Cap. 6 No seas atrevida

Sasi termino de tragar el bocado de comida para expresar su inconformidad.

Entiendo, pero también puede irse y así no tendrá que soportar mi celo _ Sasi habló con frío, estaba de verdad molesta en ese momento y más aún con su comentario estupido.

El Alfa la miró y enfureció, lo estaba echando de nuevo y no le agrada su actitud retadora, esa omega parecía no querer ser una Luna y menos una amante que es lo que él quiere que sea, podría irse y declarar como Luna a una loba de buena cuna y que sea una hembra Alfa para después regresar y llevarse a Sasi como su amante que es lo que se suele hacer cuando un Alfa de alto rango tiene una omega de Mate pero Sasi es diferente así que solo puede dominarla mientras esté en celo.

Sasi, no seas atrevida, no me voy y punto, eres mi mate y solo yo puedo decidir si te rechazo \_ habló apretando los dientes, ella es de verdad exasperante a momentos, deja de ser complaciente y hace comentarios impropios para una omega inferior.

Sasi se molestó aún más y se fue a la cama aún mareada por su celo, ella solo quiere que se vaya, su conexión es más fuerte y siente que le duelen cada vez más sus palabras.

El hombre apretó los puños al verla levantarse sin respeto y dejarlo hablando solo en la mesa así que se levantó con calma, puso los platos en la rústica cocina y los lavó cuidadosamente y cuando terminó se fué hacia Sasi como un demonio tomándola de la cintura y su otra mano la puso en su nuca y la beso salvajemente, mordió sus labios hasta que se hincharon y ella soltó un gemido de dolor.

Él le dio unas nalgadas haciéndola sisear de dolor mientras sus lágrimas se formaban en sus espectaculares ojos y él vio detenidamente cada cambio y reacción para declarar de forma soberbia.

Sasi, eres mía, mi mate, no te atrevas a retarme por que te voy a castigar y me voy a deleitar haciéndolo. \_ El Alfa le quitó la ropa y él se desvistió en el acto mientras volvía a entrar en ella desesperado, hambriento de su cuerpo y su humedad.

Sasi trato de separarse pero no puede, cada toque la desmorona en un precipicio de lujuria y calor que la hace ceder ante cada toque y disfruta cada movimiento.

Los dos días siguientes pasaron de la misma manera, él cocina, lava, trae leña y cuida a Sasi que aun esta debil y mareada por su celo, obviamente él no se ha restringido de comerla todo el tiempo que puede, ha devorado cada parte de su cuerpo incluyendo su hendidura y su punto sensible haciéndola tener estrepitosos clímax y él ha tenido un doloroso falo que está enrojecido por la fricción y la constante erección.

Sasi está en iguales condiciones o peor, su entrepierna está irritada de la fricciòn aunque siempre esté húmeda y su hermosos cuello está amoratado de forma notoria por marcarla cada vez, el hombre no entiende cuál es su necesidad de marcarla tantas veces, solo sabe que su lobo está enloquecido por el celo pero la ha marcado más de 5 veces y ella ya está adolorida.

Cuando el celo de Sasi pasó, ella se fue a bañar al rio, el clima esta enfriando pero un baño de agua fria de manantial no le vendria mal, ademas de poderse alejar de ese lobo petulante que se ha aprovechado de ella durante tres largos dias de sexo.

Cuando Sasi volio a la cabaña vio que el Alfa habia terminado de cocinar el almuerzo y salio con una toalla par ir a bañarse, ambos olian a sexo por todos lados y Sasi habia dejado ese olor exuberante para volver a su olor de siempre.

Sasi no lo esperó y comió sola, después de eso se fué a cazar, ella solo quería alejarse de él, sentía una aflicción cuando él la trataba mal y sabe que es el vínculo pero no le agrada sentirse así.

Cuando volvió a la cabaña parecía que no había nadie y entró sintiéndose feliz pero ansiosa y cuando estaba a punto de cerrar la puerta el Alfa la acorraló contra la pared mientras la miraba con reproche.

¿Cómo te atreves a comer sin mi y después salir sin mi permiso?, ¿de dónde sacas el valor para desobedecerme y pensar que puedes hacer lo que quieras. _ lo dijo en casi un gruñido.

Sasi se mordió el labio inferior sin saber que decir, pero antes de que abra su boquita él la beso fuertemente haciendo que se asuste, ella se removió tratando de alejarlo pero él declaró algo que la dejó petrificada.

Sasi, pequeña omega, obedece, no quiero pelear, dejame cuidarte, yo quiero estar contigo, solo deja de ser tan rebelde. \_ la voz del hombre era suave y sensual, había una calidez notoria en su tono de voz, Sasi se quedó sin palabras, su corazón latió salvajemente y se sintió un poco conmovida.