Principe perdido

Fabian y sus planes

Mis hombres están listos para capturar a ese niño mimado y engreído.

No veo las manos de hacerle pagar sus desplantes y su vanidad.

Le haré pagar su atrevimiento de acercarse a mi prometida a mis espaldas.

Y el reino del Dragón pagará su negativa a rendirse a mis pies.

Mis hombres tienen órdenes de jugar con él . Pero no matarlo no aún.

A la que en este momento quiero matar con mis propias manos es a Irina. Ella se atrevió a mezclarse con ese pomposo y no voy a perdonarselo.

¿ tal vez ella y él no llegaron tan lejos?

Si hay algo a mi favor con ella es su orgullo, ella no se ha unido a él o ya hubiese usado esa unión en mi contra.

¿Qué pretendías con todo esto Irina?

¿Cuál es tu juego?

- Manden a buscar a la princesa Irina - ordeno a mis hombres- quiero que ella vea con sus propios ojos como destruyo a golpes a ese príncipe mimado- ya .

Camino feliz al fin mi reino está afirmándose y nadie podrá contra mi poder.

Espero feliz ver su cara cuando sepa que acabo de arruinar sus planes.

Minutos después mis guardias llegan y solo me enfurecieron.

- Lo sentimos, su majestad, pero no hemos podido encontrar a la princesa por ningún lugar en el palacio. Nadie sabe decirnos donde está.

Esto solamente es un contratiempo cuando la tenga en mis manos voy a disfrutar apretando su frágil cuello.

Caspian en el boque

Ella es así tan especial. Hoy es el primer día del mes debe presentarse a entrenar.

Pensar en ella y en la forma en que gira y se mueve cuando combatimos es la unica capaz de borrar de mi mente a esa princesa atrevida.

Bajo de mi caballo y todo está tan silencioso. Sé que no debería de haber engañado de esa manera a Ariel y escaparme pero no lo quiero cerca husmeando en mis asuntos.

Y la estudiante misteriosa es mi asunto. Hoy voy a obligarla a sacarse la máscara, quiero ver su rostro.

Vuelvo a mirar a ambos lados del camino y resulta extraño no ver a Justo preparando las armas.

Entonces la veo a lo lejos . Está de espalda.

Puedo ver su cabellera.

Ella parece notarme porque veo que gira la cabeza pero no puedo verle el rostro.

Voy a seguirla

-Esta vez no te me vas a escapar.

Me río de mi suerte. La veo comenzar a correr.

Decido seguirla.

Cuando siento que estamos más cerca estiro mi mano para agarrar su cabello y cuando lo sujeto se desprende de su cabeza.

¿Qué mierda es esto?

Ella voltea pero sus ojos no son iguales a los que recuerdo.

Sus ojos son avellana.

- ¿ quién eres?

Ella tiene el cabello castaño y ojos avellana, también una sonrisa macabra en sus labios.

- Caíste...¡ guardias!

- ¿ qué?

Entonces los veo . Estoy rodeado de soldados , no cualquiera sino los de Fabián.

Esto es una maldita trampa y acabo de caer en ella.

- ¿ que creen que están haciendo? Exigo respuestas.

- yo solo sirvo a su majestad el rey Fabián- dice ella muy feliz- pero si quieres respuesta o una culpable deberias de saber que quién te traicionó fue la princesa Irina. Fue ella quien te traicionó y jugo contigo todo este tiempo.

- ¿ la princesa Irina?¿ de qué estas hablando?

- Guardias.

Ella parece molesta y no me contesta .

Los guerreros se van acercando y empiezo a combatir con ellos pero son demasiados.

Esto es una mierda. Si realmente la princesa Irina está metida en todo esto juro que la haré pagar.

Nana e Irina

En estos momentos ambas están escondidas en un cuarto secreto dentro del palacio.

Nana estaba muy débil para poder huir y no había tiempo antes de que Fabián mandará por ellas.

- No quiero esto.

Protesta Irina mientras camina de un lado a otro dentro de la pequeña habitación.

- Lo sé... pero por ahora es lo mejor.- Nana mira preocupada - pero Fabián ya debe saber de tus encuentros con el príncipe.

- Pero no fueron del tipo de encuentro...

- Él solo sabe lo necesario para usarlo en tu contra, lograste burlarlo y eso debe ser lo que mas le molesta. Va a querer la vida del principe por esta afrenta.

- ¿ qué? ¡No! Entre nosotros no sucedio nada .

- Estás comprometida y te has estado encontrando con otro hombre a escondidas .

- Nana, yo no puedo permitir que lo lastimen por mi causa. Fabián quiere usarlo para derrotar al rey Mirko.

- y se lo has entregado en bandeja.

- Entonces tengo que salir y ayudarlo.

- Eso solo complicaría más la situación.

- No pienso quedarme escondida mientras alguien más sufre por mi culpa. El príncipe Caspian no puede no voy a dejarlo.

Irina está al borde de las lágrimas y loa nervios en sus manos hace que le tiemblen.

- Ya encontraremos la forma de ayudarlo por ahora intenta quedarte quieta, recuerda que Albino prometió tenernos al tanto de todo.

Nana tienen muchos amigos, personas a las que ayudo en el pasado y que le juraron lealtad. Entre ellos está Albino uno de los guardias del palacio a quien ayudo hace unos años.

Su mujer estaba muy grave y eso complicó su trabajo de parto y Nana fue a atenderla y luego de unas hierbas ella pudo dar a luz al niño sin problemas.

Al día siguiente las noticias que trae no son para nada alentadoras.

- El príncipe fue capturado. Aunque intento defenderse loa guardias lo superaron en número.

Irina casi se desmaya ante las palabras de Albino.

- ¿está vivo?

- Ellos tenían órdenes de traerlo con vida.

Irina apreta aus dientes y su puño para no gritar y llorar . Esto nunca debio de suceder.

Debo salvarlo.

Nana niega con la cabeza. Sé que ella ya está pensando en algo pero no me dice nada. No voy a soportar esto por mucho tiempo si por mi culpa muere Caspian no no puedo pensar en eso en este momento.

- Creo que deberían huir a las zonas más cálidas.

- No puedo dejar que Fabián siga haciendo daño.- intento protestar.

Las palabras de Albino suenan pero ninguna decimos nada sobre abandonar el palacio.

- Yo también pero si nos vamos nadie podrá ayudar al príncipe- dice Nana- nos iremos, pero antes debemos asegurarnos de que el príncipe no muera a manos de Fabián.

-Mi primo va a querer usarlo para negociar con su padre- suspira Irina- pero Fabián nunca juega limpio.

Irina está segura de las intenciones de su primo y ahora que nunca debe detenerlo aunque primero está ocuparse de Caspian.

"Resiste, se que te metí en esto pero nunca fue mi intención perjudicarte"

- Debo irme.

Albino se va no sin antes escuchar las hierbas y pociones que debe traer para ayudar al prisionero.

- Deberíamos contactarnos con Eugenio.

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