiebre la tiene muy mal ya hasta balbucea cosas sin sentido.

_ Pobre emperatriz ella no se merecía esto.

Norma: La verdad que no, Ve a traer un poco más de agua fría para cambiar los paños.

Afuera de la habitación seguían los hermanos preocupados hasta que de repente llegaron los soldados con el médico.

Doctor: Tenían razón uno de los muertos tenía el antídoto en una de sus botas.

Gael: Corra ¿Qué espera para curarla?

Bastian: Esperé pruebe una gota usted.

Doctor:¿ Qué ?

Gael: Si tienes razón hermano. Pruébelo usted primero.

Doctor: Entiendo, está bien (Este coloco una gota en su dedo y se lo tomó) satisfechos si no se lo doy a la emperatriz puede que muera en los próximos minutos.

Bastian: ¿Qué hacemos hermano confiamos?

Gael: Es muy pronto para saber si es veneno, pero se lo tomó sin rechistar.

Steven: Es el Doctor Imperial yo confío en él.

Gael: Y nosotros no confiamos ni en los buenos días que das. Así que no hables.

Steven: Es mi esposa.

Gael: Como también lo es medio imperio, ¿Por qué no vas a molestar a alguna de tus mujeres? Mi hermana no te necesita.

Steven: Tú...

Bastian: Silencio no es momento Gael. Doctor proceda.

Esté solo asintió y entro a la habitación a darle el antídoto a la emperatriz.

POV LUCIANA.

Luciana: uf ¿Cuánto más van a tardar? Llevo semanas aquí.

Dios: El tiempo aquí es relativo. Cómo te has portado bien voy a mostrarte algo.(Dios creo una especie de espejo y este empezó a mostrar imágenes después de que ella murió.)

Ya encontraron la cura para tu veneno, en cuanto termine de reproducir esta especie de vídeo volverás. Adiós hija y espero verte cuando ya seas muy mayor y hayas vivido.

Luciana:(este desapareció) Le gusta hacer de mago a este desaparece y aparece cuando quiere. Después no le gusta que le diga Loki.

Esta se calló al ver la pantalla espejo que Dios le había dejado. Ahí mostraba como su hermana la mataba y que a los minutos llegaba otro auto, de ahí bajaba su padre y al verla en el piso corrió hacia ella y mientras lloraba la abrazo.

_ ¿Qué hiciste Tamy?

Tamy: Padre quería que estuvieras feliz por mí, por fin voy a ser digna del liderazgo de la mafia.

_ No tú nunca serás la líder. Lu, Lucí no juegues con papi, abre los ojos. NOOO… MALDITA. Te mataré.

Esté saco su arma y se la vació en el pecho y mientras está agonizaba dijo.

_ Tú no eres mi hija por eso no eras digna del liderazgo.

Tamy: Padre… cof… cof… Yo y…

_ Te odió me quitaste lo más preciado para mí.

QUIERO QUE MATEN A TODOS...

Luciana: Padre (llorar)

¿Dios lo volveré a ver?

Dios: ¿Ahora si sabes mi nombre?(Este al verla así dijo) Eso dependerá de ti si lo haces bien te concederé un último deseó ahora vuelve.

Narrador omnisciente.

No le dio tiempo a contestar, ya que está empezó abrir sus ojos ya era un nuevo día.

Norma: Señora despertó. Gracias a dios les avisaré a sus hermanos.

Esta salió de la habitación y no tardaron nada en entrar Gael, Bastian y Luna.

Luna: ¿Abi como te encuentras? Me tenías muy preocupada.

Gael: ¿Hermana está bien como te sientes?

Abigaíl: Agua.

Bastian: Ya te doy hermana. (Esté se acercó con un vaso con agua y la ayudo a sentarse para beberla) ¿Estás mejor?

Abigail: Si me siento bien. ¿Cuánto llevo dormida?

Gael: Todo un día.

Bastian: Si estuvimos toda la noche cuidándote. Hermana debemos irnos de aquí si te quedas te matarán.

Abigaíl: No.

Gael: ¿No? Casi te matan. No sabes lo que pasamos anoche fue horrible verte en esta situación.

Abigaíl: Lo siento hermano, pero no me iré. Yo no soy una cobarde no le daré el gusto a esas ratas de verme destruida y ahora mismo pondré el ejemplo.

Gael: ¿A qué te refieres?

Abigaíl: ¿Dónde está el prisionero?

Bastian: En los calabozos.

Abigaíl: Vamos.

