Capítulo 4

Uni a varias almas gemelas pero jamás encontré la mía. En toeria se todo lo que podría saber acerca de las sensaciones que sienten las almas destinadas a estar juntas al encontrarse pero en práctica sólo se que no he podido jamás experimentarlo.

Debo tomar una decisión pero no estoy lista para volver a vivir, prefiero desde aquí ver la felicidad y el brillo de las otras almas afortunadas así yo deje de brillar en el proceso.

Comprendo que no siempre podemos encontrarnos con quién debemos porque el tiempo es impredecible y hay muchos factores que pueden cambiarlo o alterarlo.

Nos mandan a la tierra a nacer cuando es el momento pero no siempre son buenas vidas o buenas familias en las que nos toca vivir.

Podemos ser hijos o hijas deseados o no, producto de violaciones, accidentes y hasta aveces morir antes de llegar a dar nuestro primer respiro.

Tenemos diversos nombres, apellidos, colores de piel que van desde oscuro como la noche y blanco como la nieve. Diferentes cuerpos, pero el alma siempre es la misma aunque muchas veces hay factores que pueden alterar nuestra percepción de las cosas y cambiar nuestro accionar.

Mi propósito fue ayudar a los demás y unir parejas.

Nadie aquí se explica dónde puede estar mi alma gemela porque si soy un número inferior al doscientos mi alma no tendria que ser un número mucho mayor, aunque hay muchas excepciones. Solo lo sabré el día que la encuentre y puedan mostrarnos por qué no nos encontramos jamás antes.

Las personas reaccionan de diferentes formas ante su alma gemela. Hay algunas que sienten una especie de repulsión hacia ellos pero la fuerza los acerca. Hay quienes los describen como imanes que se atraen. Hay otros dónde les cuesta reconocerse porque su visión se encuentra nublada por los acontecimientos que les ha tocado vivir hasta el momento y otros que simplemente lo describen como amor a primera vista.

En lo que todos coinciden es que una vez que se reconocen nada logra romper la conexión que sienten jamás y si por algún acontecimiento se separan o son separados el destino se encarga de volverlos a unir.

Se de muchas historias hermosas de amor pero jamás viví la mía. Amé a muchas personas a través de los años y tuve cientos de amigos y familiares. También tuve contactos íntimos con personas por decisión o bien por obligación pero no sentí más nada de lo que han descrito ni en ese instante.

Antes por dónde caminaba iluminaba pero ahora ya me pierdo entre las sombras fácilmente. Dicen que las almas tan blancas son poderosas porque pueden llevar a la luz a las más oscuras y tenebrosas.

Lo hice algunas veces en una de mis tantas vidas pero ahora que la mía se apaga nada puede volverla a la luz ya que es algo que nace de mi y solo yo puedo cambiarlo.

Me encuentro pensando si vale la pena volver a vivir. Llego a la conclusión de que no pero una parte de mi alma aún siente la esperanza de que mi alma se encuentra buscándome en la tierra y de que si no voy deambulará sola hasta que su tiempo de vida se agote.