Mi Salvaje Concubina
Frente al espejo, observaba su imagen, y la de su hermana arreglando su cabello, mientras que en sus pensamientos, ella no podía evitar recordar a sus padres. En ese momento, sintió una punzada en su cabeza.
- Hayyy, Mina! Por Dios, que estás haciendo a mi cabeza! - Exclamó Melia, sobando su cráneo.
Mina sonrió. No le iba a confesar a su hermana que lo había hecho a propósito. Ella había observado lo distraída que estaba Melia. La sonrisa que la caracterizaba se había apagado, los párpados de sus ojos estaban decaídos.
Habían pasado trece años desde que habían fallecido sus padres. Pero Mina sentía que su hermana no lo había superado. En los días antes del aniversario de su muerte Melia solía entristecerse.
Era ese el principal motivo por el que había hecho bajar a su hermana de la montaña sagrada para que se pasaran unos días con su tía Ramelia. Que Melia se distrajera, era su objetivo.
- Por qué, por qué... Por qué tengo que ponerme este estúpido vestido, y estos adornos metálicos en la cabeza... Mírame!... Es la ropa que suelen usar las damas de los cinco reinos... - expresó Melia haciendo gestos con su cara.
- Bueno... mmmm... Yo tampoco sé mucho Melia . Lo único que sé, es que tía
me dijo que está noche, íbamos a recordar las normas de los reinos que nos
enseñó cuando éramos niñas...
- No puede ser... En serio? No. No puede ser. Esto va a ser agotador... No quiero, no quiero, no quiero... -contestó bajando su rostro y colocándose la mano en la cara en señal de fastidio.
- No te preocupes Meliá... No es tan malo... ¡Es solo una cena, Por Dios! No seas tan dramática hermana... Hagámoslo por tía Ramelia... Ella, tal parece, que tiene unos invitados de uno de los cinco reinos... Contestó Mina con algo de diversión en su tono, mientras sonreía, tratando de
animar a su hermana.
*********
- No te preocupes... Todo va a salir bien... Vas a ver como las gemelas se van a comportar de acuerdo a la ocasión... Ya instruí a Mina para que me
ayudara a que Melia tuviera el adecuado comportamiento... - dijo Ramelia a su esposo.
- Ramelia, tú conoces a Melia. Ya sabes que ella no se anda con rodeos para expresar lo que piensa... Es tan... Salvaje... Crees tú que realmente se pueda someter... - Le contestó Kroner frunciendo el ceño.
Ramelia lo llevó a sentarse en unas bancas del jardín y masajeo los hombros de su esposo:
- Tienes que relajarte... Te estás imaginando el peor escenario. Que tal que cuando Melia conozca a alguno de tus dos sobrinos, se gusten y nazca
un bonito amor...
Kroner se levantó sobresaltado, abriendo sus ojos y frunciendo el ceño. El imaginarse que a
alguno de sus dos sobrinos, llegara a gustarle Melia. Sería desastroso. para Kroner, ninguna mujer en tierra de Ranson podrían aspirar a ser siquiera una concubina de segundo nivel para sus sobrinos.
- Ramelia... No te imagines cosas que nunca van a pasar... La educación de mis sobrinos es selectiva, y bueno, mmmmm.... Tus sobrinas ni siquiera tienen educación...
Ramelia lo miró con desaprobación. Al instante se adelantó dejándolo solo en el jardín.
En esos momentos llegaron los príncipes. Kroner se había dado cuenta que su esposa se enfadò. Pero al ver a sus sobrinos no le dio mayor importancia. Les hizo la tradicional reverencia y les dijo:
Sus altezas, espero sea para ustedes aunque sea un poquito tolerable mi humilde casa.
- No se preocupe tío real. Hemos deambulado por Casa Alada. Sin duda alguna, su casa es de las mejores del lugar... - Contestó Kramin, el sobrino menor.
- Les agradezco su amabilidad... Se que la estancia aquí es apenas tolerable... Es por eso que esta noche he preparado para sus altezas los tres deleites reales...
Con las palabras que su tío Kroner les dirigió, los príncipes
comprendieron que hacía referencia, a una de las más viejas tradiciones de
Kandor. Buena comida, buen vino y para postre, una mujer virgen. El manjar que todo hombre en los cinco reinos vivía para disfrutar.
Las normas exigían que los hombres podían y tenían el deber de explorar su sexualida con más de una mujer. Quien se aferraba a tener una
sola mujer en su vida era considerado como un hombre débil.
Kailer, quien era el principe heredero, era amante de la perfección. Era altivo y engreido y muy controlador. Su prepotencia lo llevaba a pensar que él era el mejor entre todos los principes de los cinco reinos. Y en referencia a las mujeres, hasta el momento en todos sus 26 años de vida, no había habido una que se resistiera a sus encantos. En toda su vida no había hecho jamas el esfuerzo de dirigirse a una mujer ni para hablarle, ni para tener algun gesto con ella. Hasta ese momento, no había existido alguna que le llamara su atención de manera diferente a las otras.
Kroner los condujo al lugar en donde se llevaría a cabo la cena. AL llegar, ya Ramelia y sus hijos estaban en el lugar. Fue en ese momento, que Mina y Melia llegaron a la estancia.
Ellos fijaron sus ojos en ellas y abmiraron la belleza de las gemelas. Imaginando, que ellas eran la tercera parte de los deleites reales, que su tío les había prometido.
Kroner se adelantó, y enseguida dijo:
- Su Alteza, príncipe Heredero Kailer, y su alteza, príncipe Kramin, del reino de Kandor. Estas jóvenes aquí presente, son las sobrinas de
Ramelia, Melia Co y Mina Co.