Luna: Abi recién despiertas creo que es mejor que descanses.

Abigaíl: Lo haré cuando allá terminado con esto. Vamos o voy sola. (Esta se levantó de la cama débil todavía, pero se paró derecha y así como estaba se puso una bata y salió de la habitación rumbo a los calabozos)

Al llegar se encontró con el asesino y con la familia del marqués Castillo completa.

Abigaíl: Pero miren nada más que lindo regalito que me tenían mis hermanos.

Marqué castillo: Tú... imposible él dijo que morirías.

Abigaíl: Pues te tengo una noticia ya morí y dos veces. Pero como soy una de los favoritos de Dios me devolvió. ¿Y sabes que me dijo? Has justicia.

Marqués Castillo: Estás loca (dijo esto con miedo de la cara de sicópata que tenía está) Tú te pague bastante bien para qué la matarán.(Dijo mirando al asesino)

Abigaíl: ¿Lo escucharon no es así?

Salieron de la sombra el ministro de Guerra y su hijo, junto con los otros concubinos. Quienes estaban esperando en la sala para saber cómo estaba la emperatriz, pero al verla bajar y preguntar dónde se dirigía, decidieron seguirla.

Abigaíl: Perfecto nadie me puede culpar por lo que vendrá ahora. Los que sean sensibles que se retiren, esto es solamente para chicos grandes.

Ninguno de los concubinos se retiró ni mucho menos sus hermanos.

Abigaíl abrió la celda y entro el marqués junto con los demás estaban encadenados a la pared. Esta vio un baúl a un costado lo abrió y sus ojos brillaron.

Abigaíl: Oh por dios, estos juguetes son hermosos. Voy a divertirme como nunca.

Marqués Castillo: ¿Por qué nadie hace nada? no la dejen acercar, sáquenlo de aquí.

Abigaíl: Ja, ja, ja ay mi querido marqués pudo haber vivido una vida plena gozar de salud y vivir hasta los cien años si quería. Pero no, usted me busco y yo soy muy fácil de encontrar. Veamos (Dijo está buscando en el baúl encontró una especie de garras de tres dientes sonrió y dijo) Empecemos con este.

Se hacerlo a este y sin darle tiempo a nada rasguño su pecho causando tres heridas profundas.

Abigaíl: Hay por Dios las amo.

Marqués castillo: AAAAAH maldita.

Abigaíl: Humm… Y no aprende haber otra vez (dijo repitiendo el mismo procedimiento) Emperatriz o majestades para ustedes.

Marqués Castillo: Aaaaaah cuando salga...

Abigaíl: ja, ja, ja y todavía cree que va a salir. ¿Escucharon eso, chicos?

Esta se dio vuelta y se encontró con la sonrisa macabra de más de uno solo uno de ellos estaba serio y ese era el ministro el padre de Calixto.

Abigaíl no le tomo importancia y siguió torturando al marqués en frente de su esposa y su hija la concubina Maribel.

Cuando se cansó dijo.

Abigaíl: Uf todavía no me recupero bien. Ya me cansé, pero volveré mañana y el día siguiente y el siguiente y el siguiente hasta que ya no respires más.

Maribel: Emperatriz por favor piedad mi padre...

Abigaíl: El mando tres asesinos anoche a mi habitación y además de atacarme me envenenaron. Si no fuera por mis hermanos estaría muerta ¿Y quién pediría piedad por mí a?

Agradezca que únicamente lo torturó a él y no a ustedes.

Vamos hermano ya me cansé.

Gael: Yo te llevo hermana (dijo este tomándola en brazos y sacándola de ahí)

Bastian: Disculpen caballeros, pero como verán mi hermana no se encuentra bien tendrán que venir a visitarla otro día.

Estos también se retiraron del lugar y Calixto y su padre se dirigieron a su carruaje. En el camino esto iban mudos hasta que el padre de este rompió el silencio.

_ Seguro que te quieres casar con ella. Ya la viste es una asesina nata pude ver en sus ojos cuánto disfruto cada grito de dolor. Si te equivocas y la engañas puede que el torturado seas tú.

Calixto: Por eso la quiero como mi esposa padre. Ella es diferente me recuerda a madre.

_ Tu Madre era macabra no te lo negaré, pero esta niña lo llevo a otro nivel.

Calixto: Digas lo que digas mi decisión está tomada.

Luego de eso no hablaron más ya que el ministro vio lo convencido que estaba su hijo de casarse con la emperatriz...

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