CELOSO.

Todo iba perfecto hasta que volví, estaba tan metido en mis proyectos que olvide por completo la vida que había dejado, ver Alison me trajo de vuelta, verla tan hermosa como siempre, con sus ojos sin ninguna clase de emoción, me hizo dudar de lo que estaba haciendo.

Que estará sintiendo, fue mi pregunta en todo el día, debía hablar con ella antes de traer a Susana, Alison es una mujer que oculta bien su sentimiento, así que es casi imposible descifrar lo que siente, pero sé que debe estar decepcionada, pues aparte de lo que hacíamos en la cama éramos amigo, confidente, nos contábamos todo y nos aconsejábamos.

Salí de la oficina, lleve a Susana su hotel, luego me dirigí a mi apartamento, Alison podía llegar así que debía preparar algo delicioso para disculparme.

Sé lo mucho que le gustan las pasta así que le hice unas deliciosas pastas con salsas pesto.

 Todo estaba listo, pero ella nunca llego, que estaba esperando sí que soy imbécil, era obvio que no vendría.

Llame, pero no contesto, así que tome la decisión de ir a su apartamento.

*

Alison se desahogó con sus amigos y tomo de más, casi hasta perder la consciencia Así que fue llevada a su habitación, Jonathan quien la cuidaba como si fuera su hermana pequeña, se quedó arrullándola mientras que ella aún lloraba entre sueño.

5 minutos tardo simón en llegar, los guardias lo dejaron seguir, ya que lo habían reconocido, pues varias veces llego junto con alison, simón dudo por un momento en sí hizo bien en haber ido, saco el valor y toco. Adentro se escuchaban risas y voces de hombres. Eso lo enojo y golpeo con fuerza la puerta.

Derek fue el encargado de abrir, este no se sorprendió de ver a simón, él tenía la sospecha que él vendría.

_ señor Evans, que lo trae por aquí. – pregunto Derek sabiendo la respuesta.

_ necesito hablar con Alison. – contesto simón haciendo a un lado a Derek y entrando sin permiso, al apartamento. En la sala Megan y Jenny lo miraron con enojo, pero él no le tomo importancia, la busco con la mirada. Al no verla se dirigió a su habitación seguido por todos.

La cara de simón cambio por completo al ver un hombre descamisado abrir la puerta. Jonathan lo había hecho apropósito, cuando escucho a Derek pronunciar el apellido Evans sabia de quien se trataba, así que quito su camisa y se dispuso abrir la puerta.

_ cuál es el escándalo, mi princesa duerme. – dijo despreocupado restándole importancia a la presencia de simón. El cual miraba a Alison dormida sobre su cama.

Simón estuvo así por un momento mirándola, hasta que Jonathan cerró la puerta.

_ señor debería retirarse. - le dijo Jenny, simón se quedó en el mismo sitio en silencio, luego se giró y salió.

Todos rieron satisfecho, se vengaron por su amiga. Quien estaba destrozada se había enamorado profundamente de un hombre que no sentía lo mismo que ella.

_ si vieron su cara, se nota que si siente algo por ali. – les dijo Jenny.

_ si, pero eso no le quita lo idiota. – en un tono molesto respondió Jonathan.

_ pues que lo mate los celos. – afirmo megan.

_ ya olvidémonos de él y sigamos.

Simón bajo toda prisa, estaba furioso, no podía entender lo idiota que fue al ir a buscarla, ella tenía alguien más. Llego a su apartamento y tomo hasta quedar dormido en el sofá, el sonido de su alarma lo despertó, hizo toda su rutina como de costumbre.

*

ALISON.

Me desperté con un terrible dolor de cabeza. Mi tolerancia con el alcohol es buena, pero, anoche tome como loca, la verdad lo necesitaba, baje la guardia cuando sabía perfectamente que dé él no podía obtener nada más que sexo. Que para él existo solo de noche.

La luz golpeó mi rostro, en ese momento reaccioné. Eran 7 de la mañana a esa hora ya debía de estar saliendo de casa. Salte de la cama, tome la ducha más rápida del mundo, busque un vestido negro, que tenía a la mano, peine mi cabello en una cola y corrí con mi bolso, las llaves y los tacones en la mano. Mis amigos estaban todos tirados en la alfombra de la sala, no sé que haría sin ellos.

 Nunca me había pasado, y lo que paso no tenía por qué afectarme a mí, mucho menos a mi trabajo. No podía permitir que una mala pasada destruyera.

*

Alison condujo a toda prisa, eran las 8 y 10 minutos, únicamente eran 10 minutos, pero como nunca llegaba tarde, las miradas extrañadas de todos sus compañeros no se hicieron esperar.

_ no ha pasado nada. – se repetía ella dándose ánimo. – solo es mala racha, todo mejorará, solo debes sacar y ya. – se repitió una y otra vez Alison tratando de convencerse.

Las puertas del ascensor se abrieron, Lili la vio sorprendida.

_ Ali, que te ocurrió. –dijo preocupada.

_ nada malo solamente me tomo más tiempo que de costumbre.  – dio mientras se acerca.

_ el jefe te espera y parece de mala.

_ no te preocupes. – dijo mientras se acercaba a la puerta, la verdad, ya no le importaba lo que pudiera salir de la boca de su jefe, haría su trabajo como siempre y si él no estaba contento con eso simplemente se iría y listo, no tenía por qué complicarse y mucho menos aguantarse. _ señor me necesitaba. –dijo mientras tocaba la puerta.

_ pasa. – se escuchó del otro lado. Simón estaba con la mirada fija en la computadora. _ 10 minutos tarde señorita López, estuvo buena la noche.

_ lo siento. – le contesto Alison sin ninguna expresión en su rostro. – necesita que le ayude con algo.

_ que tenemos para hoy? – pregunto.

_ nada importante señor, la reunión con los inversionistas quedo para mañana. –dijo ella indiferente.

_ en ese caso reserva una mesa en el mejor restaurante para esta noche, compra un gran ramo de rosas y hazlos llegar a Susana. – dijo él mirándola, ella no lo miro y se centró de apuntar en su Tablet toda información para realizar el pedido de su jefe.

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