Reyna De Un Magnate.

TODO EMPEZÓ....

mi nombre Zaira vivo en un pueblo de mala muerte a mis apenas 15 años mi madre Me da la peor noticia ella me ha vendido a un Magnate desconocido solo se sabe de él Qué es un hombre cruel despiadado mujeriego y que no toma enserio ninguna mujer me encuentro en la sala de mi pequeña casa cuando entra mi madre.

-¿porque aún no estás lista?

- mamá por favor, no quiero ir con ese hombre.

- no te pregunté, no eres más que un estorbo, te espero en 10 minutos.

sin más se va, y mis lágrimas empiezan a caer no se como puede ser tan cruel, no dejo te pensar que será de mi con ese hombre tan malvado. subo a mi cuarto y me baño después me visto con un vestido rojo que mi mamá me compró, es la primera pieza de ropa que estrenó, mi madre siempre me dio las sobras de comida y ropa...

sin más bajo ala sala donde me espera mi madre, con esa mirada de odio que siempre he visto desde que tengo uso de razón.

- nos vamos.

- pero mamá yo puedo trabajar, servirte comida. pero no me lleves con ese hombre por favor.

- ja ja ja. el magnate me dará millones de dólares, cres que te cuide tantos años para que termines de prostituta como yo en un maldito bar? deberías pedir perdón por haber arruinado mi vida.

sin más me arrastró hasta el taxi que nos esperaba afuera. en el estaba don lino, un hombre de aproximadamente 45 años "era el enamorado de mi madre" al cual ella utilizaba a su antojo, el siempre me protegió cuando mi madre intentó golpearme e incluso me llevaba dulces cuando mi madre me encerraba. pero esta vez no dijo una sola palabra, solo se encargo de conducir hasta el hotel más grande.

mis manos sudaban y no tenía color en la cara, mi madre solo me jalaba del brazo clavando sus dedos dejando marcas Rojas en mi Delgado brazo, yo no sentía un dolor más bien era el miedo el que me paralizaba sin atreverme a dar un paso por mi misma. salimos del ascensor en el tercer piso donde estaba la suite más cara y de lujo había hombres vestidos de negro en todo el piso.

uno de los hombres no dirigió ala habitación, abrió la puerta estaba vacía pidió que entrara y esperara a su jefe ahí, mis nervios aumentaron, mi madre me dio una última mirada y se fue yo quería correr detrás pero cerraron la habitación en seguida.