Kailer fijo sus ojos en Melia. Por alguna razón llamó mas su atención ella. Kramin a su ves, miró a Mina, quien desde que la vio, le había impresionado.
Melia no podía creer lo que escuchó. "Un príncipe. - "Como había dicho. Esta será una muy cansada noche" - Susurró entre dientes.
- La señorita dijo algo? - Le interrogò Kailer, con sus ojos fijos en ella. Pero ella no le rehuyo la mirada. Se la mantuvo de una manera retadora.
Mina, que había escuchado con claridad lo susurrando por Melia, le agarró la mano y la obligo a hacer una
inflexión, mientras dibujaba una sonrisa, interrumpiendo en ese momento el aire tenso, que se había creado.
- Sus altezas, nos sentimos honradas de poderlos conocer, expresó Mina.
- Está bien. Sus altezas, por favor tomen asiento. Intervino Kroner con algo de nerviosismo.
Melia observó, como los dos engreidos principes, se sentaban primero que ellas. Eso le hizo sentir fastidio en su ser. Era una estupides, que no pudieran sentarse todos al mismo tiempo, solo porque una norma lo dictara. De hecho, toda la escena para ella,
era humillante.
El tener que regir su forma de actuar a normas tan arcaicas.
Solo, por la presencia de ellos, les quitaba, todo el encanto, que los príncipes pudieran tener.
Eso, sumado a la postura corporal estresante, que tenían ellas que tener, sin poder optar, por una posición que les resultase mas comoda, la irritó.
Mientras que ellos conversaban, la desesperanza la abrumaba. Quería poder tener un poder, para pasar la página, lo más rápido que le fuese posible.
Quería poder opinar sobre los temas de que hablaban, para que ellos se dieran cuenta, que ellas tenían también entendimiento sobre politicas y conflictos sociales.
Cerró sus ojos, y empuño sus manos, maldiciendo por dentro, las cabezas, que desde la antigüedad, establecieron dichas normas.
- Tío, me he apercibido que es muy apropiada la educación que le has dado a estas damas, sobre las normas y costumbres de Kandor... Su comportamiento
es apropiado y la ropa es decorosa y elegante... Quien se iba a imaginar que en
Ranson, donde viven mujeres salvajes, que no tienen la mínima idea de vestir
adecuadamente, pudiéramos haber encontrado estas bellas doncellas...
Melia, sintió que un fuego le subía de su interior.
"De dónde, este egocéntrico príncipe saca tantas estupideces" - se preguntó. Como se atrevía él, a afirmar, que la forma de vestir, sencilla y sin complicaciones de la gente de esta tierra, era salvaje.
Mina agarró sin que nadie lo notara, la mano de su hermana, apretándola duro. Ella sabía que Melia estaba
a punto de debatir con fuertes argumentos, el pensamiento del príncipe
Kramín.
-Todo esto su alteza, ha sido gracias a la benevolencia de la madre real... Cuando Ramelia fue aceptada como concubina, fue la misma madre, quien se encargó de que Ramelia aprendiera - Contestó Kramon.
- Sin duda alguna, nuestra abuela, tío real, fue tu gran benefactora. Te permitieron que una simple concubina de segundo nivel fuera tu esposa. Eso es algo que no tiene precedente. Aunque debo admitir que él preció que tuviste que pagar fue demasiado grande. No creo que algún príncipe en los cinco reinos, esté dispuesto como tú, a renunciar a su derecho real, solo por una mujer, y no una normal, sino una salvaje...
Las gemelas se miraron... Melia no podía disimular su enojo. Su rostro se fue tornando rojo. Que una mujer no valía, que un hombre renunciara a riquezas y prestigio por tenerla...? Que si era alguien de Ranson lo valia menos...? Qué somos anormales...? Melia quería matarlo. Ese estupido proncipe arrogante y soberbio no tenía idea, de lo que valía una mujer.
-Me perdí... Realmente no comprendo a que se refiere cuando dice, Que una mujer de Ranson es salvaje. Y lo que entiendo menos...
- Melia, se que no te sientes muy bien... Te agradezco que hayas hecho el sacrificio de acompañarnos... Mina por favor acompaña a ru hermana a su habitación... - Interrumpió Kroner
Cuando el tío Kroner le dijo eso; Mina agarro fuerte el vestido de su hermana, sin que nadie lo notara, y sin dar tiempo a la respuesta de Melia
a su tío Kroner, dijo, levantándose de la mesa:
- Que disfruten de la comida... Hizo una reverencia y
agarró a su hermana por la mano. Esta sin oponerse se levantó dibujando en su
rostro, una inconfundible cara de enojo, y de inmediato se marcharon.
Al partir las gemelas, en la mesa se hizo un silencio incómodo. Tanto
Kramin como Kailer se preguntaron que pasaba? porque ella había tomado esa
actitud y Después de unos momentos, la cena continuo. El tío de los príncipes hizo lo posible, por seguir entreteniéndolos con su charla.
Ramelia al igual que sus hijos, también pudieron disimular muy bien el descontento
que sentían, por el trato que Kroner, les había dado a las gemelas, al echarlas
de la mesa.
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Comments
Irma Rocha Cruz
y qué esperaba.... que se quedarán... capaz que se armaría una trifulca.....
2023-11-17
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Irma Rocha Cruz
oh oh....ni que fuera mercancía.....
2023-11-17
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Sol Cito
esos príncipes son unos idiotas y el tío peor xq no supo defender a su esposa
2023-11-08
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